Timeless Academia

Invocación: Gilgamesh

Tendría que pensar en esa respuesta rápidamente, porque el Servant hizo su llegada de una manera inolvidable.

Una ola de energía dorada se extendió desde la base del círculo de invocación, recorriendo todo el suelo de la cámara. A medida que el géiser de maná continuaba fluyendo hacia el techo, Izuku y los demás verían la silueta de algo que se elevaba dentro del maná mismo, ileso por la producción excesiva de energía.

La energía se dispersó repentinamente en un destello de luz brillante, lo que obligó a Izuku a protegerse los ojos de la intensidad. Se desvaneció poco después, pero cuando bajó la mano y trató de ajustar su visión, vio la forma frente a él.

Una vez que pudo ver claramente, se congeló, sus ojos al principio se enfocaron en el gran trono dorado situado allí.

"Deberías regocijarte y maldecir este día, mestizo".

Naturalmente, su atención se centró en el que hablaba, mientras se sentaba perezosamente en el trono. No fue una sorpresa en ese momento quién era esa persona, ya que nadie más podía comandar la presencia que tenía el hombre en cuestión.

La brillante armadura dorada que vestía, casi a juego con su salvaje cabello dorado, ya era una fuerte impresión, incluso si Izuku no la había visto antes. La forma en que contrastaba con sus profundos ojos rojos solo se sumaba a su presencia única.

"Porque este es el día más significativo de tu vida. Tu fortuna se ha acabado, y ningún otro evento en tu vida se comparará con este".

Sin embargo, fue la mirada fría y desinteresada que llevaba lo que envió escalofríos por el cuerpo de Izuku.

"Has pedido ayuda incesantemente. Por fin, el Rey de los Héroes, Gilgamesh, te ha respondido".

Izuku mantuvo la mirada fija en el rey que tenía delante, sin saber qué hacer. Ni siquiera sabía por dónde empezar. Automáticamente, se encontró arrodillado ante el héroe que tenía delante, pero no pudo apartar la mirada.

Si el Rey de los Héroes sintió algo por la débil muestra de respeto, no lo mostró.

"Ahora, respóndeme".

Los ojos del rey se entrecerraron ligeramente, lo suficiente para mostrar que Izuku recibió un mínimo de atención.

"¿Eres el mago arrogante que busca aferrarse a la brillantez de un rey?"

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La Epopeya de Gilgamesh. La historia más antigua conocida, registrada por los antiguos mesopotámicos hace más de cuatro mil años. Muchas partes de la historia se han perdido a lo largo de los siglos, pero lo suficiente como para contar la historia completa ha sobrevivido hasta el día de hoy.

Esta es la historia del primero en ser considerado un héroe por la humanidad. Sin embargo, al principio, estaba lejos de serlo.

Rey de la ciudad de Uruk, y siendo dos tercios dios y un tercio hombre, Gilgamesh no tuvo reparos en abusar de su autoridad sobre su pueblo. Los sometería a cualquier cosa que sintiera que serviría a sus intereses personales, sin importar las pruebas que les impondría.

Para los hombres, a menudo los obligaría a realizar trabajos forzados para construir obras dedicadas a su gloria. De lo contrario, los desafiaría a pruebas de fuerza o competencias, aunque era obvio que ganaría. Los hombres a menudo estarían exhaustos y débiles después, pero eso no le preocupaba a su rey.