εριѕο∂ιοѕ |ᵉˣᵉᵠᵘⁱᵉˡ ᶻᵉᵇᵃˡˡᵒˢ ° ᵗᵉʳᵐⁱⁿᵃᵈᵃ

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┌┘αgυѕτιиα└┐

📍 𝙱𝚞𝚎𝚗𝚘𝚜 𝙰𝚒𝚛𝚎𝚜, 𝙰𝚛𝚐𝚎𝚗𝚝𝚒𝚗𝚊.
27 𝚍𝚎 𝚓𝚞𝚗𝚒𝚘 2020

Salí de bañarme. Con la prima de Exequiel pegamos buena onda y hoy íbamos a ir a tomar algo a un bar.

— ¿dónde vas?. –se tira a la cama.

— a tomar algo ¿querés ir conmigo?.

— no, Enzo no salé hoy.

— ¿qué tiene qué ver eso?. –frunci el ceño.

— que.. no, no quiero salir.

Quedé mirando a Celeste... pudimos hablar y aclarar las cosas entré nosotras, por suerte ya estaba todo bien.

— podrías salir sin avisarle eh. –me reí.

— no tengo ganas de salir, otro día te aceptó.

Le di un beso en la mejilla y agarré mis cosas. Salí del edificio y me entró una llamada de Exequiel.. fa y éste.

— hola. –atendí.

— hola mi amor, ¿salís con Loli?.

— eeh si en un toque ¿por?.

— pasa q.. PARA VALENTÍN TE DIJE QUE SI IBA HACERTE LA SEGUNDA ESPERA. –gritó.

Me alejé el celular de la oreja, se pone a gritar el pelotudo.

— no grites boludo. –me subí al taxi. ¿Qué querés?.

— pasa que Valentín el colo, quiere con Lola. –me explica. ¿Les hacemos la segunda?.

— eeh si, de última que vaya en mi lugar.

— ¡no! Podemos ir los cuatro. –dice rápido.

— bueno, está bien. –suspire. Más vale que tu amigo no sea un pelotudo.

— ¿vos te pensás qué yo dejaría qué esté con un pelotudo? No, nos vemos te amo.

Me cortó... en éstos días me estuvo hablando así, no se, es raro, porque venimos hablando todos los días por mensaje. Recuerdo cuando nos empezamos a hablar, que tiempos eran esos.

Llegué al departamento de Lola, golpeó y me abre ella.

— ¿qué onda?. –me salude.

— nada.. hace frío. –me quejé. Te tengo que contar algo.

— decime, para que termine de arreglarme y vamos.

— Exequiel y Valentín quieren venir tomar algo con nosotras. –la mire. Podemos invitarlos, si querés.

— eeh si.. si vos no tenes problema con Exe, si.

— no, está todo bien.

Todo lo que hago para que Barco se chamuye a Lola. Les dije que vengan a buscarnos, porque ya que estaban podían venir, no les costaba nada.

Valentín se bajó del auto y las dos lo quedamos mirando sin entender.

— para que vos subas adelante. –me mira. No me iba a bajar, pero Exequiel me empujó.

Lola se ríe.. no tiene nada de gracioso eso.
Me subí adelante, salude a Exequiel con un beso en la mejilla. Lola me pasó su celular para poner música, según ella tenía buena música.

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Estamos tomando unas cervezas mientras hablábamos, me senté al lado de Exequiel, Lola estaba enfrente mío. Se tiraban algunas miraditas con Valentín, ya los quiero juntos.

— ¿vamos a un boliche?. –propone Barco.

— ¿a un boliche querés ir?. –habla Exequiel.

— ¿ya saliste?. –miró a Lola.

— no, este gil no quiere sacarme a ningún lado. –miro a Exequiel.

Terminamos aceptando.
Me puse mi campera y salí a fumar un ratito, estaba sentada en unos banquitos que estaban ahí.

A los minutos vi que salió Exequiel.

— tenía que dejarlos solos. –se rasca la nuca.

— claro. –me reí asintiendo.

— estás muy linda vos. –me agarra la mano haciendome parar.

— y vos.. muy mentiroso.

— yo no miento. –me mira mal. Pero si, sos hermosa.

Sonreí.... uy me tentó, pasa que cuando se pone camisa me puede, me puede.
Terminé agarrando su nuca y juntando nuestros labios, esos labios que no probaba desde hace unas semanas... lo extrañé.

Exequiel me agarró la cintura pegandome más contra él, por suerte no había nadie acá, eramos solamente él y yo.

— ¿después del boliche podemos dormir cucharita?. –junta nuestras frentes.

— lo voy a pensar. –me reí.

— chicos. –viene Lola.

Al sentir su voz me separe rápido, Lola se estaba tratando de no reír. Claramente se dio cuenta de la situación.

— ya nos vamos yendo. –nos mira. ¿Van?.

— si, vamos.

Camine rápido para agarrar mis cosas. Subimos los cuatro al auto.

Con Lola íbamos compartiendo un porrito, los chicos estaban tomando una cerveza que habían comprado antes de irnos.

Llegamos al boliche, entramos. Exequiel me agarró la cintura, yo estaba de la mano con Lola porque la idea era no perderla a ella.

— podes soltar a mi prima un ratito.

— no, ella salió conmigo. –me abraza Lola. Vos viniste de colado.

Me reí, Exequiel puso cara de culo y automáticamente miro a Valentín.
Lola y Valentín terminaron yéndose a bailar, yo estaba pidiendo un fernet.

— van a pensar que estás soltera si estás sola. –viene Exequiel.

— estoy soltera. –me reí mirándolo.

Agarré mi fernet, era el amor de mi vida, no puede ser tan rico.

Exequiel me agarró la mano y fuimos a bailar. Parecía que había cambiado, estaba siendo todo cómo cuando nos conocimos.

No quiero caer.