❝Son Chaeyoung, por favor quítese los audífonos, estamos en clase.❞
La chica nueva en el colegio era algo extraña y no obedecía ciertas reglas escolares. Además, solía tener problemas para hacer amigos, por lo que era un blanco para los bullies...
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Mina siempre fue mala recordando fechas. Sólo habían tres fechas importantes que recordaba: Su cumpleaños, el cumpleaños de Chaeyoung (gracias a la notificación del calendario) y navidad. Otras como los cumpleaños de sus amigos, e incluso su aniversario, no las recordaba por más que lo intente.
Chaeyoung, en cambio, recordaba todas y cada una de las fechas importantes. Era un calendario andante. Hoy era catorce de febrero, San Valentín. Nuestra pequeña protagonista siempre pensó que era simplemente una festividad comercial, que el amor se celebra todos los días desde que está con Mina, pero a veces le hacía ilusión sorprenderla.
Todos los demás días de San Valentin que pasaron juntas, Chaeyoung, sin saber realmente qué regalar, le daba a Mina algo que a ella le gustaría recibir, aunque no fuera tan del agrado de la nipona. Entre esos regalos podíamos encontrar fidget toys, merch de sus series favoritas, hasta un par de audífonos canceladores de ruido. Estos regalos, si bien eran más usados por Chaeng que por cualquiera, habían llegado al corazón de la mayor, pues lo que importaba era el gesto ¿Verdad?
Esta vez, por ser su primer San Valentín como esposas, Chaeyoung quería sorprenderla con algo que realmente disfrute. Quería hacer algo especial, algo que no solo fuera un regalo, sino una experiencia que Mina recordaría para siempre. Sin embargo, sabiendo que sus habilidades sensoriales eran diferentes, decidió pedir ayuda a sus amigos para tener ideas más allá de sus propias experiencias.
Chaeyoung decidió consultar a sus amigos para obtener ideas para sorprender a Mina en este San Valentín. Comenzó marcándole a Momo, quien le sugirió comprar un pastel y preparar una cena especial.
─ ¡Oh, Momo, eso suena genial! ¡Gracias por la idea! ─ exclamó Chaeyoung antes de cortar la llamada, emocionada por la sugerencia.
Animada por la respuesta de Momo, Chaeyoung continuó buscando ideas. Llamó a Somi, quien le sugirió regalos pensados cuidadosamente.
─ Eso suena maravilloso, Somi. ¡Gracias por la sugerencia! ─ respondió Chaeyoung, tomando nota mentalmente de la idea de los regalos.
Luego, Chaeyoung le marcó a Hoseok, quien le recomendó flores y confeti para alegrar la velada.
─ ¡Flores y confeti! ¡Me encanta la idea! Muchas gracias, Hoseok! ─ dijo Chaeyoung, con una sonrisa brillante.
Con todas las sugerencias en mente, Chaeyoung se lanzó a la tarea de hacer realidad el San Valentín perfecto para Mina. Sin embargo, mientras llevaba a cabo los preparativos, la realidad se tornó desafiante para la pequeña Chaeyoung.
La tarea de comprar regalos en una concurrida tienda la abrumó. El bullicio, las luces y la multitud resultaron ser más intensos de lo que Chaeyoung podía manejar cómodamente. Aún así, nuestra pequeña protagonista era fuerte y resisitiría. "Mientras vea a Minari sonreír, va a valer la pena", pensó.
Luego, al comprar flores, la variedad de aromas en la tienda se convirtió en una tormenta sensorial para Chaeyoung. La fragancia abrumadora la hizo sentir mareada, pero se obligó a continuar, manteniendo en mente la imagen de un San Valentín perfecto para Mina.
