—Gracias —dijo el moreno, sabiendo el esfuerzo que suponía para Stiles hacer algo por cambiar algo que llevaba tanto tiempo arraigado a él, como era el pánico a los animales.

—¿Qué me has preparado? —preguntó dándose la vuelta y cruzándose de brazos. "Una noche que no vas a olvidar" sonó en su mente. Rio en voz baja porque esperaba eso mismo, pero también esperaba hablar, cenar tranquilamente, y que todo fuera surgiendo. Se moría de ganas por Derek, pero sentía que aquello no podía resumirse a sólo un polvo—. De cena, que te veo las intenciones —comentó el castaño de buen humor.

—Vaya, ya sabes que soy un caballero —dijo haciéndose el ofendido—, no iba a hacer nada que tú no quisieras.

—Me alegra saberlo —repuso en voz baja, observando cómo el moreno le cedía el paso para que fueran a la cocina.

—He decidido preparar algo sano, y como sé que prefieres las ensaladas, he hecho una césar, espero haber acertado.

—De pleno —asintió Stiles con una sonrisa ilusionada—, son mis favoritas.


Fueron al comedor para comenzar a cenar tranquilamente. Bebieron vino a pesar de que Stiles no fuera mucho de ellos, pero el hecho de poder beber tranquilamente con Derek, sin tener luego que llevarlo a la residencia, le animó a ello.

El castaño le relató los avances que había tenido con la psicóloga, que le estaba costando bastante llegar a un punto más adelante, y Derek le aseguró que no quería eso de él, que él iba a estar con Stiles fuera como fuese, y que pese a ese bache que había entre ellos, él estaba dispuesto a renunciar a hablar y tratar con animales si el bienestar de Stiles estaba en juego.


—Yo tampoco te puedo pedir que hagas todo eso por mí —murmuró Stiles contemplando su vino—. Si vamos a empezar una relación como lo vamos a hacer, y estamos afianzando una base, no puedes ceder a todo por las buenas. No sólo se trata de que tú te vuelques conmigo y yo sólo me dedique a ver cómo sacrificas todo por mí, yo debo cambiar cosas de mí mismo para que esta relación vaya bien. Sé que sólo lo haces por mi bien, pero yo quiero hacerte feliz, no sólo ser el que deba ser "cuidado". Tú también mereces que te cuiden, y quiero ser yo el que lo haga. —La mirada de Derek bien podía haberlo atravesado, o derretido directamente, porque le encantaba que lo observara con tanto embelese. Se daba cuenta en momentos como aquel que realmente quería estar con él, que el resto de cosas se solucionarían tarde o temprano, de una forma u otra, y deseaba que todo aquello lo pudieran superar y estar juntos. Extendió la mano y la agarró suavemente, viendo cómo los ojos de Derek bajaban hasta observar el agarre que tenían los dos, y suspiró en voz baja.

—Te quiero, Stiles —susurró el moreno con media sonrisa—. De verdad, no lo digo por decir, ni lo digo porque te vayas a quedar conmigo esta noche. Te lo dije en aquel día tan difícil para ambos porque lo siento, te quiero a pesar de todo. Y no sabes lo feliz que me hace que intentes hacer todo esto sólo por mí. Soy muy afortunado.

—No lo eres, te ha tocado estar con un tío que es todo lo contrario a lo que te mereces, porque de verdad ojalá pudiera compartir la pasión que tú tienes por los animales.


No necesitó que dijera nada más, porque el simple hecho de que dijera aquel deseo, era porque de verdad le gustaría cambiar por él. Stiles sabía lo importante que eran los animales para él y allí estaba, preocupado porque Derek dejara de quererlo por no poder cambiarse a sí mismo.

Pero él lo quería así, lo necesitaba porque era la clase de persona que siempre había soñado, porque de verdad sabía de sus limitaciones, y era consciente que no era perfecto para Derek, pero que sin embargo el moreno sabía de sus limitaciones y veía el esfuerzo que hacía el castaño por superarlas. Y era sólo por hacerlo feliz.


Lo atrajo a sus labios, besándolo una vez más, añadiendo un beso más a los que se habían dado en incontables ocasiones, pero que en aquel momento era visceral, agradecido y a la vez cargado de todos los sentimientos que tenía por el castaño.

Stiles pasó sus brazos por detrás del cuello del moreno, pegándolo a él, haciendo que estar sentados fuera incómodo para ambos, por lo que Derek se levantó, arrastrando con él al castaño y uniendo sus cuerpos como si realmente fueran uno.


Suspiró contra sus labios, notando que le estaba llevando hasta su cuarto, colando sus manos por el estómago y la espalda, tibios por el calor que emanaba del cuerpo de Derek. Sintió frío al principio cuando su torso desnudo dio con el frío de la habitación, pero con los besos del moreno, cada vez más caldeados, sentía como si tocara el cielo.

Gimió al sentir las manos de Derek colarse por sus vaqueros, palpando sin pudor alguno sus nalgas, apretándolas y haciendo poner los ojos en blanco, notando el roce de su miembro con el del moreno. Éste bajó sus besos por el cuello para luego separarse de Stiles, mirándolo con algo de pena.


—Sólo puedo quedarme a la mitad del camino, Sti —murmuró acariciando sus caderas, bajando la vista por su estómago.

—¿Qué? —preguntó algo confuso.

—No puedo llegar hasta el final. Espero que no te moleste.

—¿Por qué? —espetó casi con frustración.

—Déjame contártelo más adelante, ¿vale? No me odies por no poder hacer más.


Stiles fue a preguntar una vez más, pero Derek lo echó en la cama, desabrochando sus vaqueros y bajando su ropa interior, y ya no pudo pensar en nada más cuando la lengua de su novio comenzó a recorrer su miembro con presteza, haciendo que perdiera totalmente el hilo de sus pensamientos.


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Si no sabéis por qué no puede hacer más, es que no estáis en lo que tenéis que estar (?). Sacad vuestras propias conclusiones jjjjj

Estoy subiendo desde el móvil, así que espero que lo suba bien la mierda de app xDDD y sigo sin wifi en casa, así que siento la escasez de actualizaciones, os lo compensaré en cuanto pueda.

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Wolf out [m-preg]Where stories live. Discover now