PERFECT TIME!!! ¡EL VERDADERO RETO DEL AMOR!

JOE!!!

No sé como empezar este relato, pero mi vida la puedo dividir en 3 etapas:

La primera etapa fue mi infancia, fui un niño normal como todos los demás, era de esos que se perdía todo un día y se ponía a jugar pues pasaba en la calle y que a la hora de llegada a mi casa me encontraba a mi mamá en la puerta de mi casa con el cinturón en la mano y era de esas que decía "entre que yo no le voy a pegar" y yo como bobo siempre entraba pensando que era verdad lo que ella me decía pero nada cuando entraba era que soltaba el cinturón y me daba.

Unas que todavía me acuerdo de esos cinturonazos y pues lo único que podía hacer era salir corriendo y escudarme en los brazos de mi papá; siempre lo tuve todo, nunca me faltó nada mis padres tenían un excelente trabajo por cuestiones de dinero nunca me preocupé por eso ellos siempre me consentían, yo era de esos que estrenaba hasta 5 mudas de ropa cada navidad, pero saben siempre sentía que me hacía falta algo por más que tuviera muchísimos amigos porque nunca me ha faltado por mi forma de ser, todos me querían nunca tuve enemigos pero claro nunca falta el metío en cualquier parte, a pesar de todo eso siempre sentía un vacío en mi vida y me sentía solo aunque estuviera rodeado de amigos. siempre fui un niño inquieto por eso tantos raspones en rodillas, codos y manos pues soy muy competitivo y nunca me gustaba perder por eso cuando jugábamos fútbol y a veces perdíamos me ponía a llorar de manera inconsolable, ya fui creciendo y pues muchas preguntas surgían en mi mente y como nunca tuve esa confianza de hablar con mis padres entonces esas preguntas fueron siendo más constantes en mi vida y ese sentimiento de soledad crecía también pues soy muy tímido con las mujeres por eso nunca tuve novia de niño.

Cuando cumplí 15 años fue que tuve mi primera novia y de ahí en adelante entra la segunda etapa en mi vida, fue algo raro y repentino yo no la había visto y una vez un amigo me pidió el favor que lo acompañara a caminar con su novia y pues como todos adolescente en mi época bueno no todos la mayoría jugábamos xbox yo no tenía en mente nada de novias ni nada de eso y pues yo lo acompañé con tanta rogadera que medio me tocó jajajaja y pues ya cuando ella se estaba despidiendo de todos no sé que me pasó y le dije "te acompaño" y ella me respondió "si quieres" y la verdad yo no quería no sé porque había dicho eso pero un amigo mío me empujó y pues me tocó acompañarla y ya para resumir eso, fuimos novios y ella me dijo que era cristiana y yo pues le dije que no importaba y enseguida vino a mi mente esos recuerdos de infancia cuando le tiraba piedras a los techos de las iglesias porque siempre fui apático a eso, yo era de los que decía que eso era para locos siempre pensaba esas cosas y después de un tiempo ella me invitaba a la iglesia y pues yo iba pero solo para verla y para estar con ella, siendo sincero y pues veía muchos jóvenes que me saludaban y me sentía fastidioso con todas esas canciones que cantaban y pues no duraba ni 30 minutos cuando fingía una llamada y le decía que me necesitaban para trabajar y pues solo me iba para donde mis amigos o mi casa y yo pensaba (¿en que me metí?).

 Así fueron unos meses hasta que un día amanecí con esas preguntas en mi mente, sentía que necesitaba respuestas y yo decidí ir a la iglesia y eso a ella se le hizo muy extraño y estando allá estaba predicando un pastor invitado que hablada de aferrarse a tus metas y luchar por tus sueños y me gustó demasiado aunque no respondió las inquietudes y el vacío que sentía mi corazón y de ahí en adelante seguí yendo a la iglesia, mi vida fue teniendo un cambio que hasta yo me asustaba de las cosas que hacía y dejaba de hacer jajajaja, aunque no fui un chico fiestero, o fumador o bebedor pero si era grosero con mi familia y pues tenía un vocabulario del que no estoy orgulloso, mi manera de comportarme fue cambiando y un día tomé la decisión de decirle a mi mamá que me iba a bautizar y de ahí se declaro una guerra entre mi madre y yo, ya que ella es muy católica y mi familia también entonces ella no aceptaba eso, el día que me iba a bautizar me dije que nadie iba a interrumpir en mi decisión.