Cuatro*

3.2K 433 118
                                    

Michael estrelló su mano contra el volante, tratando al máximo no gritar debido a su frustración. Jane lo había estado volviendo loco el sábado entero y realmente necesitaba alejarse. Había cometido el estúpido error de manejar por la ciudad a la hora pico, lo que significaba que estaba atrapado en el tráfico media hora más. Todo lo que quería era un trago. Golpeó su cabeza contra el volante, y suspiró. No tenía idea de cuándo su vida se había convertido en tal desastre, pero tenía que encontrar la manera de hacerlo mejor.

"Estoy muy nervioso creo que me acabo joder a mí mismo." Calum masculló mientras se paseaba por la ordenada sala.

"¿Te podrías calmar?" Rió Luke, su voz alcanzaba a su mejor amigo desde el baño. "Estarás bien, tienes esto."

"¿Qué pasará si fallo en los acordes o mi voz se rompe?" Calum suspiró, pasando los dedos por su cabello mientras se sentaba en el sillón.

La delgada figura de Luke apareció en el corredor, la parte superior de su cuerpo estaba cubierta por una de las camisas de Metallica de Calum y una pegada falda negra cubría la parte superior de sus piernas parando a medio muslo. Completó el look con unas calcetas negras hasta la rodilla y Doc Martens. Luke no lucía usualmente tan punk-rock pero se había decidido por eso por la primera presentación de Calum, debía vestirse apropiadamente. El rubio sonrió al chico con cabello azabache, observando cómo el cuerpo de Calum comenzaba a relajarse visiblemente en cuanto sus ojos se encontraron con los de Luke.

"Calum, has tocado la guitarra y cantado desde que tienes seis. No vas a arruinar esto, vas a estar bien." Dijo Luke tranquilizador, pasando los dedos por el ahora desordenado cabello de Calum.

"Si hago el tonto seguirás siendo mi amigo, ¿verdad?" Sus ojos cafés buscaron los azules de Luke, rodando sus ojos en cuanto el rubio soltó una carcajada.

"Claro que no." Se encogió de hombros. "Estaré justo ahí con mi teléfono para grabar tu fracaso y subirlo a YouTube."

"Eres un idiota." Calum murmuró mientras Luke se dirigía nuevamente al baño para terminar su maquillaje

"¡Pero me amas!" Gritó el rubio desde el final del corredor, haciendo que su amigo riera y sacudiera su cabeza. Luke siempre sabía cómo relajarlo.

Luke terminó su maquillaje rápidamente, decidiéndose en simplemente cubrir sus manchas con base y corrector, aplicar un poco de máscara y labial natural. A él le gustaba usar maquillaje, pero odiaba los look que tenía al salir. Le gustaba la manera en la que lucía mientras miraba su reflejo en el espejo, finalmente sintiéndose cómodo en su piel después de vestirse para el trabajo toda la semana. Puso la bolsa de su maquillaje en el gabinete en el marco del espejo, mirándose una última vez antes de volver a la sala donde Calum esperaba.

"¿Estás listo para irnos?" Preguntó Calum mientras Luke llegaba, revisando sus bolsillos para asegurarse de que llevaba el celular. Luke asintió.

El camino al bar donde Calum se presentaría no fue largo, pero Luke sintió que se tomaban una eternidad. El frío aire golpeando contra su piel, haciéndolo enrollar sus brazos alrededor de su cuerpo como si eso lo mantuviera caliente. Había olvidado completamente llevar una chaqueta. Suspiró de alivio cuando vio el bar justo al cruzar la calle, la pasó pensando cuán caliente estaría ahí dentro. Calum corrió antes que él, manteniendo la puerta abierta para las personas que pasaban antes que él.

"¿Quieres un trago antes de empezar?" Preguntó Luke con una sonrisa mientras se sentaba en uno de los taburetes del lugar, desarrugando su falda al hacerlo.

Calum asintió, llamando al mesero y ordenando una pinta de Guinness. Luke eligió un Moulin Rouge: moras y vodka. Ambos se mantuvieron en silencio hasta que el mesero llegó con las bebidas, posando dos vasos por delante de ellos. Calum le dio el dinero, diciéndole a Luke que eso era una celebración temprana. En ese momento, no podía decir si estaba nervioso o emocionado de estar en el escenario.

Michael se estacionó a unas cuadras del bar al que usualmente iba. Amarrando su chaqueta negra de cuero alrededor de su cuerpo, se puso detrás de la puerta, viendo algunas personas formadas para entrar. No había visto el bar tan lleno desde hacía unos meses, por lo que era raro para él, pero decidió dejarlo ir y entrar. Vio a un chico con cabello negro en el escenario, lo que significaba que había música en vivo esa noche. A Michael no le importaba mucho, solo quería un trago que le hiciera olvidar su matrimonio fallido.

Sus ojos vagaron por el lugar, buscando un lugar libre para sentarse hasta que sus ojos se centraron en un rubio. Le daba la espalda a Michael, pero el perfectamente estilizado quiff y sus anchos hombros le hicieron pensar que lo conocía. El reconocería esos hombros donde fuera. Sus ojos se posaron en la falda que él estaba usando, las cejas de Michael se levantaron en cuanto se dio cuenta del pequeño espacio de piel pálida que existía entre el dobladillo de la falda y las calcetas hasta las rodillas. Instintivamente se lamió los labios, tratando de entender cómo era humanamente posible para alguien ser tan atractivo como Luke Hemmings.

Sacudió su cabeza, decidiendo que no debía acercarse al rubio antes de que Luke lo reconociera. Se paseó lentamente por el bar, tomando asiento. Podía ver a Luke de reojo, jugando con su pajilla inconscientemente y mirando hacia su teléfono. Llamó al mesero, pidiendo un vaso de whisky puro. Pudo ver al rubio congelado, mirando a Michael (quien había evitado mirarlo a toda costa) antes de cubrir su cara con sus manos.

"Mierda." Susurró Luke para sí mismo mientras cubría sus mejillas sonrojadas. Se paró abruptamente, corriendo por delante de Michael hasta el escenario donde Calum se encontraba.

"Oh, hey Luke." Calum sonrió, parando lo que estaba haciendo para hablar con su amigo.

"Necesito irme." Dijo Luke apurado, tratando de no mirar en dirección a Michael.

"¿Qué?" Calum levantó sus cejas, claramente adolorido. "¿Por qué?"

"Mi jefe está aquí." Chilló Luke, señalando con sus ojo al hombre rubio sentado con un vaso de whisky en su mano.

"¿Él es tu jefe?" Dijo Calum boquiabierto. "Mierda, Luke. Ahora veo porqué no renuncias."

"Calum, hablo en serio." Suspiró Luke, cubriendo su cara con sus manos, tratando de no arruinar su maquillaje. "Él no puede verme así."

"Demasiado tarde, Luke." Calum sacudió su cabeza y chasqueó la lengua. Una pequeña sonrisa apareció en las esquinas de sus labios mientras veía a su mejor amigo. "Él te está mirando y parece muy contento con lo que ve."

Secretary • mukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora