Depredador Sexual. [ChanHun/ SeYeol]

Planes. (2/3)

―Muy bien, SeHun. Entonces tu cesárea está programada para el 14 de enero. –Anunció BaekHyun mientras tecleaba algo en su computador, al parecer la cita de la cesárea.-

―Debes venir el 13 para hacerte los exámenes correspondientes. Te quedarás aquí hasta el 15 por el pos operatorio. –Siguió hablando mientras ChanYeol tomaba mi mano y dibujaba círculos en ella.-

Asentí observando como se colocaba de pie e hice lo mismo, más despacio obvio. Una panza de más ocho meses y medio es difícil de manejar. En especial con las labores más básicas, como colocarse de pie, hacer chichí, lavar tus piernas, o el simple hecho de dormir.

―Muchas gracias, Hyung. –Dije despacio mientras tomaba su mano entre las mías y las sacudía ligeramente.- Espero verte cuando nazca nuestro pequeño.

Él asintió con una sonrisa gigante mientras soltaba mi mano y la movía en el aire.- Obvio, cariño.

Solo atiné a reír para comenzar a caminar y mirarle por el hombro hasta que lo recordé. ―Ah, y felicidades.

Solté para luego ver como él me miraba extrañado, así que decidí continuar.- ¿No me ibas a decir que estás saliendo con el nuevo Vice-rector de la Universidad?

Abrió sus ojos de la impresión para luego bajar la mirada sonrojado. Simplemente reí, a veces era tan tierno, y eso que yo era menor. ― ¿C-cómo te enteraste?

―Sulli.

―Eish, mocosa traidora. –Farfulló entre dientes-.

―Suerte con JongDae, Hyung. –Grité en la puerta para luego cerrarla y entrelazar mis dedos con los de ChanYeol-.

Caminamos despacio, y en silencio. En ese momento decidí meditar todo lo que me había pasado en estos meses.

Salir de Busan había sido una de mis más grandes Chocoaventuras. Conocí a ChanYeol y a mi verdadero padre. Y en unos días conocería a quien sería el amor de mi vida eternamente.

Sonreí para mí mientras acariciaba mi abultado vientre y sentía sus ligeras pataditas.

Lo medité más, recordando a Jong In. Si no hubiese sido por él nada de esto hubiese pasado, aunque quién sabe, si no fuera tan idiota quizás habríamos terminado juntos. ¿Por qué no? Yo le gustaba y él me gustaba a mí en ese tiempo.

Negué con la cabeza mirando el jardín del hospital. ¿En qué momento llegamos aquí?.

Ladee la cabeza en dirección a Yeol y este hablaba por teléfono mientras acariciaba con su pulgar mi mano.

Se soltó de ella para sacar las llaves del auto cuando llegamos al estacionamiento y me abrió la puerta del auto, ayudándome a subir.

¡Dios! Y pensar que en unos días ya no tendré esta panza y en cambio tendré un lindo bultito entre mis brazos.

Me coloqué el cinturón y esperé a que Yeol arrancara el auto, lo cual no demoró en hacer.

― ¿Y bien? ¿Qué piensas que le dará YiFan a XunLiè? –Me preguntó mientras sacaba el freno de mano y metía los cambios para así pisar el acelerador-.

Oh, lo había olvidado. Al parecer el nombre le había encantado a mamá y MinHo, y qué decir de YiFan y Tao. Casi lloran de la alegría al saber que su nombre sería chino. Solo por ese simple hecho decidimos llamarlo XunLie, además era un nombre para nada común, hacia la diferencia entre tantos asiáticos, ¿no?.

― No lo sé. Conociéndolo quizás le regale algo costoso o inútil para un bebé. –Dije recordando la última vez que intentó regalarle algo a Lie.-