Two Souls (Sans x Lectora)

Capítulo 39

WARNING

Este capítulo contiene escenas sexuales, no aptas para gente sensible.

¿Deseas continuar?

SI❤          NO

Las pequeñas pupilas blancas de Sans no dejaban de mirarte, en busca de algún movimiento por parte tuya; a causa de la sorpresa no pudiste visualizar la ropa que llevaba Sans en ese momento. Pero ya que ninguno abría la boca para decir nada le observaste bien, dándote cuenta que llevaba su chaqueta de siempre pero sin su camisa, con lo que sus costillas estaban a la vista y por último poseía un pantalón negro de chándal, del cual te estabas preguntando de donde lo había sacado.

Sans yo...-.Antes de poder continuar el esqueleto había desaparecido de su antiguo lugar para aparecer delante de ti; pegaste un bote por la sorpresa ya que no te esperabas ese repentino movimiento. Alzaste tu mirada para buscar sus pupilas pero Sans te agarró de la barbilla mientras se iba acercando a tu rostro, sentiste que tus pulsaciones volvían a dispararse.-¿Qué me haces niña? No puedo sacarte de mi cabeza.-El sonido de tu corazón latiendo con violencia retumbaba en tus oídos, estabas segura que Sans podría escucharlo si el sonido de la lluvia cesara; en un momento de despiste los dientes de Sans chocaron contra tus labios.

Observaste el rostro del esqueleto mientras tus labios estaban presos por su mandíbula, era una sensación rara ya que era suave y duro al tacto; Sans pareció darse cuenta de que no disfrutabas de su acción y apretó sus huesudos dedos contra tu mandíbula consiguiendo abrirla. Ibas a protestar por su acción, pero de repente algo se introdujo en tu boca silenciandote.

Sans había hecho aparecer su lengua y la había introducido sin tu permiso en tu boca y en este instante la recorría saboreando tu sabor; tu respiración se agitó mientras sentías a Sans recorrer tu cavidad bucal, su sabor era extraño, era fresco y refrescante el cual te recordaba a la nieve. 

Sans se apartó un poco de ti liberando tu boca mientras que un pequeño hilo de vuestra saliva os mantenía unidos.-¿Quieres continuar?.-Sentiste sus manos agarrar tus muslos haciendo que rodearas sus caderas, quería estar lo más unido a ti posible. Ante la pregunta de Sans solo pudiste afirmar, ya que desconocías a que se refería, pero si involucraba seguir sintiendo esas sensaciones estabas dispuesta a todo.

El esqueleto que te tenía atrapada contra el sofá amplió su sonrisa mientras subía su mano hacia tu pecho.-Te haré pasar un buen rato niña.-Volvió a introducir su lengua en tu boca con desesperación. Esta vez, con más confianza, le correspondiste moviendo tu lengua contra la suya en una danza de placer; Sans no se quedo atrás y mientras jugaba con tu lengua agarró tu pecho izquierdo. Soltaste un jadeo por su acción, el cual fue callado en la boca del esqueleto que te brindaba tantas sensaciones placenteras.-Estas muy sensible.-No pudiste evitar sonrojarte más si era posible, su comentario te hizo sentirte nerviosa.

Sans soltó una risa observándote y paso su lengua por su cuello provocando que un escalofrío recorriera todo tu cuerpo.-Me vuelves loco ****.-Mordiste tu labio inferior nerviosa y alzaste tu mano hacia Sans, tenías la necesidad de acariciarlo al igual que hacia él contigo. Así que cuando tu mano llegó a su destino empezaste a pasar tus dedos con suavidad por las vértebras de tu querido esqueleto, el cual no tardó en soltar un gemido contra tu cuello; Sans contraatacó introduciendo su mano por debajo de tu jersey acariciando directamente tu pecho, con esa acción te sacó un par de gemidos. Sentir la textura de sus huesos frotar ese punto sensible de tu pecho te obligaba a soltar varias gemidos, era algo que no podías evitar. Sans elevó tu jersey liberando tus pechos y no tardó en pasar su lengua por aquellos botones que decoraban la cima de tus pechos, sentir su lengua pasearse te provocaba más sensaciones de placer.-Sa-Sans....-Su nombre salió de tus labios en modo de gemido mientras disfrutabas de las sensaciones que te regalaba, la palma de tu mano se frotó contra sus vértebras para brindarle placer, no querías ser la única que disfrutara.

Los gemidos y los jadeos de Sans chocaban contra tus pechos mientras no dejaba de prestarles atención con su lengua, estabas segura de que tu entrepierna debería estar muy mojada gracias a la atención de Sans; tu mano fue descendiendo por las vertebras  dirigiéndose a la pelvis, desconocías cuales eran los puntos débiles de los esqueletos, pero te ibas a encargar de descubrirlos en ese momento. El esqueleto agarró tu mano antes de que llegara a esa zona y la elevó apresándola contra el mullido sofá.-Debes de estar lista para querer ir a esa zona.-No entendiste a lo que se quería referir, pero liberó tu mano para acto seguido sacar de su pantalón ese miembro azulado que anteriormente habías visto.

Verlo tan de cerca provocó que tu respiración se cortara por un segundo, verlo de lejos era una cosa pero ahora teniéndolo en frente era otra.-Es...grande.-Sans no pudo evitar reír ante tu comentario mientras descendía sus manos hacia tu pantalón ¿Acaso habías dicho algo gracioso? Sus manos descendieron bajando tu pantalón junto con tu ropa interior, logrando que tu pantalón cayera al suelo y tu ropa interior quedara colgando en tu rodilla; alzo tu pierna derecha colocándola sobre su hombro izquierdo dejándote totalmente expuesta ante él.

Tu corazón no dejaba de latir con violencia dentro de tu pecho mientras que tu alma pedía unirse con Sans ¿Unirse? La cabeza del miembro de Sans comenzó a frotarse contra tus labios consiguiendo que tus fluidos le lubricaran.-Estas muy mojada ****

No podías protestar, ya que simplemente las palabras no salían de tu boca, era todo nuevo para ti y solo querías disfrutar de todas esas sensaciones junto con Sans; estabas feliz de poder sentir todo este placer con el ser que amabas y que él te correspondiera de la misma forma. Realmente cuando vivías en el vacío nunca te habrías imaginado conseguir todo lo que ahora poseías, seres que te amaban por como eras y un alma nueva, la cual te llenaba de esperanza para seguir adelante; en verdad el universo de Undertale te había dado lo mejor.

Colocaste tus manos en el rostro de Sans acercándole a ti y con todo tus sentimientos dejaste salir un murmuro, lo suficientemente alto para que te pudiera escuchar.-Te amo Sans.-Tu alma vibraba dentro de tu pecho compartiendo los mismos sentimientos que su dueña; Sans te regaló una sonrisa mientras dejaba su frente descansar sobre la tuya.-Yo también te amo niña.-Sus dientes volvieron a chocar contra tus labios y en ese momento sentiste como su miembro comenzaba a entrar con lentitud en tu interior, estabas lista para recibirlo gustosa.

¿Por qué hay un agujero en casa?.-La voz de Frisk os hizo deteneros en vuestra acción, los antiguos reyes junto con sus dos hijas adoptivas habían llegado de su recado.