¿Qué Hicieron Conmigo? (BTS Y TU) [EDITANDO]

¡¿Qué haces?!

☆Maratón: 8/?☆

JM: Ok, ok... después de la cena debemos ir de compras... -ya le faltaba poco del plato y terminó de tomarse de lo que le quedaba en la copa de vino-.

TN: Necesitamos comprar comida y... ropa. -miró sus vestimentas y rió-. Con urgencia...

JM: Pero si nos vemos muy elegantes... -tomó los dos extremos del corbatin y los tiro un poco moviendo su cuello de lado a lado-.

TN: Es como si hubiéramos llegado de otra época... -ambos rieron llamando la atención de un par de personas-.

JM: Pero llegamos juntos, ¿no? -dejó de reír y la miró a los ojos-.

TN: ¿Por qué estas tomando vino y yo no? Ya estas diciendo curislerias... no creo poder aguantar tanto estando sobria. -dijo bromeando, dio una pequeña risa nerviosa y tomó un poco de su jugo-.

JM: Porque aún eres menor de edad y puedo presumir... aparte, no digo curislerias.

TN: Es injusto...

Y así estuvieron casi toda la velada, hablaron de las metas que tenían en sus vidas, las cosas que les gustan y no, evitaron hablar sobre sus sentimientos, lo intentaban pero al instante ambos se sonrojaban y el ambiente comenzaba a incomodar. Ya habían terminado con la cena pero se quedaron ahí sentados disfrutando de su compañía hasta notar que se hacía muy tarde.

JM: Debemos irnos... -levantó la mano para que dejaran la cuenta-.

TN: Me acabo de dar cuenta que pronto comenzará a oscurecer..
. -quitó la servilleta de su regazo y lo dejó sobre la mesa-.

JM: Me alegra saberlo... -sonrió ladino y metió su mano dentro de su saco. Abrió los ojos al instante y llevó su mano a su quijada mientras apoyaba su codo en la mesa-.

TN: ¿Qué sucede? -le preguntó extrañada-.

JM: Mhh... digamos que... debimos buscar el auto antes de venir. -rió nervioso y buscó en su otro bolsillo-.
TN: No me digas que... -abrió por completo sus ojos-. La mía también está en el auto.

JM: Ok... no te preocupes, tengo una idea.

Pensó en que les pediría algo de tiempo para buscar su billetera al auto y poder volver, pero su impresión fue aún mayor al oír sus palabras.

JM: Cuando diga tres te levantas de la mesa y sales del restaurante... ¿ok?

TN: ¡¿Qué?! Jimin, no te dejaré aquí.
JM: Solo haz lo que te digo. A la cuenta de tres... -ella asintió y miraron hacia los lados-. Uno... dos... ahora...

Ella obedeció y se levantó tranquila de la mesa, caminó hasta la salida y se despidió del señor, salió del restaurante con el corazón en su mano metafóricamente. Luego de unos segundos vio a Jimin detras de ella, el tomó su mano y comenzaron a caminar rápidamente.

JH: ¡HEY, USTEDES DOS! -se escuchó su grito y apresuraron el paso-.

TN: Jimin me es complicado poder caminar más rápido con tacones...

JM: Haber... -se sacó los zapatos que traía y se hincó frente a ella, quitó sus tacones-.

TN: ¡¿Qué haces?! -chilló e intentó evitar que se los quitara-.

JM: No hay tiempo, solo hazlo. -dijo mientras miró tras ella y quitó rápidamente sus tacones y le colocó sus zapatos, los amarró, tomó los tacones y con su mano libre tomó la de ella-. ¡Corre!

TN: ¡Jimin!

Comenzaron a correr por las calles mientras que el mesero y los guardias los seguían, todos veían como escapaban mientras el personal del restaurante corría tras ellos. Esquivaron a la gente y a los autos hasta llegar a unos callejones, caminaron dentro y se ocultaron.

JM: Creo... creo que... los perdimos... -su pecho sobresalía tratando de recuperar la respiración-.

TN: Si... -se apoyó a una muralla mientras intentaba recomponerse-.

XX: Deben estar por aquí. ¡Busquen! -se escuchó una voz acercarse-.

Al instante se adentraron más al callejón donde el camino era mucho mas estrecho.

XX: ¡Por aquí! -escucharon y al instante Jimin la cubrió con su cuerpo al apegarse a la muralla-.

Se dieron cuenta que habian pasado a su lado pero no los capturaron, esperaron un momento y Jimin asomó su cabeza para ver si habían moros en la costa.

JM: Se fueron... -dijo al ver hacia todos lados y volvió a su posición anterior, bajo su mirada y ________ estaba sonrojada refugiándose en su pecho-. Hey... ya se fueron.

TN: ¿Seguro? -levantó su mirada y se encontró con sus ojos-.

JM: S-si...

Se mantuvieron en silencio e intercambiaban miradas, ambos tenían los ojos dilatados y con un brillo único. Se sonreían hasta que Jimin toma el primer paso y se acerca lentamente.

JM: ¿Podría... darte un beso...? -preguntó ruborizado al estar frente de sus labios-.

TN: S-si... -asintió tímidamente-.

Lentamente el fue rompiendo la distancia entre ambos, cerraron sus ojos y con delicadeza juntó sus labios con los de ella, tomó con una de sus manos su mejilla y con la otra se apoyó en la muralla tras ella. Ladeo un poco su cabeza y abrió su boca pidiéndole permiso para ingresar su lengua, ella llevo sus manos hasta su cuello y se colocó en la punta de sus pies.

El momento era simplemente perfecto, el día era como siempre habían deseado a excepción de unos pequeños problemas pero nada haría que arruinaran los nuevos sentimientos que fluían por sus cuerpos.

Ya por la pérdida de aire, se separaron lentamente con sus respiraciones agitadas. Se miraron con ternura y entrelazaron sus manos.

JM: Vamos... -besó sus nudillos y comenzaron a salir del callejón-.

Caminaron en busca del auto evitando las calles que los dirigían a aquel restaurante, encontraron aquella antigua tienda de regalos y supieron al instante la ubicación del vehículo, Jimin sacó las llaves de su bolsillo y desactivó la alarma.

TN: No puedo creer lo que acabamos de hacer... -dijo apoyada a un costado del auto-.

JM: No te preocupes, pronto pagaré la cuenta. -le guiño un ojo y cerró la puerta para activar la alarma nuevamente-. Vamos, creo haber visto un mini market a unas cuadras.

TN: Espera... -quitó sus zapatos y se los entregó-. Mis zancos, por favor. -dio una leve sonrisa y estiró su mano-.

JM: ¿Segura? Puedes seguir con mis zapatos si quieres...

TN: Si, te estas haciendo daño. Solo entregamelos...

JM: No me estoy haciendo daño... pero si tanto insistes... -se hincó frente a ella y comenzó a colocar los tacones-.

TN: Podia colocarmelos sola... -dijo avergonzada y apoyó su mano en su hombro para no perder el equilibrio-.

JM: Listo, ahora si... ¿vamos?

Ella asintió y caminó a su lado, la noche lentamente iba cayendo y las luces de los locales comenzaban a colorear las calles. Encontraron aquel lugar que había visto Jimin anteriormente y entraron.

JM: Debemos comprar comida para... un día más...