Enamorada del hijo de un Faraón

Y ahora estás tú sin mí

El dolor de cabeza no fue tan terrible como  imaginé, pero apenas abrí los ojos vi a Halima y ésta me metió algo parecido a una pastilla enorme a la boca y en seguida me dio un vaso que por el sabor descifré, era té. Después de saciar mi sed, aún con la garganta seca, y con menos dolor de cabeza logré preguntarle algo.

-¿Qué pasó? ¿En dónde estoy? ¿Y Angelo?

-Señorita, antes de contestarle, déjeme saber si lo que le he puesto en su boca, funciona, ¿cómo se siente?

-El dolor de cabeza se ha esfumado, casi, sin embargo tengo la garganta como si hubiese tragado mil astillas...

Rió por lo bajo.

-Después de todo lo que sospecho tomó ayer...me sorprende que solo le parezcan astillas y no todo una hectárea de troncos de árboles completos...

Me uní a su alegría y volví a insistir con mis preguntas, entonces me contó todo lo sucedido.

-Bueno, bueno señorita, ayer ya casi era pleno día, la reina de Egipto y el rey de Grecia se empezaron a desesperar al ver que no volvían, pero de pronto, los vimos, totalmente borrachos, pero consientes, iban apoyados el uno en el otro, conversando con normalidad y riéndose de la nada, los llevamos de inmediato a cada uno de sus cuartos, allí técnicamente se derrumbaron, apenas despertaban y ahí fue cundo te di estas pastillas mágicas que hacen que no te sientas tan terrible como deberías...

-¿Qué hora es?

-Las cinco de la mañana señorita...

No hubo ninguna duda de que la pesé de lo mejor en esa noche, me divertí al máximo, y, ¿lo mejor? hoy ni siquiera tenía resaca.

-¿Dónde está Angelo? ¿Ya despertó?

-Está afuera

Me sentía con las energías suficientes para salir y de hecho necesitaba aire fresco. Halima tuvo que guiarme para salir a un jardín, las hierbas iban secándose poco a poco al igual que las flores, vi a Angelo parado viendo al infinito con una sonrisa boba. Le pedí que se fuera a Halima y me acerqué a él, nos sonreímos y luego, a mi parecer, ambos acordándonos de anoche, reímos con fuerza.

-Haber, haber, ayer te desapareciste y me tienes que poner al tanto de tu noche-explicó él-, al parecer fue satisfactoria ¿no?

-Justo lo que necesitaba,  de hecho...bailé como una completa loca, conocía varias amigas, y...muchachos...

-¿Besan bien?

-Yo nunca mencioné el tema-dije jocosamente.

Soltó una carcajada y me miró levantando la ceja.

-Uno de ello fue...wow...no soy en extremo experimentada en esa situación,peropuedo decir que ha sido uno de los besos más apasionados,pero a la vez tiernos que me han dado...y los demás, eran buenos conversadores...¿cómo fue tu  noche?

-Después de que nos separamos técnicamente conocí a mucha gente igual que tú, conversé con ellas, pero nada interesante. Luego empecé a beber y a bailar y si que se puso bueno...conocí a una rubia, excelente hablamos y también puedo describir sus besos como los describiste tú con él...fue...estupendo... ¡debemos repetirlo!

La pasamos hablando de lo loco que había sido todo y de todo lo que logramos hacer y olvidar...y eso último fue un error, porque ambos teníamos las almas desgarradas por heridas de viejos amores, viejos amores que se fueron y que dejaron hecho en nuestros corazones un nido de amor vacío...una y otra vez...

-Confiaré en ti Cleopatra, te contaré la razón por la que tanto necesitaba esa noche de olvido y besos...y confío en que tu también me compartas tu dolor, porque sé que lo estás llevando muy pesado.

-Lo haré, yo también lo necesito...

-Yo la amaba-una lágrima tímida rodó por su mejilla-. Ella era mi todo,  el centro de mi universo y de mi vida, hice lo inimaginable por ella. Siempre me decían que yo era muy esbelto y guapo, comparado con la hermosura de ella, decían que era casi nula...y yo la veía como la más preciosa, la perfecta y la mejor novia de este mundo, no teníamos tantas cosas en común, pero nos amábamos. Teníamos peleas fuertes y yo siempre me encargaba de arreglarlas, yo le daba flores, le escribía cartas y le entregaba notitas de amor, cualquier pequeño detalle, la ponía como mi prioridad, estaba con ella incondicionalmente.

-Y ella no lo valoró- mi corazón se removió por la tristeza de recuerdos y cicatrices pasadas-. Ella te hizo pensar que no te amaba tanto como tú a ella.

Ahora me abrazó y lloró con fuerza, en lágrima viva de hombre enamorado.

-Yo por ella daba hasta la vida, yo la amaba con toda el alma y si me lo hubiera pedido, yo hubiese cruzado océanos y destruido ejércitos...yo la amaba con todo mi ser...y entendí al fin que ella me amaba solo a medias, que aveces lo hacía y a veces no, o al menos eso era lo que me hacía entender. Eso es lo que hizo que decidiera alejarme, que decidieras tratar de irle olvidando poco a poco...

-Oh, querido...y supongo que ahora estás tan roto porque ella tal vez y ni siquiera a notado que tu te has propuesto alejarte, con la esperanza de que ella fuera a buscarte..., con la esperanza de que ella hiciera por ti, todo lo que tu has hecho...deseas más que nada que ella vuelva a ti, para no dejarte ir, deseas saber que ella te ama tanto para buscarte y ser felices juntos...

Con un hilillo de voz susurró:

-Así es

Sentí todo su dolor, sentí la amargura de su corazón quebrantado. Y la esperanza del querer saber que ella le amaba tanto para buscarlo y arreglarlo todo, pasó demasiado tiempo derramando lágrimas de dolor y deseando que ella sufriera tan fuerte como él ahora...se alimentaba de pasado.

Me quedé callada, acariciando amigablemente su espalda, y cuando contuvo sus gritos internos preguntó por mi historia.

-Me entregué en cuerpo y alma también, pero tenía que luchar por su amor, él infundó esperanzas en mí que luego supe nunca fueron verdad. Le pedía fidelidad y haría lo que sea, pero no, nunca me lo dio, y a decir verdad-solté una lágrima- me dolió hasta el fondo del alma, me duele saber que todo fue mentira y que solo quiso verme amándolo mientras se divertía conmigo y con otras también. 

No le compartí mucho, porque sé que lloraría más que él, la herida no había sanado ni un poco.

De pronto hice sonar una canción 

 "Y  ahora estás tú sin mí, y ¿qué hago con mi amor? El que era para ti..."

Sonó una y otra vez entre lágrimas.

********

Halima se acercó luego con un pequeño recado para mí.

Lo abrí, sin saber de que trataba.

"Una oportunidad, solo dame una para demostrarte todo...o juro que el Imperio Egipcio entrará en guerra con el Imperio Griego.

Siempre tuyo,

Ahkmenrah"

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Hola mis amadas!! Cómo están? Espero que bien...y tal vez lo hayan adivinado...su escritora está con una decepción amorosa, la primera que la siente tan dura...y pues...aún  intento probarlo, intento darle el beneficio de la duda, para que sea él quien me busque y trate de recuperar lo que hemos creado en casi un año...

En fin..., espero que les haya gustado el cap. tranquilas que ya se viene lo bueno... Las amo!!

Cuídense

Besos y chocolates

TheGreekEmpress

Psdt. Voy a publicar un escrito romántico ahorita, por favor pásense y léanlo, me gustaría muchísimo! Gracias!