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Sunghoon se hundió en el pecho de Sunoo, escondiéndose como si de un pequeño niño se tratase, pues en estos momentos se sentía como si su corazón estuviese siendo arrancado de su pecho lenta y torturosamente. Por lo que solo lloró hasta que la realidad volvió a golpearlo, dejándolo desmayado entres los brazos de su primer amor.

Sunoo solo trataba de controlar sus hipidos, mientras abrazaba al cuerpo de Sunghoon y llamaba por ayuda desesperadamente. Sintiendo un dolor inexplicable en su pecho por ver a Sunghoon de esa manera.

-S-se h-ha des-mayado- le habló a un doctor quien al escuchar los gritos de Sunoo pidiendo ayuda se acercó rápidamente al lugar.

-Señor Kim, se que no es fácil estar en el lugar de ambos en estos momentos, pero por favor mantenga la calma. Sunghoon en estos momentos necesita su apoyo, aún es muy joven y no sabe sobrellevar del todo bien este tipo de asuntos, necesitamos que sea fuerte por ambos para la mejoría de Jungwon.- mencionó el alfa de manera calmada, mientras cargaba a Sunghoon entre sus brazos.

Sunoo asintió lentamente con la mirada perdida en algún punto del lugar. Sin dejar escapar lágrimas en sus ojos, se levantó como pudo sosteniéndose de la pared una vez sintió que volvería a caer.

¿Dónde diablos conseguiría un corazón en menos de cuarenta y ocho horas?.

-Seré fuerte por ambos, aunque me duela y sienta que este muriendo- susurró Sunoo una vez el doctor había dejado la sala.

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-¡Necesito que revisen en cada hospital de Seoul y busquen a un niño que este por fallecer, preferiblemente de la edad de Jungwon. También busquen en otras ciudades que sean cercanas. Si las familias acceden y se llega a un acuerdo por favor notifiquénmelo de inmediato!. -¡Le daré trescientos millones a quien vaya más rápido y quinientos millones a quien lo consiga primero!.

-¡Y a las familias ofrezcanle mil millones, tienen menos de 24 horas!- le gritó Sunoo a su personal mientras estos lo miraban con sumo asombro, por la cantidad tan grande de dinero que el omega estaba ofreciendo.

-Sunoo, Sunghoon jamás estará de acuerdo con esto.- dijo Heesueng, mientras seguía a su mejor amigo.

-Le prometí que haría lo que sea por el y por Jungwon.- dijo Sunoo de manera firme, mientras sentía sus ojos picar por lágrimas, las cuales no dejó escapar pues estaba tratando de demostrarse fuerte, aunque sabía que seguramente su alfa se enojaría con el al despertar y tal vez lo odiaría.

-¿Si sabes que la familia de aquel "niño" que buscas tal vez no acepte tu propuesta?, estarán de duelo y eso es algo que debe respetarse. Yo también adoro a Jungwon y a Sunghoon, pero crees que eso los haría felices a ambos?, sobornar a la familia de alguien que está apunto de morir?, es demasiado Sunoo.

-¡CÁLLATE!- gritó Sunoo, mientras cubría sus oídos para no tener que escuchar las duras palabras de su mejor amigo.

-¡ESTOY DESESPERADO Y NO QUIERO PERDER A UNA DE LAS PERSONAS QUE MÁS AMO. SOY UN EGOÍSTA Y LO SÉ, PERO SI JAKE ESTUVIERA EN EL LUGAR DE JUNGWON HARÍAS LO MISMO POR EL!.- volvió a gritar el omega, mientras, tiraba todas las cosas que estaban encima de su oficina dejando a Heeseung perplejo en su lugar, mientras veía sus ojos cristalizarse por la mención de Jake en el tema.

Sin más el mayor salió de la oficina de Sunoo, dejándolo solo para que recapacitara un poco sobre sus acciones y palabras.

Una vez que quedó solo en aquella fría y vacía oficina, el omega sintió su mundo derrumbarse al saber que cada una de las palabras de Heeseung eran ciertas. Sabía que cuando Sunghoon se enterara iba a molestarse con el, pero le había prometido que haría lo que sea para salvar a Jungwon, incluso si Sunghoon lo deja y se va de su lado.

Mi pequeño alfita (sungsun)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora