El valor de no prometer lo que no podras cumplir

El recuerdo

Amelia

Veo como Lio sale corriendo para evitar unas cuantas preguntas que le iba a hacer, dejando eso a un lado me concentro en Vale que esta igual que yo, el tiempo que pase con ella mientra vimos los distintos vestidos me encanto, es muy dulce en verdad, siento que con el tiempo llegaremos a ser buenas amigas, me contó de como le gustaba todos los vestidos que le hacía probar y que algun dia quisiera una fiesta como la que voy a tener.

– Vamos Vale – le doy un golpecito en la espalda para que camine conmigo – ya escuchaste a tu hermano, en una hora viene lo cual es mejor para que veas todos los vestidos que me voy a probar sin que él te quiera alejar de mi lado - le sonrió.

Al estar en la sala puedo ver como la modista de Martina ya está lista, al verme sonríe muy emocionada, ella hizo mi primer vestido y desde entonces cada año solemos llamarla unas cuantes veces para que me preparara mis vestidos solo que al estar enferma las cosas se complicaron y tuvimos que cancelar mi fiesta de quince y dieciséis años así que prácticamente en dos años no me ha preparado un vestido.

– Hola Amelia – se acerca a darme un abrazo – estas muy hermosa – dice al separarnos del abrazo y mirarme detalladamente – me emocione mucho cuando me dijeron que la preciosa Amelia necesitaba un vestido para su fiesta.

– Me alegro de verte Andrea, ya hacía tiempo que deseaba que mi modista favorita me hiciera un vestido – la halago, su trabajo es impecable tanto que tiene una muy buena reputación.

– Siempre es un gusto hacerte tus vestidos – su mirada se desvía a Vale la cual está a mi costado viendo la interacción que tengo con Andrea – ¿quien es esta pequeña? – mira su ropa, de seguro ya se dio cuenta que este fue uno de los tantos vestidos que hizo para mi – lleva puesto uno de mis vestidos - con cuidado toca la tela del vestido dando por acertado lo que dijo.

– Ella es la hermana de Emilio – responde mamá Martina con un falso tono dulce, no entiendo porque le molesta tanto nombrarlos.

– Si, quiero que a ella también le hagas un vestido – digo sorprendiendo a mamá Martina, carajo creí que no se enojaria como lo esta solo que trata de ocultarlo tomando un poco de agua del vaso que sostiene en su mano.

– Pero Addy solo trajimos aquí a Andrea para que hiciera tu vestido – me mira severamente dándome a entender que no aceptara hacer otro vestido y pues mucho menos pagarlo.

– No hay problema, tomale las medidas porfavor – pongo a Vale delante de mí – yo pagaré su vestido – Andrea luce encantada tanto que se acerca a tomarle sin rechistar sus medidas a Vale.

– ¿Mi amor puedo hablar contigo un momento? – pide mamá tratando de controlar la cordura, yo asiento en respuesta.

– Ya vuelvo – le aviso a Vale y le doy una sonrisa para que vea que todo está bien – con permiso – le digo a Andrea la cual está muy ocupada tomando las medidas de Vale que ni siquiera se da cuenta de que he salido de ahí.

Camino algo nerviosa hacia la cocina donde mamá ya esta esperandome mientras se sirve lo que parece ser un té, al verme ahí me mira muy seria, tanto que me da hasta miedo pronunciar alguna palabra, se que por su comportamiento no quiere ni a Emilio ni a Valeria pero quiero que esa niña sea feliz teniendo un vestido más que sea confeccionado a su medida.

– Addy no debes pagar el vestido de esa niña – sirve otra taza de té – tampoco debes darle tus vestidos de cuando tenías su misma edad – me da la taza de té.

– Solo quiero que tenga un vestido mamá además ese vestido no me entra asi que no veo problema en que ella lo tenga – trato de excusarme pero aun así niega con la cabeza sin aun aceptar mi decisión.