Capítulo 5

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-Venga niños -dice Peeta-, a vuestra habitación, ¡ya!, rápido, venga.

Oigo que Peeta se acerca a mí por detrás.

-Katniss, ¿qué es esto?, no entiendo nada. ¿Septuagésimo Séptimos Juegos del Hambre?

Me limito a negar con la cabeza mientras veo la cara de satisfacción de Plutarch.

¿Que quieren hacer unos Juegos del Hambre con la gente a la que van a sentenciar a muerte?
¿Unos Juegos con las personas más próximas a Snow?

Si una vez estuve de acuerdo en hacer unos Juegos con los niños del Capitolio, ¿porqué no lo iba a estar con hacer unos juegos con las personas más crueles del mundo?

Alguien entra por la puerta de sopetón sin llamar ni nada.

-Katniss... -es Haymithch.

-Katniss, ¿estas bien?, ¡di algo! -me dice Peeta

Después de un largo silencio digo sin mirar a ninguno de los dos:

-Sinceramente, no recuerdo que hubiesen unos Septuagésimo Sextos Juegos Del Hambre.

-Esta chica es increíble -connota Haymitch.

***

-Solo se trata de hacer unos Juegos con los vigilantes y...

-Tú eras Vigilante -interrumpo a Plutarch-, de echo, Vigilante Jefe.

-Si yo no hubiese sido Vigilante Jefe, Katniss -me replica él-, tú no estarías viva, y Snow seguiría siendo presidente.

Haymitch asiente.

-Quedamos en que se acababan los Juegos, Plutarch, quedamos en que todo esto se acabaría -dice Peeta enfadado.

Plutarch empieza a decir que se lo tienen merecido y todo eso.

Estamos en La Ciudad Central, en el despacho de La Mansión Del Presidente.

Después de que Plutarch anunciara su plan de ejecución ayer, Haymitch, Peeta y yo, nos vinimos hasta aquí en un aerodeslizador para hablar del tema.
Nuestro hijos se han quedado con Effie en su casa del 12. Ella aceptó cuidarlos sin dudarlo.
A Gabriel y a Lucia les encanta jugar con las estrambóticas pelucas de Effie -que ya no usa pero que conserva no sé por qué-.

-...¿Katniss?

Mi mirada perdida se centra y miro a los demás.

-¿Qué...?

-¿Estás de acuerdo con mi idea de celebrar los Juegos?

«Celebrar» Los Juegos.
!Oh que alegría, vamos a «celebrar» que vamos a matar a mucha gente!

-No, no estoy de acuerdo en celebrar -digo remarcando la palabra- Los Juegos... -Peeta suspira de alivio-. Pero sí estoy de acuerdo en realizar Los Juegos.

La cara de alivio de Peeta cambia radicalmente. Se le abren los ojos como platos y me mira sorprendido.

-¡Katniss!... ¿Te has vuelto loca? -dice.

-No. Peeta, ¡se lo merecen!. Esas personas... ¡Las mismas que pusieron en la arena el campo de fuerza que casi te mata!, ¡o las que crearon los mutos que  nos atacaron al final de nuestros primeros Juegos...! Se lo merecen.

-¿Y qué serán exactamente esos juegos? -pregunta Peeta con la cabeza gacha.

-La arena ya se está construyendo -dice Plutarch.

-¿Y de qué se tratará?, ¿el trópico, el desierto...? -pregunta Haymitch.

-Esa no es la cuestión -replico-, la cosa es a qué 24 personas piensas mandar a Los Juegos.

-Nadie ha dicho nada de 24... -explica Plutarch-, yo había pensado en 50 Tributos.

-¿¡Cincuenta!? -exclama Peeta -, no puedes matar a tanta gente.

-Peeta, ¡van a morir igual! -le explico-, es lo mismo... Que mueran podridos en la cárcel que en Los Juegos. ¡Que prueben su propia medicina!

-¿Cuándo tenéis pensado hacerlo?

-Había pensado en iniciar los Juegos dos días después del acto de La Sucesión de la Presidencia.

»Los tributos ya están seleccionados. La mayoría son Vigilantes que trabajaban desde principios de la década de los Septuagésimos Juegos Del Hambre.

Lo suponía: Plutarch lleva bastante tiempo planeando esto.
La arena está ya en construcción, ya tiene incluso hasta los Tributos seleccionados...

-¿La arena estará acabada para el Miércoles? -pregunto. Plutarch asiente.

Hoy es Viernes.

-Lo anunciaremos mañana en un comunicado especial que se hará a mediodía.

-Espera, espera, espera... -dice Peeta-, ¿qué pasará con el ganador? Porque... habrá un ganador...

Haymitch y Plutarch se miran y contesta Plutarch:

-El Último Tributo que quede con vida, pasará el resto de su vida en la cárcel.

-¿Co-cómo...? -pregunto. Peeta y yo nos miramos extrañados.

-Katniss, Peeta... en estos juegos, no habrá ningún ganador.

ESCOMBROS - Los Juegos Del HambreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora