Capítulo 44

804 113 32
                                    

Esa noche paso con relativa tranquilidad, y digo relativa porque tuve pesadillas, pero nada muy fuerte, pero si lo suficientemente fastidiosos para hacerme despertar alarmado.

—Carajo... esas sí estuvieron feas... —Queje al dejar salir un suspiro. —Por suerte no fue nada grave.

Me levante por un vaso con agua, y fue cuando escuche la puerta de Aby abrirse.

— ¿Qué haces despierto? —Pregunto al caminar a la cocina mientras bostezaba.

—Tuve un par de pesadillas, nada muy serio.

—El que solo tengas pesadillas es serio para mí.

Tras tomar ella agua, me tomo de la mano y me llevo hasta su habitación donde se dejó caer en la cama y luego me jaló para caer yo encima de ella, abrazándome así contra su pecho, mientras me acariciaba con mucho cariño.

—Si es necesario que vele por tu sueño, eso haré, pero quiero que estés bien. Descansa, aquí estaré siempre para ti Shoto. —Sonrió con mucho amor mientras me miraba.

—Si hubiese conocido a alguien como tú en la otra vida, creo que las cosas fuesen sido diferentes para mí. —Confesé mientras me acomodaba.

—De ser así, no te fuera conocido, por lo que malvadamente debo decir que me alegro de que eso no pasara. Ahora descansa, mi fiero guerrero, yo me encargare de proteger tus sueños de todo mal que los aseche.

No tengo palabras para poder definir lo que esas palabras me hicieron sentir, fue como ser arrullado por mi madre y ser un niño de nuevo, por lo que siguiendo esas palabras, me acomodo y concilie el sueño rápidamente.

Fue como caer noqueado, no tuve recuerdo alguno de lo que paso, hasta que la misma Aby fue quien me despertó con suaves susurros.

—Arriba dormilón, recuerda que tienes trabajo.

—Mmmm...

—Sí, sé que ni ganas tienes de levantarte, y si por mi fuera, estaríamos así todo el día, pero Hana no nos puede ver tan unidos, además de que ya tienes un compromiso.

Me levante con mucha flojera, y hasta un tanto desorientado, pero no fue nada que agua fría a la cara y café no solucionaran.

— ¿Y Hana?

—Roncando, y seguro abrazando tu almohada mientras sueña que le haces cosas sucias.

— ¿Lo crees?

—Cincuenta, cincuenta.

—Ya me voy.

—Que te vaya bien, ten mucho cuidado allá afuera. —Pidió al acercarse y darme un gran beso en la mejilla. —Te quiero un montón.

—Igual.

Dicho eso, me transporte a las cercanías del gremio, no fue nada difícil encontrar a un par de dragones con forma de jet a reacción.

—Buenos Días Shoto.

—Buenos días Latias, Latios, Aby me contó de que quería hacer un trabajo conmigo hoy.

—Así es, es un trabajo algo complicado y quisiéramos tu ayuda con esto, una familia se perdió cerca del monte nevado.

—Sera más fácil para nosotros que podemos volar, pero estarán bien con el frío, no hablamos de un clima templado.

—Siempre y cuando no duremos mucho tiempo quietos, estaremos bien. —Comento el Mayor. —Ya hemos estado en climas así antes.

—Entendido, tienen el mapa con la ubicación.

Renací como una leyenda.Where stories live. Discover now