Capítulo 21

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Estaba recostada sobre un sofá, eso fue lo que notó al abrir los ojos. Se levantó, sintiendo el cuerpo pesado, ¿era posible que le doliera la cabeza? Porque era como si algo la presionara para mantenerla abajo. No reconocía el difuso lugar, pero tenía una extraña sensación de deja vu, como si ya hubiera estado ahí. El golpeteo en la puerta solo empeoraba su jaqueca, así que, se aproximó con lentitud, como si flotara en el aire y luchara con la pesada atmósfera para avanzar.

Joe apareció en ese momento por el pasillo, con cansancio, y abrió la puerta, dejando a Mad detrás de esta sin darse cuenta, pues no la veía.

—¿Qué haces aquí?

Oh no, era ese sueño otra vez.

—¿Por qué hoy?

Quería ver quién era la chica, pero la puerta y el cuerpo del joven se lo impedía.

—Quiero quedarme esta noche contigo. ¿Me permites quedarme en tu última noche acá?

"Por favor, di que no", pensó.

—Claro que sí, no sabes cuánto estuve esperando a que me dijeras eso.

No necesitaba ver la escena para saber lo que sucedía, pues lo recordaba. Ella creyó que quizás Melanie había sido la chica del sueño, pero estaba teniendo ese sueño de nuevo, significaba que eso todavía no pasaba. ¿Él deseaba todavía a otra mujer?

 ¿Él deseaba todavía a otra mujer?

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Despertó con el rostro empapado. ¿Había estado llorando mientras dormía? Al parecer sí, aquel sueño la había afectado más de lo que quería. Le dolía mucho la cabeza, sintiendo como si se estuviera inflamando y estuviera a punto de explotar, o como si estuviera siendo aplastada lentamente por una plancha de presión.

Fue recuperando el control de sus músculos, sintiendo adolorida su zona pélvica y con cierto calor extraño que le recorría el cuerpo. Fue entonces que percibió que alguien la abrazaba por detrás y un olor que le encantaba, recordando rápidamente lo que ocurrió con Joe hasta hacía solo unas horas. Debido a sus leves movimientos en la estrecha cama, el joven se fue despertando, sonriendo al ver que ella estaba a su lado.

—Buenos días, princesa —la saludó él, con su voz ronca.

Ella volteó la cara para poder verlo. Joe tenía su rostro alzado sobre el de ella, por lo que, sus miradas se encontraron. Él sonreía, pero ella estaba sorprendida, no porque él estuviera ahí, sino porque estaba pasando lo que había soñado el día de su cumpleaños.

—Nunca esperé despertar a tu lado, contigo entre mis brazos. Espero que no sea solo un sueño.

Él siguió sonriendo y ella le devolvió el gesto, con timidez. Quitó su mano que la abrazaba por el vientre y deslizó con delicadeza su dedo índice por el rostro de la chica.

—Me alegro de que no sea solo un sueño —murmuró Mad.

—Yo también. —Sonrió.

Mad le sonrió y se sonrojó. Él acercó sus labios a la clavícula de la chica, intentando empezar de nuevo. Por unos segundos, ella disfrutó de los roces fogosos de él, pero pronto se volvió consciente de la realidad y lo apartó, para luego dirigir su vista al reloj que tenía sobre el velador.

Mad #PGP2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora