Capítulo Treinta y seis

858 78 23
                                    

Afuera la lluvia golpeaba con fuerza el techo de lámina del cobertizo de madera, apenas podía escuchar ha Anali.

-¿Como que sientes "algo" por mi? ¿que es? ¿que sientes?- pregunto Anali con el entrecejo fruncido apartándose un poco de él.

Como podía decirle lo que sentía si ni siquiera él estaba seguro, nunca antes se había sentido así con nadie. Nunca había sido bueno expresando sus emociones o sus sentimientos.
Volvió a abrazarla con fuerza.
-Solo se que tu eras lo que mas extrañaba de Seul desde el primer día que llegue aquí. Que estando solo aquí extrañaba toparme con tu mirada cuando necesitaba aprobación y que mientras dormía extrañaba tanto tu calor, estaba apunto de regresar a Seul sólo por ti... Y la verdad, me estaba aburriendo mucho, no tenia con quien pelear- escuchó reír a Anali contra su pecho. Le levanto el rostro para mirarla y vio lágrimas en sus ojos. Él hizo como que lloraba también y Anali rió de nuevo golpeándolo en el pecho.

Estar así, con los brazos alrededor de la cintura de Tae, con la cabeza recargada contra su cálido pecho y sus manos acariciando el largo de su cabello, sentía que no necesitaba nada mas en la vida. No quería moverse, no quería que ese momento terminara jamas.
-Debes quitarte la ropa o te enfermaras- la voz de Tae sonó ronca.
-¿Estas seguro de que quieres que me quite la ropa aquí? -Anali lo miró con una de sus cejas levantada.
Taehyung no lo dudo ni un segundo.

Cuando llegaron a la casa de huéspedes, ambos chorreaban agua y sus zapatos estaban cubiertos de lodo.
Taehyung la hizo subir a toda prisa las escaleras hasta su cuarto.
-Ven -le dijo una vez dentro para hacerla entrar al baño.
Cuando entro al pequeño cuarto de baño (el cual era aun mas pequeño estando los dos adentro), él se quito la playera y la arrojo al piso. Al verla entrar, comenzó a destrabar los pequeños botones de su blusa.
-¿Pe-pero... que..? -Anali no entendía de que se trataba, ¿a caso quería cumplir alguna fantasía en el baño?
Taehyung la miro con cara de no comprender.
-Mi nana... Quiero decir mi abuela, hacia esto cada vez que me mojaba bajo la lluvia- Anali aun no entendía- me decía que si me bañaba con agua fría después de jugar bajo la lluvia no me enfermaría.
-...y, ¿funciona?- Anali aun estaba escéptica.
-Oh, vamos Anali. ¿No creerás que es una broma mía?- le dijo desesperado, haciendo resbalar su blusa por sus hombros- solo metete allí y sal rápido- le ordenó dándole un empujón dentro del espacio de la regadera.
Anali salio después de un segundo. Tae estaba sentado en el retrete con una gran toalla en las manos, al verla salir se levanto y se la dio, enseguida entro él.
Para ser honesta, estaba algo decepcionada. Esperaba algo mas apasionado, esperaba que al llegar Tae le arrancara la ropa mojada, la arrojara a la cama y le hiciera el amor como solo el sabia hacerlo.
Anali, salio del baño envuelta en la enorme toalla. Buscó en su bolso de lona la ropa que habían comprado esa mañana.
Tae salio en ese momento del baño.
-Ponte esto- le dijo mientras caminaba al perchero dándole su gabardina color miel.
-Pe-pero...- Anali aun estaba desnuda bajo la toalla así que dudo.
Tae alzo una ceja sin comprender por que no le daba la toalla.
-Por Dios Anali. Necesito la toalla es la única que tenemos.
Queriendo y no, Anali se deshizo de la prenda entregándosela. Se comenzó a poner la gabardina cuando Tae se abalanzó sobre ella, no tuvo tiempo de abrocharla.
Taehyung la arrojó sobre la cama quedando atravesados a lo ancho. Taehyung metio una de sus manos por dentro de la gabardina para acariciar su cintura y su cadera con la palma de su mano pasándola por uno de sus muslos, sobre sus piernas mientras su boca la besaba con languidez, con suavidad, saboreando lentamente cada labio, de momentos profundizaba el beso introduciendo la lengua en su boca rozandole los labios y tocándole ligeramente la lengua.
Anali sentía que explotaría cuando la mano de Tae bajo por su vientre hasta su intimidad comprobando su humedad.
Tae no dejo de tocarla y su cuerpo comenzó a convulsionarse, retuvo el aliento cuando sus dedos resbalaron en ella.
-Por favor Tae -le rogó mirándolo a los ojos- por favor.- Las manos de Anali bajaron hasta encontrar su miembro erecto y lo llevo hasta donde lo necesitaba, ahora fue él quien retuvo el aliento al sentir su calor en esa parte tan sensible de su cuerpo.
Anali comenzó a mover su cadera urgiéndolo a entrar, Taehyung cerro los ojos por un segundo exclamando una maldición.
Se levanto de la cama, quedo de pie frente a ella, Anali suspiro estirando las manos hacia él para apurarlo, en respuesta él tomó sus tobillos que colgaban de la cama y los jalo hacia si para que su cadera quedara justo al borde de la cama y sus piernas le rodearan la cintura. Tae tomo su miembro endurecido y lo introdujo en ella. Anali respiraba superficialmente pero al sentirle entrar en su cuerpo retuvo el aire en sus pulmones. Su respiración siguió el ritmo de sus embestidas.
La llevo al orgasmos varias veces, ella lo acaricio a él, como quiso, como su instinto de mujer le decía hacerlo guiada solamente por los gemidos roncos que salían de su garganta.
No supo cuantas horas pasaron, acariciándose, besándose haciendo el amor una y otra vez, hasta que una explosión de risa Tae le dijo:
-Me has dejado hambriento.

Se vistieron y Tae le ayudo a sujetarse el cabello, en un gesto que la hizo morir de ternura.

Bajaron a la cocina y ya estaban lavando la loza.
Taehyung, avergonzado le pidió a la dueña algo de comer. La mujer no podía negarle nada a Tae. Presionándole las mejillas fue por la comida.
Anali y él agradecieron su amabilidad con repetidas inclinaciones.
Tae le sonrió con ternura cuando dio el primer bocado.

Todos caían bajo el encanto de Tae.

Todos caían bajo el encanto de Tae

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Por ConvenienciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora