Capítulo 6

19.6K 851 19
                                    

- Oye, no me dijiste tu nombre- Dijo él deshaciendo el abrazo, provocando en mi un extraño vacío.

- Me llamo Nora. – Dije mirándolo detenidamente, fijándome en los detalles de su hermoso rostro.

- ¿Qué te parece si nos presentamos y contamos cómo nos secuestraron? Sé que no es algo muy alegre, pero no pretendo hacerte sonreír, quiero que nos desahoguemos. – Dijo Christian.

- Me parece bien. Yo empiezo. Me llamo Nora y tengo 17 años. Estudio mi último curso de instituto. Bueno, yo…- Tan solo recordé a Alex y un nudo enorme se formó en mi garganta haciéndome llorar- me quedé en la biblioteca haciendo un trabajo de Literatura hasta las doce de la noche. Mi hermano tenía que haberme ido a buscar pero se olvidó. Lo llamé para decírselo y me ordenó que me quedara unos minutos a esperarlo, pero no le hice caso y caminé yo sola a casa. Por el camino alguien me persiguió y me metió en un coche. Me dormí profundamente a causa del cloroformo y me desperté aquí. Si tan solo le hubiera hecho caso a mi hermano, ahora no estaría aquí. –Terminé de narrarle los hechos y me llevé las manos a la cabeza, tapándome la cara para evitar que me viera llorar.

- No es culpa tuya, no podrías haber sabido que esto ocurriría.-

- Es tu turno, cuéntame cómo te pasó a ti- Le pedí.

- Pues me llamo Christian y tengo 20 años. Cuando me secuestraron tenía apenas 19 años recién cumplidos. Era un domingo, había quedado con unos amigos para jugar al billar pero me retrasé y salí demasiado tarde. Iba camino al aparcamiento para conducir hasta casa, pero alguien me colocó un cuchillo en el cuello y me tapó la boca con un pañuelo que contenía cloroformo, pues me quedé dormido y no supe nada más hasta que desperté en esta maldita cárcel. Siempre es el mismo día, el domingo. Por alguna extraña razón siempre secuestra en domingo.-Me explicó Christian, pero noté que entristeció.

- ¿Tenías familiares o novia?- Le pregunté, no sé por qué estaba poniéndome nerviosa por escuchar su respuesta.

- Sí, tengo familia. Los extraño mucho. También tenía novia, se llamaba Elena.- Aclaró.

- ¿Tenías? ¿Cortaste con ella antes de que te secuestraran?-Pregunté.

- No, pero llevo aquí año y medio, la policía ya no me buscará, me darán por muerto. Además tengo 20 años, pueden haber pensado que me he ido de casa.-

- No lo había visto así. Yo también extraño a mi familia, sobre todo a mi único hermano, Alex. Mis padres trabajan mucho y siempre están ocupados. Se preocupan mucho por mí, pero apenas los veo.

- Lo siento. Yo siempre tuve una familia muy unida. Eso es lo peor al estar aquí, recordar que jamás podrás estar con la gente a la que amas.-

- No, eso no es así. Sé que has estado aquí más de un año, por eso voy a pedir tu ayuda.-

- ¿Pedir mi ayuda? ¿Para qué?- Preguntó frunciendo el ceño.

- Necesito que me digas todo lo que pasa aquí en cada día, el horario, por así decirlo.- Dije y me fui acercando a su oído para responderle a la pregunta que haría.

- ¿Para qué necesitas eso?- Preguntó aún más confuso.

- Para escaparme de aquí- Susurré en su oído. Según él me había dicho, el señor tiene grabadoras y no pretendo que me escuche.

- Eso es imposible, lo intenté miles de veces, pero no lo conseguí.-

- Bueno, tal vez yo tenga más suerte. No voy a quedarme aquí sin hacer nada esperando a que me convierta en su “esclava”, por decirlo de alguna forma. –

SecuestradaKde žijí příběhy. Začni objevovat