Capítulo 36

215 16 44
                                    

Arley

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Arley

El lío que cargo en mi mente ha adquirido dimensiones inabarcables. Nunca creí que escoger un atuendo fuera una tarea tan difícil.

¿Qué cambia ahora?

¿Será la idea de que no he pisado terreno nocturno en un buen tiempo o son los nervios que me atacan al saber que en unas horas partiré a esa cabaña junto a Jaffner?

Me he probado un centenar de atuendos, he realizado un centenar de combinaciones, pero siempre termino quedando en un limbo.

Quiero que al salir de Drown me vea impecable, quiero lucir bonita para mí obviamente, pero quiero también que él lo note.

Reviso entre atuendos que ya he usado pero me agradan, otros que no me agradan del todo o de plano no se amoldan a lo que apostaría en mi cotidianidad que se escapan de mi zona de confort pero se ven lindos en mi piel. No cuento con mucho tiempo así que mi último recurso es escogerlo al azar.

Cuelo mis manos en el desorden sobre mi cama y obtengo dos piezas. Al abrir mis ojos sonrío. Este atuendo se clasifica dentro de los que escapan de mi zona de confort.

Suspiro unos instantes y sin perder un segundo más, comienzo a deslizar por mis piernas el par de shorts negros. Coloco la camiseta negra trasparentada sobre mi cuerpo y me impacto al ver cómo mi sostén se ve a través de la tela. Jamás había tenido el valor para usar algo como esto y se siente extraño en mi cuerpo, pero me gusta.

Cuando finalmente termino con mi quehacer, mi teléfono vibra y un mensaje de mi amiga resalta en la pantalla. Es momento de bajar.

Algo detiene mi salida cuando mi amiga camina hacia mi dirección cargando un vaso entre sus manos. Edde camina apretando sus piernas.

—Necesito un baño.

El auto se apaga detrás de ella y su hermano aparece detrás con una sonrisa de burla.

Edde me entrega su vaso y lo sostengo unos segundos para divisar que tiene forma de piña. El líquido que carga es de un color naranja y el olor a alcohol que emana es suficiente para develar lo que lleva dentro.

—Por el pasillo a la derecha y ¡Feliz cumpleaños! —Indico y ni siquiera llego a abrazarla porque la chica aprieta sus piernas al caminar como si fuera a orinarse encima en cualquier momento.

—Si no aceleraba ese motor iba a matarme o posiblemente la mataría a ella por orinar mi auto —la risa es inevitable y al voltearme me encuentro con un par de ojos grises en el marco de la puerta.

— ¿Ya han comenzado a beber? —Pregunto lo obvio.

—Prueba, es jugo de mango con piña y tiene una pizca de vodka.

— ¿Pizca? Aquí parece que han vaciado la botella —bromeo y vuelvo a acercar el vaso a mis fosas nasales para cerciorarme de lo que ya ha quedado claro.

Change This HeartWhere stories live. Discover now