Please, don't.

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—¿Que diablos hacen aquí? Además borrachos. – reclame.

—¿No nos dejaras pasar, querida Sophie? – preguntó Tyler entrando a la casa con Josh.

Los dos se tiraron al sofá como si estuvieran cada uno en su casa, mi madre se reía silenciosamente pero esto a mi no me causaba gracia alguna.
—Tuviste que haber visto como golpee a este hombre. – dijo Josh apuntando a Tyler. Josh estaba fuera de sí, él estaba completamente borracho, ni hablar de Tyler.

—Si, Sophie, después lo golpee a él, la gente nos grabó en sus celulares de seguro pronto el vídeo estará en YouTube y nos veras peleando. – rió Tyler.

Yo solo los miraba furiosa, estaba parada de brazos cruzados solo pensaba en golpearlos a los dos en este instante. —¿Por que están borrachos? – pregunté.

—¿Será porque bebimos cerveza? – Tyler y Josh rieron fuertemente.

—¡Sophie!... – exclamó josh. –Observa esto.

—Mostrémosle nuestro talento. – agrego Tyler

Ambos comenzaron a hacer algún tipo de saludo con sus manos o al menos lo intentaban, chocaban sus manos, hacían movimientos extravagantes y toda esa parafernalia duro aproximadamente tres minutos. —¿Que demonios fue eso? – pregunté apenas terminaron.

—Nuestro saludo secreto. – respondió Josh.

—¿Saludo secreto? Esperen ¿desde cuando son mejores amigos ustedes dos?

Josh comenzó a contar con sus dedos pero le era imposible. —Digamos que desde hace dos horas o menos, no lose.

Noté que ellos no sabían lo que hacían ni lo que decían, ni siquiera estaban conscientes como para ver la realidad, tampoco era buena discutir con ellos porque no harían caso.

—Me alegra que ahora se lleven bien, es increíble, me alegra que se traten como hermanos, pero se podrían marchar de mi casa ¿Por favor? – Rogue, sin embargo ambos me ignoraron.

—Hija, no te harán caso en ese estado. – dijo mi madre aún con su risa en el rostro.

Me arrodille frente a Josh mirándolo directo a los ojos dándole pequeñas palmadas en la cara. —Josh, yo sé que estás más consciente que Tyler, por favor salgan de mi casa.

Josh me quedo mirando fijo y sonrío. —¿Te he dicho lo bonita que eres cuando estás más cerca?

Sentí como mi rostro comenzaba a ruborizarse, lo mire fijo con una pequeña sonrisa a pesar de todo Josh no cambia tanto estando borracho, él no pierde su encanto como una persona que conozco.
—Josh, No sé si odiarte o abrazarte – exprese.

—¡Ódialo, Sophie! ¡Odialo!.

—¡Cállate, Tyler! ¡No estoy hablando contigo! – grité molesta.

—¡Durante todo este mes no haz hablado conmigo! Que buena amiga tengo. – Tyler apenas logró levantarse del sofá.

—¿A dónde crees que vas? – pregunté, al ver que iba subiendo las escaleras.

—Voy al cuarto a descansar de ti, ahora si me permiten, no quiero que me molesten. – respondió como si nada.

—¡Mamá no dejes que suba a mi cuarto!

—Ay, Hija, no seas así con él, tú hacías lo mismo. - rió.

—¿Por que él puede entrar a tu cuarto y yo aún no? – preguntó Josh casi dormido.

—Josh, no pienses  en eso y mejor ya duérmete. – me senté a su lado, él lentamente dejó caer su cabeza en mi regazo como su fuese un niño exhausto, no evite sonreír de la ternura que logró provocarme.

—No te muevas de aquí. – murmuró josh, antes de caer en un sueño profundo.

Mi madre se había encargado de que Tyler no provocará ninguna estupidez dentro de mi casa, aún estaba molesta, aún quería golpearlo a los dos pero Josh logró alivianarme con su tierna actitud. Mi madre venía bajando las escaleras entre risas tapando su boca con su mano.

—¿Que sucedió? - pregunté curiosa.

Ella se sentó a mi lado. —Tyler está en tu cuarto, también se quedo dormido. – informó. —Pero él se quedo tirado en el piso no alcanzó a llegar a tu cama. – mi madre se quedo callada unos minutos mirándonos a mi y a Josh.
—Siempre creí que tú y Tyler tendrían algo, son tan unidos ustedes dos que cualquiera hubiese pensado lo mismo.

—Pero no...– replique. – Él es mi amigo, y siempre será mi amigo.

—Así veo. – ella miró detenidamente a Josh, quien dormía tranquilamente. – Él es un buen chico, Sophie.

—Lo se... Eso lo tengo entendido. – sonreí, comencé a acariciar el sedoso cabello de Josh. —Yo no me merezco a Josh, él debería buscar a alguien que de verdad lo haga feliz.

—No digas eso, tú eres una mujer grandiosa ¿Por que dices esas cosas?, además el chico quiere estar contigo, se nota que él te quiere a ti y nadie más.

—Yo también lo quiero a él y quiero hacerlo feliz pero siento que haré alguna estupidez y se decepcionara de mi nuevamente.

—¿Nuevamente? Sophie, ¿Que quieres decir con "nuevamente"?.

—No quiero hablar de eso. Mejor piensa en cómo reaccionará papá al encontrar a dos borrachos en su casa. – reí. Ella sonrió pero se le notaba que había quedado con una gran pregunta en su cabeza, la conozco.

—Te dejare sola con Josh, iré a preparar algo para comer. – me dio un beso en la frente y se fue a la Cocina.

Josh comenzó a moverse acomodándose bruscamente.
—Tu nunca me decepcionaste, Sophie. – murmuró aún con sus ojos cerrados.

—¿Estas despierto?...espera ¿oíste toda la conversación?

Él asintió con su cabeza. —No iba a dormirme, no quería desperdiciar ese tiempo dormido cuando puedo estar contigo. – sonrío.

—Te recuerdo que llegaste borracho con Tyler. – mencione, él solo rió.

—Lo se, y lo lamento, no quería llegar en ese estado, ni recuerdo en qué momento acepte ir a beber con Tyler. Pero eso no importa, fue bonito oír que también me quieres.

—Solo Dije la verdad, Josh. – él comenzó a acariciar mi rostro con su cálida mano.

—Hay algo que dijo tu madre y en la que tiene mucha razón, eres una mujer increíble, Sophie, y no sabes cómo odio cuando dices que no lo eres, cuando dices que no eres suficiente para mí, odio que digas todas esas cosas... tú eres increíble y él que no es suficiente aquí soy yo...

—No digas... – interrumpí. – tú eres un gran hombre.

Él me quedo mirando con una sonrisa en su rostro. —Te amo, Sophie.