Capítulo 39

316 26 0
                                    

Escupo sangre, debido al impacto fuerte en mi mejilla.

-¡Bienvenidos sean, gente real! Aquí, verán una representación de lo que es ser real.

La voz de Dorothea suena de fondo y nadie aplaude, ni se escucha un solo sonido. Solo mi respiración agitada.

Otro golpe en mi mejilla y las lagrimas se asoman, amenazan por salir.

Kylan, ¿donde estás?

Todos necesitamos a un héroe en nuestro debido tiempo. Necesito a un héroe. Necesito a Kylan.

Golpeo el piso con mi cara, no sentía ya nada. Mi cara estaba dormida, fría y caliente a la vez. No podía abrir los ojos, no podía hacer nada.

Estas reuniones eran infernales, pero esta lo es mil veces más. Supongo que es por el descanso.

Un descanso a ser real. ¿Es eso posible? Siempre me había preguntado eso de pequeña, pero siempre había una parte de mi que se negaba a creer una vida así. Al menos, yo vivir una vida así.

Mi cabello es jalado con fuerza, haciéndome levantar del piso.

-Esto, señores, es ser real. -me deja Victor levantada, veo como su puño de acerca y ya puedo sentir el golpe que acabe definitivamente conmigo. Es decir, vamos, soy una niña, él es un hombre.

No puedo sentir nada, solo siento como me empujan, unos brazos fuertes me abrazan.

-Esto, es ser real -oigo una voz bastante conocida.

Lo abrazo, puedo sentir que se sorprende, pero eso no me interesa en absoluto. Estoy aliviada, y demasiado agradecida de que me haya librado de ese golpe.

-Ser real, es una cosa. Ésto, ya es otro nivel. Ésto, es exageración. Ni por más que pienses en el significado real, te vas a encontrar a una mentalidad tan cruel y bastarda como la tienes tu, junto con Dorothea. Odio ser tu hermano, eso sí es real.

Hugo termina su discurso y me levanta del suelo, con su ayuda. Caminamos y salimos de la casa, vamos a pagar por eso.

-¿Estás bien?

-Sí, claro, solo fueron unos golpes.

-Estás pálida, ahora mismo un papel tiene más color que tu. Te voy a traer agua, no te muevas.

-No es que pueda hacer mucho.

Hugo se va y yo me quedo en silencio. En algunas ocasiones mis ojos se cerraban inconscientemente, pero de inmediato oía un golpe estruendoso, lo cual me despertaba.

Esperé y esperé, hasta que un olor reconocido invadió mis fosas nasales.

-¡Kylan! -lo abracé luego de lanzar un grito.

-Te extrañé, tanto, Candle. Ahora le debo una a Hugo.

-Cállate, solo bésame.

-Como mande -dice con voz gruesa, lo cual hace que un frio me recorra mi espalda lentamente.

No tuvimos que decir más, nuestros labios se unieron en un encuentro desesperado. Las manos de Kylan reposaban en mi cintura, sin una mínima de intención de bajar. Yo tenía mis manos haciendo caricias en su cabello. Un beso lleno de amor, pero también lleno de saciedad, una saciedad de no vernos y de saber que ambos estábamos sufriendo, y no pudimos hacer nada al respecto.

Nos separamos y sonreímos, me abrazó y nuestras manos se unen. Entramos, ambos con un semblante serio. Dorothea había bajado y ya no estaba Victor ahí.

-Bonita pareja. ¿Ya lo he dicho? Me encanta ver a mi sobrino y a la que fue mi hi...

-Nunca fui tu hija -la interrumpo.

-Como digas, Megan. Como decía, ustedes hacen una bonita pareja. Lástima que ya literalmente, se hayan acabado sus vacaciones. Claro que mi lindo sobrino no tenía que venir. ¿Verdad?

Lo miro detenidamente. ¿Como es eso de que no tenía que venir?

-Ups, ella no lo sabía. Lástima. Sigamos con esto.

-¡No! -digo con voz fuerte.

Dorothea se voltea lentamente para mirarme.

-¿Cómo? -dice con voz aguda.

-Tal y como oíste. No.

Cambia su mirada, de nuevo, ya no son sus ojos verdes, ahora son oscuros, pero lo ignoro y soy más fuerte que mis emociones.

-¿Crees que esto es ser real?

-Claro que sí. ¿Acaso no recuerdas su significado? Tú eres Real.

-Claro que me acuerdo, y con este descanso que me han dado, he sido más Real afuera que acá, porque esto no es ser real, esto es sufrir, esto es maldad pura, esto es masoquismo, esto es cínico, esto es... Impuro -digo con asco, sin un solo cambio en mi tono de voz.

-¿A que te refieres con eso?

-Ella tiene razón -oigo la voz de Hugo y le sonrió -esto no es ser Real, esto es enfermizo. Van a detener esto, ya.

-No me hagas reír, Huguito. Tu hermano está de mi lado, tu también.

-No, -se rie -te equivocas. Acá no hay bandos, solo opiniones. Yo estoy a favor de mi opinión, y apoyo la de Megan.

-Hermanito -aparece Victor al lado de Dorothea, y la gente presenciando esto se queda callada -no me hagas reír. Tu vas a ser como yo, y no lo puedes negar.

Se quedan callados hasta que Hugo habla.

-Tu crees que no soy nada, sólo porque no me parezco a ti, ¿no es así? Lo he notado, me tratas como basura, me tratas como sirviente, y no es justo. Desde pequeño no has apreciado lo que he hecho, sabiendo que he hecho muchas más cosas que tu. Piensa lo que quieras de mi, no me importa si no soy lo suficientemente bueno para ti. ¿Sabes por que? Porque todo lo que tu quieres que yo sea, es en lo que yo no me quiero convertir.

Hugo se voltea y continúa su camino, Kylan lo sigue, y yo, antes de hacerlo, miro fijamente a las personas que tengo al frente y digo:

-Esta reunión, ha acabado. Gente Real, se puede ir en paz.

Real (Wattys 2017) Where stories live. Discover now