❀ Capítulo 8

29.4K 3.6K 2.2K
                                    

Louis mira el timbre plateado que tiene enfrente y sin dudarlo ni un poco, lo presiona de manera delicada, pero decisiva. Voltea de manera inevitable hacia arriba al escuchar un repiqueteo de campanillas.

No pasa mucho en realidad para que una mata de cabellos rizados color chocolate se asomen rápidamente por el balcón adornado con flores por todos lados y la brillante mirada de Harry se clave en Louis sonriendo tímido. Lo saluda con un gesto de la mano indicándole que espere un poco, acto seguido se aleja.

Y si, Louis esta sonriendo como idiota en ese momento. Por que es lo que Harry le provoca.

-Vaya, si que eres puntual -es lo primero que Harry dice en cuanto sale por la puerta.

No la puerta de la repostería, sino una puerta de madera clara que está al lado de esta. Louis supone que es por que hoy no abren y no sería nada cómodo salir y entrar por la puerta de la repostería cuando solo sale por... ¿Leche? Por las noches. Además de que por que Harry trabaje abajo y viva arriba no es obligatorio que ambos lugares esten conectados.

-¿Eso es malo? -pregunta Louis, preocupandose por si a lo mejor esta interrumpiendo algo... o a alguien.

-No -sacude la cabeza -la verdad, llegaste a tiempo de manera perfecta, me acabo de desocupar.

Esta vez, sin las diademas con moños, Louis puede ver lo hermoso que se ve Harry cuando el cabello le cae hacia un lado. Se detiene a admirarlo, por que nunca tiene realmente demasiado tiempo para admirar a alguien tan bello como lo es Harry con su piel de porcelana a la luz del atardecer.

-Tu... uh, ¿Quieres pasar? -este se hace a un lado, dejando el paso libre a unas escaleras iluminadas.

-Tu primero, yo no se hacía donde ir -encoje sus hombros, Harry asiente dandole la razón.

Louis entra después de él, cerrando la puerta, que tiene un seguro. Se pregunta por que siendo Harry una persona que parece un ciervo a punto de salir huyendo a cada momento, solo tiene un seguro simple en la puerta principal. Su duda se resuelve cuando al final de las escaleras y girando por un pasillo iluminado hacia la izquierda Harry se detiene abruptamente y Louis nota que contiene la respiración.

-Por favor, todo es muy... -murmura Harry, con las mejillas completamente coloradas -Aquí me doy el lujo de ser yo mismo... asi que...

Lleva su dedo pulgar a sus labios y lo muerde nervioso.

-No soy del tipo de persona que hace comentarios groseros de los demas, si es lo que te preocupa -sonrie Louis, para calmar al chico y darle confianza.

Entonces Harry saca un manojo de llaves y comienza a abrir cada una de las cerraduras que están en la puerta, unas cinco o seis quizás. Por al menos un minuto, lo unico que se escucha es el repiqueteo de estas, mientras que las agiles manos de Harry giran llaves y retiran seguros.

-¿Abres y cierras esto todos los días? -Louis abre exageradamente los ojos. Harry asiente, como si no fuera nada.

-Quiero estar seguro -es lo unico que dice.

Y la mente de Louis no puede evitar formular, "¿Seguro de qué?"

-Bueno, ya no te tienes que preocupar por eso, creo que nada ni nadie podría pasar todo esto -señala con el menton la puerta.

La mirada de Harry se torna vacia por unos segundos y Louis piensa que ha dicho algo que no debería. Va a disculparse por ello, pero Harry se adelanta dandole un empujón a la puerta revelando lo que bien podria ser la sala de estar.

-Bienvenido a mi dulce hogar -dice entrando dando pequeños pasos.

Tomlinson concuerda con él. Es un dulce hogar.

❀ Sweet boy ❀ [L.S. AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora