.5

3.5K 316 307
                                    

—¿Sobre qué quieres hablar?.

Yo y Josh nos habíamos dirigido hasta el casino para poder conversar tranquilos, el lugar estaba vacío así que sería más agradable la situación.

—¿Te imaginas sobre qué quiero hablar? – pregunto Josh sonriente, Él jugaba con sus manos nervioso.

—En realidad no. – reí bajando la vista. – De ti puedo esperar cualquier cosa, sabes.

—Si sabes sobre qué quiero hablar, pero no te quieres dar cuenta.

—Tal vez, pero antes...¿Puedo hacerte una pregunta?.

—Claro, claro, lo que sea.

—Tyler te odia, y quiero saber por qué.

Esa sostenida sonrisa que tenía Josh en su rostro había desaparecido. Solo negó con su cabeza en silencio.

—Creo que él debería hablarte de eso, no yo. Además pensé que ya lo sabías.

—¿Saber que, Josh?.

Me miro fijo unos segundos. —Nada, olvídalo.

—No me dejes con esta duda, Josh... Confió en ti y sé que me dirás la verdad.

—Si confías en mí, ¿Por qué no eres capaz de estar conmigo?.

Me quedé muda mirando la mesa. Mis manos se movían incontrolablemente... Y las ganas de querer salir corriendo no me las quitaba nadie.

—Josh... Tú eres mi amigo...– Josh me interrumpió

—Siempre repites lo mismo, Sophie... Sé que soy tu amigo... Pero quiero ser más que un amigo para ti. Dime, ¿Qué otro imbecil te apoyaría, te daría cariño, te daría consejos como yo lo he hecho todo este tiempo... Desde que nos conocemos ha sido así y no puedes negarlo.

—Lo sé, eres un hombre increíble y es por eso mismo que no debería estar contigo... No me merezco un hombre tan genial como tú lo eres.

—¿¡De que hablas!? Yo te quiero... Y no me importa ese punto de vista que estás tomando.

Me quede callada, ya no supe más que decirle a Josh. Él me miraba con tristeza logrando que yo sintiera remordimiento por haberlo rechazado tantas veces.

«Piensa... Como te hubieses sentido tu sí el chico que tanto amabas, ese que era el líder del equipo del fútbol de la escuela te hubiese rechazado tantas veces como lo haces con Josh ahora...»

Mis pensamientos se maquinaban tan rápido en mi cabeza que no lograba asimilar toda esta situación y menos podía concentrarme teniendo a Josh al frente mío mirándome con esa carita de gato con hambre.

—Necesito pensar, Josh. – fue lo único que atine a decirle.

—Esta bien...Sobre el tema de Tyler, yo quisiera contarte, de verdad, pero ese no es mi trabajo... Tyler debe hablarte de eso. Ahora te dejo sola... – dijo tomando su mochila listo para irse.

—Josh, espera... Lamento si te hecho sentir mal. – Exprese. Josh sonrió.

—Nunca me haz hecho sentir mal... Contigo siempre estoy mejor.

Se levanto de su asiento y se fue dejándome sola en el desolado casino.

<<>>

10:00 de la noche, estoy tendida en mi cama mirando al techo. Se supone que debería estar buscando algo que ponerme para esta fiesta pero mi cuerpo no reacciona a los movimientos, si, eso se llama flojera.

Please, don't. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora