uno- desconcierto

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uno – desconcierto

canción para el capítulo: "sweetheart, what have you done to us" por Keaton Henson

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Él no sabía si se le era permitido verla un día antes de la boda, pero no podía estar alejado. Sus enormes ojos azules y amplia sonrisa que él nunca querían que se apartara de su lado. Jugaba cuidadosamente con su cabello rubio, sintiendo sus ojos en él.

—¿Zayn? —Dijo ella, comenzando a trazar rastros en su brazo que estaba enroscado alrededor de su delgada cintura. Sintió que la carne se le puso de gallina donde lo tocaban los dedos de ella.

—¿Sí? —Dijo él, depositando un beso en su cuello, inhalando su dulce esencia de fresas.

Perrie se sentó haciendo que él frunciera el ceño levemente. Ella jugaba con las sábanas, atándolas en nudos. Él no podía decir si ella estaba enojada o preocupada, sus mirada evitó la de él. Él se estiró para tomar su mano, para tranquilizarla, pero ella se apartó levemente, dejándolo herido.

—Perrie, ¿qué ocurre? —Preguntó, y podía escuchar el pánico en su propia voz.

Ella no dijo nada, y cerró sus ojos por un instante, antes de salir de la cama, comenzando a cambiarse la pijama, colocándose la ropa que estaba tirada en el piso. Él la observó, tratando de hablar, pero fue incapaz de decir algo.

—¿Perrie? —Dijo débilmente, levantando precipitado las sábanas de él, dejándolas en una montón desordenado sobre el piso—. ¿Q-qué estás haciendo?

Ella se detuvo y lo miro, pasando una meno entre su cabello rubio platinado. Ella siempre había sido hermosa para Zayn, e incluso ahora que él no entendía lo que ella hacía, en la luz de la mañana la piel de ella brillaba, cada curva de su cuerpo era perfecta.

—Zayn, sólo... no sé sí... —Dijo apresurada, con los ojos muy abiertos, con una mueca en los labios. Caminó hacia ella, sujetando sus manos, tratando de evitar que ella hiciera lo que iba a hacer.

—Amor, puedes decirme. —Dijo, intentando sonreír para calmarla; aunque probablemente lucía más como una mueca de dolor.

—Tengo que irme. —Dijo Perrie, apartando sus manos de las suyas, con una mirada afligida en su rostro, sus ojos no ven los de él.

Ella fue para sujetar su bolso, despeinando su cabello levemente. Él la observó por un momento, después comenzó a colocarse sus pantalones encima de sus bóxers de Batman, sujetando una camiseta arrugada del piso.

—Perrie- —Dijo, y podía escuchar la desesperación en su voz—. No lo entiendo. Por favor, sólo dime.

Ella se detuvo por un momento, mirándolo con ojos llenos de culpa y pena. Una visible lágrima comenzó a descender por su mejilla, pero antes de que Zayn pudiera alcanzarla, ella abrió la puerta y desapareció.

Con los zapatos sin atar él corrió detrás de ella, su corazón latía extrañamente en su pecho. Él podía sentir sus pies amenazando con desplomarse, y el sudor hizo que su parte superior se pegara a él levemente, haciéndolo sentir como si estuviera lentamente comprimido.

Ella estaba en las escaleras, sus pies eran veloces. Él quería llamarla, sin embargo ella casi estaba en la planta baja; su gracia significaba que ella era ligera sobre sus pies. Zayn casi cayó por las escaleras, su mano sujeto la baranda, sin mirar a donde iba, pero asegurándose de que ella seguía ahí.

Corrió hacia la puerta principal, viendo que ella caminaba hacia su auto, cabizbaja. Algunas personas se voltearon para ver a la curiosa pareja; alguno susurraban, otros sabías por instinto que algo malo estaba pasando.

El álgido aire heló los brazos desnudos de Zayn, pero él no lo notó. La llamó, y ella se detuvo y se volteó, mordiendo su labio, algunas vagas lágrimas aún caían.

Él la alcanzó, jadeando—. No te vayas. —Susurró.

Perrie dio un respiro agitado, sus brazos estaban a su alrededor como si ella tuviera frío. Él quería colocar sus brazos alrededor de ella y abrazarla, y decirle que cualquier problema que sea, ellos podían arreglarlo, porque su amor era fuerte.

—Sabes que te amo ¿verdad? —Dijo ella con delicadeza, y Zayn asintió efusivamente.

—Lo sé, también te amo. —Dijo casi con una alegría infantil clara en su voz.

—Zayn... —Comenzó, y después tragó saliva, irguiendo su espalda mientras miraba directamente hacia sus ojos avellana.

—No puedo casarme mañana. Lo siento. —Susurró.

Ella se giró sobre sus talones y entró a su auto, conduciendo. Zayn se quedó ahí, de pie, mirando como el auto se perdía en la distancia. Él deseó por un momento que ella regresara y dijera que era algún tipo de broma malévola, y que se besaran y que todo estuviera bien.

Pero ella no regreso, no importa lo mucho que él deseara que ella lo hiciera. Camino con lentitud al interior, subió las escaleras, y entró a su apartamento, parándose ahí por un instante.

Vio una fotografía de ellos sobre su cómoda y la levantó, mirándola por un momento, antes de lanzarla al suelo con una gruñido, encontrando alguna satisfacción mientras el cristal se rompía sobre el piso, la foto estaba cubierta por los trozos de vidrios y el marco de madera.

Una furia que él desconocía lo llenó, y sujetó la foto de ellos besándose sobre su mesita de noche, lanzándola contra el muro. El sonido del vidrio partiéndose aclaró su mente y abatió su ira por un breve momento.

La ira sólo esconde la tristeza...

No podía recordar donde escuchó esa frase, sin embargo sabía que era cierta. Su corazón permanecía en su pecho como los trozos de vidrios en el piso, irreparables, rotos. La confusión también lo abrumaba mientras la ira ya estaba presente.

—¿Qué hice? —Gritó, como si Perrie fuera capaz de escucharlo—. ¿Qué hice?

Dejó de gritar y se paró ahí jadeando. Sus ojos revisaron el apartamento, y se posaron sobre las llaves del auto situadas sobre la pequeña mesa. Parpadeó una vez, y caminó hacia las llaves, levantándolas.

Sólo corre. Pensó, le agradaba inmensamente el sonido de la idea. Sólo escapa.

Y con eso, Zayn Malik dejó su apartamento, cerrándolo con seguro (claro) y con nada más que su nombre más sus bóxers de Batman, sus pantalones holgados de chándal, algunas converse y una camiseta sin lavar, entró a su auto y empezó a conducir.


©roulade

:c pobre Zayn... lo abandonaron. Yo nunca dejaría a un novio tan sexy como él e.e

PD: Hay momentos en que yo también quiero escapar... como Zayn lo hizo en este capítulo.

¡Gracias por su apoyo! c:

in the hills • zayn malik | EspañolWhere stories live. Discover now