En su último año escolar Michi encuentra la oportunidad de entrar a la universidad de sus sueños. Para ello necesita destacar como la mejor estudiante en Jackson, una tarea fácil si omite la existencia de su arrogante (pero muy guapo) compañero de c...
Como me niego a que RTR acabe en el cap. 49, pretendamos que el epílogo es otro cap. xD
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Algunos (muchos) años después
—No pongas esa cara.
—Es la única que tengo.
—Sabes a qué me refiero. Mira, entiendo que mudarte a otra ciudad es difícil, lo fuera para tu papá y yo en su momento, pero ve esto como una oportunidad.
—¿Una oportunidad de qué?
—Un cambio de ambiente siempre es agradable. Hazentown tiene muchos lugares donde pasar el rato, actividades... Irás a Jackson, nuestro instituto. Además, podrás hacer nuevos amigos...
—Estoy bien con los que tengo. Gracias.
—Tus abuelas están allá, ¿no sería lindo verlas antes de que...?
—¿La vejez les pase la cuenta?
—¡Felix!
El grito de mamá es de horror. Que recalque la vejez que mis abuelas es sinónimo de que ya les queda poco tiempo de vida, y jugar con eso cuando me tiene sentado en el sillón dándome la charla de por qué tengo que aceptar con una sonrisa mudarme a estas alturas del año, es divertido.
Y una flamante victoria porque deja de intentar convencerme.
Con un suspiro niega con la cabeza y decide terminar la charla, aunque estoy seguro de que más tarde papá tratará lo mismo.
Lo cierto es que estoy dando manotazos de ahogado: no puedo simplemente quedarme en Los Ángeles solo por mucho que lo quisiera, al final, todavía dependo de mis padres y estar lejos de ellos no me gusta. Nunca me ha gustado.
Me mudaré a Hazentown, eso es un hecho, pero no sin dar algo de pelea.
O al menos pasar un rato con mi mejor amigo.
—Tienes mala cara.
Brand me mira desde la camilla de la clínica con el ceño fruncido.
—Me lo dicen a menudo.
Se ríe, acomodando las sábanas que moldean su cama sobre sí mismo. Hace frío, pero su habitación tiene buena calefacción. Paso casi la mitad de la semana aquí y ya se ha convertido en mi segunda habitación. Para Brand es su habitación, y es probable que lo sea durante mucho tiempo más si no llega a recuperarse. Los dos lo tenemos asumido.
—¿En qué estás pensando?
—En que no quiero mudarme. Llevo prácticamente toda mi vida en Los Ángeles, empezar desde cero en una ciudad que no se compara con esta es...
