La Prueba

Nada es Casualidad

Sentadas en The Crown, como solían hacerlo siempre, 5 mujeres compartían risas e historias, las chicas estaban contentas de poder ver a Serena de nuevo con ellas, estaban muy extrañadas que últimamanete cancelaba los planes para verlas, por eso todas tanto las in como las outers habían hablado y designado a Rei de conocer el por qué Serena las evitaba últimamente, sabían que la rubia se ocupaba algunas veces en los trabajos de su carrera de relaciones internacionales, fue sorprendente que al graduarse, la princesa de la Luna ya tenía en mente lo que deseaba estudiar y el empeño y dedicación demostrado al estudio, más cuando tuvo que pasar los exámenes de inglés, pero era muy grato ver su ánimo y concentración por la vocación que había encontrado, había hecho nuevos amigos, algo que no era del todo grato para su novio ya que él podía notar como la miraban los chicos, ella no se daba cuenta, pues solo tenía ojos y amor para su príncipe.

Pero algo muy raro sucedía ese verano, Serena muy poco se veía con sus amigas o con Darien, este último también extrañado por su comportamiento , acudió a la chicas pensando que había cometido alguna acción que hubiese molestado a su novia, pero aunque estaba más alejada, seguía igual de amorosa y tierna con él cuando se veían, ella comprendía los largos turnos que a veces tenía en el hospital o las largas jornadas de estudio que tenía que tomar en algunas ocasiones para su especialización en neurocirugía, a veces cuando regresaba a su oficna encontraba alguna comida en su escritorio, con el sello de un conejito y un corazón, Serena no le hablaba o desaparecía varios días pero las comidas nunca fallaban. Darien en su mayoría siempre estaba ocupado pero la presencia de Serena aunque sea para solo un beso o saludarlo le hacía mucha falta, varias veces preguntó el por qué de su distancia pero ella solo respondía con una sonrisa, lo besaba y le decía que lo amaba que no tenía nada de que preocuparse. Cuando Darien comunicó esto a las chicas, estas no sabían si preocuparse por eso concretaron hablar con ella. Pero ahora viéndola ahí con ellas, devorando dulces como suele hacerlo fue un gran respiro de alivio, se notaba como siempre y para hacerlo mejor informaron por mensaje de texto a Darien donde se encontraban para que pudiera verla.

– Hola princesa – una voz fuerte y gruesa saludaba a Serena, quien al notar de quien se trataba se levantó y abrazó fuertemente a su amado.

–¡ Darien! Que sorpresa verte acá, recuerdo que el día de hoy ibas a descansar después de la jornada de ayer, se que fue muy dura y debes estar exhausto – Darien conmovido por la preocupación reflejada en el rostro de su princesa, tomó su rostro y sonrío con mucho amor

– Creí que no te acordabas de mi

– De eso nada, siempre pienso en ti, conozco tus rutinas por eso te doy tu espacio, pensé que querias dormir hoy o asear tu departamento.

– La verdad prefería verte Serena, me hace mucha falta tu compañía – Serena se sonrojó completamente y sintió un dolor profundo al pensar que tenía a sus amigas y novio alejados todo este tiempo, pero era necesario, ella debía entender toda la prueba que vendría sobre ellos y luego el enemigo que se acercaba.

– Pensándolo bien, el día de hoy también me llamó Haruka para citarnos a todos acá – Siguió hablando el moreno de ojos zafiro, sacando a Serena de sus pensamientos – ¿recibieron ustedes el mensaje? – se dirigió hacia las chicas y Serena que había retornado a su lugar en la mesa junto a él ahora respondió.

– La verdad no he visto mi celular

– Nosotras sí contestó Lita – por eso también quedamos en citarnos en este lugar

– ¿Segura Lita? Creí que era por ver de cerca al gerente del lugar – dijo una Mina con ojos llenos de picardía

– ¡ Mina! – enunciaron todos a unisono