εριѕο∂ιοѕ |ᵉˣᵉᵠᵘⁱᵉˡ ᶻᵉᵇᵃˡˡᵒˢ ° ᵗᵉʳᵐⁱⁿᵃᵈᵃ

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┌┘αgυѕτιиα└┐

📍 𝙱𝚞𝚎𝚗𝚘𝚜 𝙰𝚒𝚛𝚎𝚜, 𝙰𝚛𝚐𝚎𝚗𝚝𝚒𝚗𝚊.
01 𝚍𝚎 𝚜𝚎𝚙𝚝𝚒𝚎𝚖𝚋𝚛𝚎 2020

Me desperté por lo incómoda que estaba. De un lado tenía a Lola abrazandome, Melanie con sus manos detrás de la cabeza y a los pies de la cama Celeste

— puta madre, son re incómodas para dormir ustedes. –me quejé. Lola correte, me estoy meando.

— es muy temprano, no me hables mal. –se da vuelta. Déjame dormir.

Caminé rápido hasta el baño.
Éstos días fueron mejorando, lo sabe nuestro círculo, amigos... yo todavía no se cómo decirle a mi vieja, aunque para darle la noticia voy a esperar un tiempo más.

Me lavé los dientes. Anoche Exequiel salió con Enzo... supongo que está bien, voy a dejar que disfrute, no quiero que se sienta atado con el embarazo.

Al salir del baño ya estaban todas despiertas, me volví acostar.

— ¿qué le pasa a Celeste qué tiene cara de culo?.

— Enzo no le contesta. –explica Lola.

Me apoyé en su hombro, Exequiel tampoco me contestaba pero no quiero agobiarlo.
Nos quedamos mirando una película las tres juntas.

Melanie se quedó dormida en la mitad de la película, Celeste se había ido a bañar y Lola estaba mirando su celular, estaba hablando con el colorado.

— chusma. –me mira.

— justo vi de reojo, no fue mi culpa.

— ¿cómo te sentís?.

Se acostó de costado apoyando su cabeza en una de sus manos.

— bien.. cómo puedo. –suspire. Siento que no era lo que Exequiel quería.

— mira Agus... Exequiel es un boludo, no hay otra manera de describirlo. Pero si él no está, no llega a estar en algún momento que me necesites, levantas el teléfono y me llamas, yo no quiero que pases esta etapa sola.

— es que.. yo espero que esté porque él me dijo que íbamos aprender juntos. –se me cortó la voz al hablar.

Lola me miró con cierta pena, me abrazó fuerte y yo rompí en llanto, no podía más, no sentía a Exequiel conmigo en esta situación y eso me rompe más.

— ¿vamos a merendar? ¿Querés? Así te sentís mejor vos y mi sobri ¿si?.

Estás semanas la comida me estaba llamando muchísimo más la atención, así que aceptó todo lo que tenga que ver con comida.

Invitamos a Celeste pero no quiso, cuando se siente mal se cierra y no quiere hablar con nadie.. le insistimos pero ya dijo que no, tampoco queremos presionarla, necesita su espacio.

— ¿qué vas a pedir?. –me mira.

— todavía no se, estoy pensando un ratito. –sonreí.

Una vez que ambas nos decidimos pedimos, nos quedamos hablando.

Por suerte con Lola pude formar una relación hermosa, nos llevamos bien, nos entendemos ciertas veces.
La verdad.. es prima de Exequiel y todo, pero lo putea más que todos nosotros.