Dᴇ́ᴊᴀᴍᴇ Cᴜʀᴀʀ Tᴜs Cɪᴄᴀᴛʀɪᴄᴇs [Aᴍʏ Sᴀɴᴏ x Tᴀɪᴊᴜ Sʜɪʙᴀ]

CAPÍTULO 35: Sin Perder La Fé

AMY

Al día siguiente, por la tarde...

Me había quedado dormida en el hospital desde ayer a la madrugada... Le había mandado varios mensajes a Taiju pero no sé si había venido o no... Le comenté lo sucedido a mis hermanos e incluso a Yuzuha y los demás miembros de la ToMan, no quería que se alarmaran por si no me veían en las próximas... 15 reuniones, seguramente.

Me miré al espejo y aparte de estar despeinada, tenía ojeras, y los ojos algo hinchados de tanto llorar. Apenas me podía alejar de la habitación de Hanma, no quería que le pasara algo mientras yo no estaba.

Ahora estaba sentada en un sillón, al lado de Hanma. Por la ventana daba algo de sol así que aproveché para leer un libro que me había traído Izana de casita para intentar distraerme.

- Hola, Hola! - oí una voz dulce mientras entraba por la puerta con una bandeja de comida.

- Hm? - musité confusa mientras cerraba el libro y ponía mis gafas encima de mi cabeza.- oh, hola Yuzu - sonreí levemente.

- Como estás, reina? Debió de ser un palo muy duro, pero ya verás como todo mejora, confía en mí - me afirmó, para después darme un cuenco lleno de frambuesas, una de mis frutas favoritas.

- Espero que sea así, no debiste molestarte... Por cierto, Taiju vino ayer? - le pregunté mientras llevaba una frambuesa a la boca con ayuda del tenedor.

- Si, pero me dijo que se fué por el simple hecho de que estabas dormida, y no quería molestarte.

- Oh, ya veo...

- Ah! Mira - me avisó Yuzuha mientras ponía una caja encima de un mueble.- te traje algo de mi ropa que no utilizo, espero que te guste.

Yuzuha... Ella era como mi otra hermana. Siempre me ha cuidado y me ha apoyado, no sé cómo lo hacía, pero siempre me sacaba una sonrisa.

- Qué? No, no puedo aceptarlo Yuzu, es demasiado - me negué.

- Ni en broma! Venga! - me insistió.

Al final acepté y me probé la ropa en el baño de chicas.

- Mírate! Estás preciosa! - me sonrió Yuzuha viendo como llevaba puesto un vestido con estampados alegres.

- Hm, me veo muy extraña - musité.

- De eso nada! - me puso una mano en el hombro.- solo necesitas... Un buen arreglo.

En ese momento ambas salimos del baño y allí estaban Mikey y Taiju, hablando entre ellos.

- Hermana! - me gritó Mikey abrazándome solo verme.- porqué no nos avisaste?...

- Estábais dormidos, no quería molestaros... Y nuestros demás hermanos.? - pregunté.

- Oh, Izana y Emma fueron a hacer unos recados, Shinichiro está en la cafetería, no te preocupes, estamos todos bien - me sonrió y me volvió a abrazar.- no me esperé eso de Hanma... Pero ya verás como todo va a mejor.

Intenté sonreír y vi a Taiju completamente congelado ante mi, solo hacía que mirarme y noté como un pequeño rubor cubría parte de sus mejillas. Era totalmente extraño en él.

- Yuhuu, tierra llamando a Taiju? - le dijo Yuzuha moviendo su mano en frente de su cara extrañada.

- Eh? - dijo este volviendo en sí.- ah, si, estoy bien, no os preocupeis. Espero que hayas estado bien, Amy.

- Gracias Taiju, estoy algo mejor... Pero quisiera proponerte algo. - le dije.

- Hm? Claro, lo que sea. - aceptó.

- Quiero que me lleves a la iglesia. - le solté directamente.

- A la iglesia? - preguntó, pero evitó sonsacarme razones.- si, por... Por supuesto. Vendré en una hora a buscarte, tengo que atender unos asuntos.

Mientras este se alejaba y yo me quedaba con Yuzuha y Mikey, varios miembros de la ToMan vinieron acompañados de unos doctores.

- Amy! - gritó Baji abrazándome.- cómo estás? Comiste? Te veo demasiado delgada, espera, dime que Cenaste ayer por la noche...

- Baji! - sonreí ante tal interrogatorio.- estoy bien, estoy bien - le abracé de vuelta.- no tenias porqué haber venido... Yo no merezco atención, la merece Hanma...

- Tranquila, Amy-chan - me sonrió Mitsuya.- todos vinimos a apoyarte y a darle fuerzas a Hanma, al fin y al cabo, todos somos de la ToMan.

- Venga, venga - me dijo Haruchiyo apoyando una mano en mi hombro sonriendo.- Shuji es fuerte, no te desanimes, vale?

- Lo intentaré... - acepté a regañadientes.

- Escucha, Amy - me ordenó Draken acercándose.- yo cuidaré de él, necesitas estar con tu familia y también con tus seres queridos, prometo que si hay noticias, te avisaré al segundo.

- En serio lo harías? - pregunté.

- Por supuesto!

- Y aparte, Draken no estará solo - anunció Takemichi acompañado de Inui y Koko.

- Gracias chicos... - musité evitando unas lágrimas.

- Amy - me miró Takemichi.- podemos hablar a solas?

- Am, claro, por... Por supuesto.- acepté.