A n g e l ' s

Capitulo 9.

Al día siguiente me desperté debido a la alarma de mi celular, como era de costumbre me levante sin ganas, me duché y me puse un jean negro , un sweater y nuevamente mis vans.
Ya estaba llegando un poco tarde así que decidí saltearme el desayuno.
Cuando bajé las escaleras me encontré con mi padre y mi hermana haciendo de familia feliz. Tomando un desayuno, el cual ami ni me habían llamado. Los miré con mi mejor cara de perra y me fui sin dirigir palabra alguna.

El aire chocaba contra mi piel produciendo escalofríos y erizando cada poro de mi el, las copas de los árboles se movían de un lado al otro, avecinando tormentas. Era raro,porque generalmente no se acostumbraba a que haya tormentas por esta zona. Decidí no hacerle caso y sentí que me seguían, me giré y no encontré nada más que la continuación de la calle,pero aquello me hizo acordar del mensaje, y no pude evitar sentir miedo, pero a la vez una calma al recordar que podría haber sido Zack.

Caminé varias cuadras más y me topé con el enorme edificio el cual me disponía a entrar. Cuando de los arbustos posteriores a la USC salieron dos hombres los cuales no pude ver del todo bien ya que llevaban sus rostros cubiertos.

Intenté correr lo más rápido que pude pero no lo logré,los estudiantes que caminaban parecían no escuchar mis gritos ni percatarse de los hombres que me estaban llevando, era como si fueran invisibles. Sentí unos brazos agarrándome de la cintura colocándome la mano en la boca. Grité a través de esta pero mis gritos salían inaudibles.

Me removí entre sus brazos intentando zafarme, estaban llevándome a un auto negro.

De repente vi el auto de Zack frenando lo más brusco que se podía. Mordí la mano del hombre y a consecuencia sacó su mano.

-¡ZACK!- grité como pude, pero el no me había escuchado.

Al instante me dieron un golpe en mi boca, que al instante comenzó a chorrear sangre.
Pateé a la otra persona e intenté usar el poder de mis ojos. No respondían, así que corrí sin mirar atrás, cuando me quise dar cuenta había chocado con otra persona, esa persona era Zack. Sus ojos grises azulados me miraron con preocupación, yo aún seguía agitada...y despeinada.
Me di vuelta y los dos hombres venían hacia mi.
Tomándome nuevamente del brazo. Zack al instante tomó al hombre que me estaba agarrando de la cabeza y lo golpeó.
Yo aproveche para golpear al otro en su entrepierna, se retorció en el suelo, hasta que se fueron sin haber logrado su objetivo.

-Vamos- dijo tomándome de la mano mientras corríamos en dirección al bosque.

Nos detuvimos al encontrarnos apartados de la civilización.

Yo aun seguía perturbada por lo que acababa de pasar.

-¿Quiénes son esas personas, porqué querían atraparme ?- pregunte mirándolo.

-Es complicado..- murmuró.

-Basta..por mas complicado que sea necesito saberlo. Además, ¿Porqué estabas espiándome ayer?- Me enfadé y aproveché para preguntarle.

-¿Qué dices?- Frunció sus cejas.

-No te hagas el idiota, se que mandaste ese mensaje.- Repliqué

-Alice no se de que estas hablando- Informó.

-Mira- Tome mi celular, abrí el mensaje y se lo mostré

- Yo nunca mande este mensaje Alice.- me dijo devolviéndomelo con su mirada fría.

-Claro, y entonces quién fue?- Dije sarcásticamente.

-Richard- dijo seco.

-¿Quién es Richard?- me preocupé.

- El ángel que me delató, el que arrancó mis alas.- Dijo.

Me sorprendí y quede boquiabierta. Pensé por todo lo que habrá pasado por salvarme ami y me estremecí.

-¿Y porqué me ha mandando ami el mensaje?- Pregunté.

-Porque por ti renuncié a mis alas, y él me consideraba uno de sus más grandes peones...al ver que hice eso por ti, se desquitará contigo para verme sufrir ami. Alice a partir de ahora deberás tener cuidado...mucho- Dijo haciéndole énfasis a la última palabra.