- ¿Estas bien, Nikki? - me pregunta.

- Si. - respondo.

- Te veo algo preocupado y tenso. - dice y se acerca a mi, doy dos pasos hacia atrás.

- Estoy bien. - miento pero ella no tendría porque enterarse de lo que le está pasando a Carrie.

- Nikki... se me olvido hacerte una última pregunta algo más personal.

- ¿Qué? - pregunto.

- ¿Es cierto que te vas a casar? - pregunta curiosa.

- Si es cierto.

- ¿Con la ex campeona del patinaje artístico, Carrie Weber?

- Si con ella. - ella esboza una enorme sonrisa.-
Wao! Me encantaba ver a Carrie en la televisión, sus movimientos eran únicos, ella era única y mágica en eso.

- Era la mejor. - digo.

- Pues muchas felicidades. - sonríe.

Nos quedamos callados, es un silencio algo incomodo pero a la vez algo agradable. Su sonrisa me parece tan familiar al igual que su mirada.
Ver sus ojos azules es como ver el océano en un atardecer, además de que su cabello es tan rubio que con las luces de las lámparas parece de oro puro, no me imagino como debe lucir ante la luz del sol. Analizo su vestimenta y apenas me doy cuenta que tiene una jeans de tiro alto de color negros, unos tenis blancos, una chaqueta negra de piel y al parecer debajo de ella trae una blusa de color azul rey.
Nos miramos a los ojos una vez más...

- Creo que ya debo de irme. - interrumpió aquel silencio agradable.

- ¿Quieres que te lleve a tu casa? - pregunto sin pensarlo.

- En realidad estoy viviendo en una hermandad... es una...

- Si, si se que es eso. - ella sonríe.

- ¿Por qué te ofreces en llevarme?

- No lo sé, supongo que es noche para que andes sola por la calle.

- Inglaterra no es tan peligroso como en los ángeles, Nikki. - dice.

- Yo no lo sé. - ella sonríe.

- Pues... no esta muy lejos de aquí, he venido en mi bicicleta. Tendrías que acompañarme caminando.

- Pues vamos, supongo que la ciudad es linda de noche.

- Cómo no tienes idea. - sonríe.

Ella agarro su bicicleta.
Caminamos unas cuantas cuadras hasta que nos paramos enfrente de una residencia que ya forma parte de la universidad. Veo que hay algunos estudiantes en las calles viniendo de alguna fiesta, otros con libros en las manos ya que han estado estudiando todo el día y apenas han terminado.

- Gracias por acompañarme. - dice. - ¿Como te vas a regresar? Estar caminando por la calle siendo una estrella de rock, puede ser peligroso.

- Pediré un taxi.

- Si gustas puedes entrar a la residencia y de ahí marcar a un taxi, tenemos los números en una agenda de una de las mejores agencias de taxis de todo Inglaterra. - abre la puerta para que entre.

Entramos a la residencia y ella pone su bolso sobre un pequeño sofá, tomó el teléfono y la miro... veo que se quita su chaqueta de piel y veo que lo que traía debajo de aquella chaqueta si era una blusa de color azul rey y también veo que tiene los senos algo grandes, una cintura muy pequeña y unas caderas grandes. Mierda... pero que mierda me pasa, Carrie esta hospitalizada y yo estoy fantaseando con una chica universitaria. ¿Qué carajos me está pasando?
Suelta su cabello rubio que le llega a la cintura, luce bastante hermosa pero... es una niña a comparación de mi que ya tengo 30 años, además... estoy con Carrie.

My little girl... (Nikki Sixx)Where stories live. Discover now