Dᴇ́ᴊᴀᴍᴇ Cᴜʀᴀʀ Tᴜs Cɪᴄᴀᴛʀɪᴄᴇs [Aᴍʏ Sᴀɴᴏ x Tᴀɪᴊᴜ Sʜɪʙᴀ]

CAPÍTULO 16: Bienvenido, Haruchiyo

AMY

Al día siguiente, 11:49am.

- Ayy... Falta mucho? - dije quejándome.

- Ya casi llegamos, no seas tan apurada - dijo Hanma mientras que yo lo sujetaba de la cintura para no caer de la moto.

Estaba realmente ansiosa por ver de nuevo a Sanzu, no sabía como estaba, no sabía nada de su vida. Me hablaba con Senju y Takeomi, claramente, pero jamás lo fui a visitar al reformatorio, y menos con lo que sucedió hace unos días.

- Llegamos enana - dijo Hanma bajando de la moto y quitándose el casco, dejando al descubierto su pelo, con su mecha rubia tapando mitad de su frente, ya que se había duchado y aún tenía el pelo mojado.

- Ufff... Estoy muy nerviosa...

Solo bajar de la moto vi a un chico alto, con el pelo rosa, saliendo de aquél lugar tan horripilante.

- Sanzu!! Cuánto tiempo - dijo Hanma acercándose y golpeándole levemente el hombro.

- Gracias Shuji, no estás nada mal eh - dijo Sanzu bromeando.- pero mira a quien tenemos aquí. Amy Sano - sonrió.

- Sanzu!!! Te eché de menos! - dije mientras que corría hacia él, pero me detuve incomodamente porque sabía que no le gustaba el contacto físico.

- Ay, de verdad - dijo Haru abriendo loa brazos.- aprovecha, que ando de buen humor.

Corrí y lo abracé. Me sentía protegida de nuevo. Con él y con Hanma, no habría nadie que me hiciera ningún daño.

- Y esto? Desde cuándo te tapas un ojo? - dijo señalando mi mechón, el cual tapaba el ojo izquierdo.

- Am... - dije intentando evitar la pregunta.

- Venga venga, dímelo - dijo retirando mi mechón.- POR TODAS LAS PASTILLAS VOLADORAS, QUE COJONES TE HA PASADO?! - dijo Sanzu sorprendido.

- Fué... Ya sabes... Makoto - le dijo Hanma susurrando.

- PERO ESE TÍO ESTÁ LOCO?! - volvió a gritar.- juro que cuando lo pille pienso rajarle el maldito estómago.

- Calma calma... Estoy bien... - dije mientras que jugaba con mis manos.

- Y eso no es todo... - advirtió Hanma mirando a Haruchiyo.

Le hice una señal a Hanma en silencio para que cerrara el pico, pero mi señal no sirvió de nada, ya que en pocos segundos ambos hombres se giraron hacia la carretera.

- Bueno... Mejor te lo cuento después - dijo Hanma nervioso.

- Shuji, que demonios hiciste ya? - Dijo Sanzu señalando aquel coche patrulla que se acercaba a los 3.

- Hanma?! Qué pasa?! - dije nerviosa.

- Amy, no hables! Súbete a la moto! - dijo mi mejor amigo otorgándome el casco.

- Joder tío, por una vez que no me meto en problemas, vas tú y lo haces por mi - dijo Sanzu montando en su moto, la cual le trajo Takeomi dos días antes de salir y la dejó aparcada.

- Qué culpa tengo yo de no traer dinero al supermercado y robar por mi cuenta? - dijo Hanma tan tranquilo, como si fuera muy cotidiano en su vida hacerlo.

- Robar?! - dijimos el pelirrosa y yo a la vez.

Hice caso a Hanma y me subí a su moto, que por cierto, estaba enamorada de ella: Su forma, su estampado de Guepardo y la textura de su asiento me volvía realmente adicta a las motos. Como Shinichiro.

- Si, Robar - dijo arrancando la moto.

- Y se puede saber que robaste? Como no fuera tabaco, no me lo explico - dijo Sanzu arrancando la moto y saliendo como una bala.

- Pues robé comida, como por ejemplo... - se quedó pensativo mientras que salía como otra bala.

- HANMA! CASI ME TIRAS! - grité del susto, ya que este había arrancado de golpe y ni siquiera me dió tiempo a sujetarme.

- Agárrate nena, me llaman el ladrón de Jamón Serrano! - rió.

- Con razón... Encaja a la perfección con tu nombre - se burló Haru mientras que daba un derrape para girar a la izquierda.

- Sois de lo que no hay - dije negando con la cabeza.

Corrimos como balas por todas las calles de Shibuya, oía a la policía a lo lejos y como la sirena sonaba cada vez más y más cerca de nosotros.

- Vamos cariño, vamos más rápido! - dije con cariño.

- Awww, gracias Amy - dijo Hanma dándose por aludido y acariciando mi mano.

- Se lo decía a la moto - dije descojonándome.

- JAJAJAJAJJA - oía como Sanzu se reía estando a nuestro lado, mientras que sonreía de esa manera tan psicópata que lo hacía tan excepcional.

- Amy, agárrate! - me advirtió Hanma.

Me agarré con fuerza y noté como el viento me daba en la cara, dejando al descubierto mi cicatriz y cada parte de mi rostro. Me sentía libre y sentía como una presión muy extraña en el cuerpo al notar que la moto derrapaba de una manera increíble.

15min después...

- Los perdimos? - dijo Shuji jadeando.

- Los perdimos - dije sonriendo y enfadada a la vez.

- Uyuy, cuidado con Amy, Hanma, veo que a ella no le gustan los ladrones - dijo el pelirrosa admirando el espectáculo.

- Ow vamos, solo fué algo leve, nada más - me dijo acariciando mi mejilla.

- Pf - gruñí. - te lo pasaré. Pero a la próxima no seré tan buena, de acuerdo? - dije con un tono desafiante.

- De acuerdo damisela, usted manda. - me dijo, para después, besar mi mano.