PERFECT TIME!!! ¡EL VERDADERO RETO DEL AMOR!

CAPITULO XX

-¿Me extrañaste?, porque yo si querida, ese cuerpo que me vuelve loco, sabes que desde hace mucho tiempo te tengo ganas.

-¡Ya!, ¡déjame por favor!.-Casi que ni podía decir nada y gritar era imposible.

Me tomó muy fuerte de la piernas, y empezó a abrirse su cremallera.- Alberto, ¡déjame!.-Dije casi llorando desesperadamente.-¡¡Ayúdenme!!, ¡por favor!, ¿por qué nadie me escucha?, déjame, ¡otra vez no!, ¡por favor!.- traté de zafarme, pero es muy fuerte, hiciera lo que hiciera nada podía detenerlo, la puerta de la habitación estaba cerrada, no podía ver a nadie, el pasillo está vacío, por más fuerte que gritara nada funcionaba, nadie me escucha.

-¡Tranquila!, te prometo que no dolerá, la última vez no pudimos hacerlo.

-Alberto, ¿por por que me haces esto?.- Estaba besando todo mi cuerpo, se siente tan asqueroso, ahora esta alzando mi blusa, sus manoseos son detestables, su lengua estaba en mi ombligo, sus manos en mis caderas...

-¡Quédate quieta!.

-Diiiiioooossss, ¡auxilio!.

-Vayolett, él no puede hacer nada y aquí nadie puede escucharte, estamos solos.

Del desespero grito y grito-¡Diiioooosssssss!.

-¡Vayolett!, ¡Vayolett! , Vayolett despierta.

Con todas mis fuerzas y sin pensarlo reaccioné de manera agresiva y lo empujé muy fuerte, caímos al suelo pero no dejó que me golpeara, con mucha fuerza me sostenía, no quería soltarme y yo no quería reaccionar.

-Vayolett, solo abre los ojos.

-¡Déjame!.

-Vayo, solo abre los ojos, soy yo.

Abrí mis ojos, y me di cuenta que era solo un sueño cuando vi a Oliver tratando de calmarme abrazándome muy fuerte, lo único que quería hacer era abrazarlo, que me dijera que todo estaba bien, que solo era una pesadilla, que nadie me haría daño, estaba desesperada, ni si quiera pensé, solo me aferré a él, y él a mí.

-Vayo tranquila, todo está bien, aquí estoy. Tranquila, no llores más.

Mis lágrimas estallaron aún más y sin darme cuenta estaba llorando como loca, por algún motivo que no conozco solo quería estar junto a él, y abrazarlo y que nunca me soltara, sus abrazos me hacían sentir demasiado bien y muy segura, solo quería olvidar ese sueño, no quiero volver a revivir eso... Tiempo después, abro mis ojos y ya era de mañana, la luz que entraba en el cuarto me despertó, y Oliver seguía a mi lado, su bata y sus brazos están abrigándome, ¡lo veo y no lo creo!, pasé la noche aquí con él, ¡que locura!, pero aunque suene raro es bueno verlo así, no puedo negar que se ha portado conmigo como todo un caballero, definitivamente lo que él aparenta tan solo es una fachada, ahora estoy mas convencida de que Sofi tenia razón, si tan solo Tyler me dijera algo y me diera señales pero no dice nada y en verdad lo quiero,  ¡Dios!, ¿que se le puede decir al corazón?, nada, solo quiero ser feliz y disfrutar cada momento porque no es bueno que siga en esto. ¿Que hora serán? Tenemos que salir, levanto mi cara y trato de no asustarlo.- Oli, Oli.

-¿Que pasó?, ¿estas bien?.-Mientras buscaba mi mirada.

-¡Si!, perdón por lo de anoche.-Dije mientras me levantaba pero no quería soltarme.

-No tienes porque disculparte.

Y sin querer mi cuerpo empezó a sentirse raro y mis corazón empezó a latir muy fuerte.-Es que no debías ver eso.-Dije muy penosa.

-Lo entiendo, suele pasarme, ¿que hora es?.

-No lo sé.-Dije tratando de buscar mi celular.

Mira su reloj y en vez de levantarse, se acomoda y me abraza.- ¡Todavía es temprano!, ¡un ratico más!.