Capítulo 24

356 11 1
                                    

Reproducir "Alguien que Bese como Tú" de Pedro Suárez-Vértiz

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

21 de Junio del 2013

Pasaron exactamente 3 meses luego de que Lauren se marchara.

La tatuadora no la había olvidado, pero debió aprender a vivir sin ella. Si volvía a verla, no quería estar destrozada... Si volvía a verla, quería que la pintora sintiera que su sacrificio había valido la pena. ¿Se había enojado con Lauren? Por supuesto, pero solo al principio,... luego supo que ella habría hecho lo mismo para no dañarla.

Ese día, Troy y ella llegaron a la tienda de tatuajes 5 minutos antes junto a la pequeña Brooke, de 5 meses. Ally estaba demasiado ocupada en ese momento ultimando detalles en el departamento en Magdalena al que se mudaría junto a su nueva familia, así que al hombre no le había quedado más remedio que llevar a su hija al trabajo... Y esta es la historia de cómo Troy terminó con un bolso rosa en su hombro.

Camila: Es tan pequeña. -Dijo por segunda vez en el día. En realidad, Camila repetía esto cada vez que veía a Brooke, quien parecía ser menor de lo que era.

Troy: Siempre pensé que la tía del bullying sería Dinah... Ya veo que me equivoque.

Camila: Es inevitable, Troy. -Se excusó- ¡Mírala! ¡Estoy segura de que ese sonajero es más grande que su cabeza!

Troy: Oye, no te pases. -Pidió mientras besaba la pequeña cabeza de su hija, quien intentaba arrancar cada parte del pequeño sonajero con sus encías- Vámonos de acá, Brooke. No escuches a tu tía fastidiosa. Ella solo tiene celos porque tienes el papá más bacán del mundo...

Y aunque Camila rió ante la broma, en su mente las palabras le hicieron recordar a su hermosa pintora de enorme ego. Se preguntó si la volvería a ver... Se preguntó si aún la amaría... Se preguntó si aún la recordaría... Y, más importante aún, se preguntó si aún vivía...

***

Camila escuchó la campana de entrada sonar y se volteó a mirar... No tenía a nadie a quien tatuar, así que era lo más interesante que podía hacer. Se sorprendió al notar que Austin entraba al lugar, y mucho más al verlo hablar con Troy para luego dirigirse a su puesto.

Austin: Buen día, Camila. -La saludó antes de dar dos besos en su mejilla.

Camila: ¿Por qué tan feliz? ¿Encontraste algún novio?

Austin: ¡¿Novio?! ¡Puta, qué asco! -Exclamó mientras fingía vomitar y se reía- No tengo novio. Me acuesto con el primero que llega, ya lo sabes...

Camila: Sí, creo que lo entiendo. -Rió.

Austin: Seguro te has preguntado por qué he venido, -Dijo luego de unos segundos mientras colocaba sus manos rodeando su propia cintura- pues quiero un tatuaje.

La Tatuadora De Libélulas - Versión PeruanaWhere stories live. Discover now