Devon rió y también pasó su mano por la cintura de Edward pero él dejó un beso en su mejilla.

—No le hagas caso —le dijo Devon y se escuchó una fuerte risa por parte de Ronan.

Pero de pronto escucharon un golpe seco y los tres miraron a su alrededor, encontrándose con uno de los lobos que había caído de rodillas mientras miraba fijamente a Ronan. Ronan frunció el ceño y miró a Devon y Edward, este último parecía estar aguantando la risa.

—¿Y a ese qué le pasa? ¿Por qué me mira así?

Edward se acercó a su hermano para murmurar algo a su oído.

—Parece que un lobo se imprimó de ti —fue lo que murmuró.

Ronan sonrió con suficiencia y cierto orgullo por escuchar eso. Acomodó el caro y bonito saco que estaba usando y se acercó a aquel lobo, inclinándose hacia adelante pues el pobre seguía de rodillas sin poder pensar con claridad.

—Me llamo Ronan Denali —se presentó con una sonrisa bastante coqueta— ¿cuál es tu nombre, cariño?

El chico sintió que sus mejillas comenzaban a arder pero no podía apartar la vista de ese hombre tan hermoso.

—Se... Seth Clearwater —tartamudeó.

A Ronan le pareció más que adorable.

—Que lindo —murmuró más para sí mismo y le extendió una mano para ayudarlo a ponerse de pie. Seth miró la mano de Ronan que estaba llena de anillos y tragó pesadamente antes de tomar su mano sintiendo una fuerte descarga eléctrica que lo atravesó de pies a cabeza.

De pronto era incapaz de pensar con claridad o de formular una frase completa. ¿Qué era esa extra sensación? Le gustaba pero no comprendía del todo lo que ocurría.

Devon y Edward los miraron alejarse aunque Ronan volteó a verlos rápidamente guiñándoles un ojo antes de desaparecer junto a Seth.

Devon rió mientras negaba y Edward puso los ojos en blanco pero enseguida se dirigieron a sus lugares pues la ceremonia estaba por comenzar.

Bella había terminado su carrera en letras inglesas y Jacob había decidido no asistir a la universidad, prefiriendo quedarse con la manda en La Push y hacerse cargo del taller. Le iba bastante bien pues muchos turistas paraban por allí y aprovechaban para arreglar sus autos.

Sin embargo, hacia un mes y medio que les llegó la invitación a su boda. Devon y Edward estaban sorprendidos pero les alegraba que por fin pudieran dar el siguiente paso igual que ellos lo harían aunque no le habían dado la noticia a nadie, prefiriendo esperar a que la boda de Jacob y Bella pasara para que no pensaran que querían opacarlos o algo por el estilo.

Así fue que viajaron de Nueva York de regreso a Forks para la boda. Bella había invitado a todos los Cullen a la celebración y todo parecía ir con calma.

La ceremonia sería en La Push, cerca de la casa de Sam, y todo era realmente precioso. La decoración era bonita y el ambiente era bastante agradable.

Al terminar la ceremonia, dio inicio a la fiesta y fue cuando Devon y Edward se acercaron a los recién casados para felicitarlos. Después de todos esos años, ya no era extraño ni incómodo para ninguno por lo que incluso se abrazaron y hablaron durante un momento antes de ir a sus lugares.

Sweater Weather ๛ Edward Cullen ✔Where stories live. Discover now