Capítulo 11

484 13 0
                                    

Reproducir "Lo Último Que Hablé Ayer" de Libido

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

De no haber estado Lauren fumando recostada sobre el asiento del piloto de aquel Toyota Zelas negro, no habría reconocido el automóvil y su propietaria

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

De no haber estado Lauren fumando recostada sobre el asiento del piloto de aquel Toyota Zelas negro, no habría reconocido el automóvil y su propietaria. Camila solo había estado dentro de él una vez, y cuándo lo hizo era de noche, así que no pudo detallar con exactitud el exterior. Ahora que los rayos del sol del atardecer lo iluminaban, la tatuadora podía darse cuenta de que el auto deportivo era bastante caro, pero a la pintora no parecía importarle esto, pues había manchones, abolladuras, ralladuras y tierra estropeando la pintura.

Lauren: Pensé que serías más rápida, Camila. -Se burló mientras se alejaba de su auto y abría la puerta del copiloto a la tatuadora. El cigarrillo fue a parar al suelo de la calle.

Camila: Pues, pensaste mal, Lauren. -Respondió antes de entrar al auto con cierta torpeza, casi presionando un botón que estaba segura era peligroso.

El interior no estaba mejor que el exterior. Estaba completamente manchado con pintura, había envoltorios de comida sobre la alfombra y vasos de café vacíos sobre los asientos.

Lauren: Espero que te guste mi basural... -Murmuró con una sonrisa antes de cerrar la puerta, rodear el auto y subir.

Camila: No importa lo que yo piense. Tú seguirás teniéndolo así.

Lauren: En eso tienes toda la razón. -Coincidió por una sonrisa.

Camila: ¿A dónde vamos, Lauren? -Preguntó luego de unos segundos mientras Lauren se comenzaba a abrochar su cinturón. Y lo hacía con delicadeza, como agradeciéndole a aquel objeto por mantenerla a salvo.

Lauren: A mi estudio, por supuesto. -Contestó como si esto fuese obvio- Han pasado 2 días,... ¿lo haz olvidado?

Y, aunque se sentía mal saber que Lauren solo estaba buscándola para pintar su cuerpo desnudo un poco más, no pudo enojarse, pues la joven simplemente estaba haciendo su trabajo.

Camila: No,... por supuesto que no. -Mentía. Camila rió cuándo Lauren acaricio el volante del auto como si este fuera un bebe.

Lauren: ¿Por qué te ríes?

Camila: Quiero hacerlo. -Contesto con un leve encogimiento de hombros.

Lauren: Yo quiero besarte, pero aun así me contengo... -Contraatacó con una de sus cejas elevadas. Y cualquiera se habría dado cuenta de que la tatuadora había olvidado como respirar.

Camila: Estas demente, Lauren. -Quiso decirlo como una broma, como si no deseara aquel beso más que a nada, pero el temblor en su voz fue inevitable.

Lauren: Lo sé, -Afirmó antes de poner en marcha el auto- y viniendo de tus labios es un halago.

Camila: ¡Asu!, ¿lo dices en serio? -La interrogó entre carcajadas.

La Tatuadora De Libélulas - Versión PeruanaWhere stories live. Discover now