Capítulo 36

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Los días habían pasado tan lentamente para mi, que ni siquiera creí  que dos semanas hubiesen transcurrido desde que Annie rompió conmigo. Con Louis tampoco cruzaba palabras y cuando él estaba con el resto del grupo yo prefería alejarme, lo que pasaba la mayoría de las veces.

A pesar de mi miserable vida nunca me había sentido tan solitario como lo hacía ahora, tal vez porque siempre había estado acompañado de Louis y porque quizás perder a Annie me había revelado que ella era un pilar tan fundamental en mi vida que no podía ser reemplazado tan fácilmente. Todo lo que me quedaba de mi pobre vida se había ido a la basura.

Luke Hemmings había caído al hospital la noche que lo golpeé, con fracturas y una conmoción cerebral que con un poco de suerte pudo haberle costado la vida. Sentía que el maldito niño emo lo merecía, por haber fastidiado mi relación con Annie, por meterse donde no lo llamaban, pero  mi larga letanía, donde estuve acompañado solamente de mi guitarra, me había hecho reflexionar acerca de que siempre culpaba a los demás por los errores que yo cometía. Quise golpearme a mi mismo por no darme cuenta de eso antes. ¿Qué tan ciego podía llegar a ser? Aunque papá había literalmente arruinado mi vida, yo pude haber escogido contarle a Annie lo que pasaba desde el comienzo y me sentí profundamente arrepentido por eso, pero ya era muy tarde para pedir perdón.

Niall dijo que Annie había visitado a Luke en el hospital cuando se enteró que yo lo había golpeado, le pregunté si ella estaba enojada, pero me dijo que se veía más bien decepcionada, lo que era peor. En el instituto todas las miradas se concentraban en mi cuando estaba cerca, los primeros días oía desagradables susurros de las personas a mis espaldas y me daban ganas de mandarlos a todos a la mierda, pero me contuve.

Después de pasar una tarde completa en la oficina de papá, decidí ir a casa. Últimamente aquella oficina era mi escondite y ahí pasaba la mayoría del tiempo: huyendo de mis amigos y de la posibilidad de ver a Annie y aunque Suzzane seguía molestándome, prefería eso a tener que exponerme al sufrimiento que significaba ver a mis seres queridos y no poder hablarles.

Ya había decidido mantenerme alejados de ellos, por su propio bien.

Tomé mis llaves y mi celular del escritorio y bajé por el ascensor hasta el primer piso. Para mi suerte iba vacío. No quería tener una conversación acerca de finanzas o prestaciones con algún socio aburrido.

En cuanto llegué a mi auto encendí la radio. Coldplay estaba sonando y decidí dejarla ahí. Por alguna razón la canción triste me consolaba pero a la vez me deprimía aún más. Me concentré en la letra mientras salía del estacionamiento. No supe si era mi puta suerte o sólo una coincidencia, que la letra calzara perfectamente con lo que me estaba sucediendo.

Estoy enredado en una telaraña

Y perdí la cabeza,

Y pienso en todas las estupideces que dije...

Pensé que tal vez, si aún estuviera con Annie, le dedicaría esta canción. Era tan simple y repetitiva, pero a la vez tan perfecta para la situación.

Pienso todas las cosas estupideces que he hecho 

Yo nunca quise causarte problemas

Yo nunca quise hacerte mal.

Apagué la radio y seguí conduciendo. Tenía que ignorar todas aquellas cosas que me hicieran recordar a Annie. Tenía que aceptar que ya nada tenía remedio.

Llegué a casa y dejé mis llaves en el mesón del pasillo. Iba a subir inmediatamente a mi cuarto a seguir sintiendo pena por mi mismo, pero papá me detuvo.

Agony » Harry Styles (COMPLETA)Where stories live. Discover now