εριѕο∂ιοѕ |ᵉˣᵉᵠᵘⁱᵉˡ ᶻᵉᵇᵃˡˡᵒˢ ° ᵗᵉʳᵐⁱⁿᵃᵈᵃ

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┌┘єϰєգυιєℓ└┐

📍 𝙱𝚞𝚎𝚗𝚘𝚜 𝙰𝚒𝚛𝚎𝚜, 𝙰𝚛𝚐𝚎𝚗𝚝𝚒𝚗𝚊.
15 𝚍𝚎 𝚘𝚌𝚝𝚞𝚋𝚛𝚎 2020

Estamos volviendo del aeropuerto con Agustina, Vivi se había vuelto para Mendoza. Agus iba en silenció mientras miraba por la ventana, yo iba concentrado en el caminó.

— ¿vamos a comer algo?. –puse mi mano en su pierna.

— estoy cansada, y tengo hambre entonces si.

Sonreí, manejé hasta un mostaza, bajamos los dos juntos. Pedí dos hamburguesas mientras Agustina me esperaba sentada, caminé hasta donde estaba ella, compré coca también.

— la gente te está empezando a reconocer. –se ríe. Las gafitas y gorrita no funcionaron.

— te recuerdo que vos también sos conocida mi amor. –le sonreí.

Algunas personas se acercaron a pedirnos fotos, las cuales no nos negamos para nada. Después otros nos felicitaban por el tema del embarazo y yo notaba que Agus se ponía incómoda ante eso.

Terminamos de almorzar y volvimos para casa, apenas llegamos Agustina agarró a Coco.
Caminé hasta la cocina para poder tomar agua.

— está noche tengo una cena con los chicos amor. –me asomé.

— y anda. –se ríe.

— no.. pero ¿querés venir conmigo? Es en lo de Rojo.

— no quiero meterme en tus cosas, podes ir tranquilo eh, sin culpa.

— pero yo quiero llevarte. –le agarré la cintura. Porfi.

— está bien. –suspira. Pero si Lola puede ir con nosotros.

— Lola va con Valentín. –le di un beso.

Agustina me quedó mirando, claramente hace días no nos besamos, pero bueno, de a poco la voy ganando nuevamente.

— ¿te querés bañar conmigo?. –bajé mis besos hasta su cuello.

— pedís mucho Zeballos. –se ríe.

— es para ahorrar agua mi reina, no lo hace mal a nadie.

Se cruzó de brazos riendo. Rodeó su cuerpo con mis brazos para tirarla al sillón y comenzar hacerle cosquillas. Su risa.. su risa era tan hermosa.

— ¡para! ¡dale! Bueno, si me bañó con vos, pero basta. –se sigue riendo.

— te amo. –le di un beso.

Se levanta y se acomoda los pelos. Caminamos hasta el baño, al llegar Agustina me saco la remera a los besos, prendí la ducha, para ya terminar de desnudarnos y meternos bajo la ducha. Pero....nos bañamos solamente, le lavé su pelo, le hice masajes, eramos solamente nosotros.

Al salir de bañarnos, nos quedamos boludeando en el baño, Agustina se estaba secando el pelo y yo la miraba. Yo tenía sólo una toalla alrededor de mi cintura.

— ¿qué es eso?. –me mira a través del espejo.

— ¿qué cosa?. –la mire confundido.