¿Quién es Mitch Rapp?

IV.- Declaración de Guerra

Derek se mantuvo callado al lado de Stiles mientras regresaban al bosque, después de ese tiempo ya había amanecido. El lobo estaba sorprendido del cambio del humano pero entendía que con el trabajo que llevaba y lo que le había ocurrido no podía ser el mismo, él sabía lo que era pasar por algo traumático y que te dejara vacío.

Sin importar todo ese cambio, su corazón sigue latiendo solo para ese humano fuerte, quiere conocerlo de nuevo y amarlo como lo ha hecho por años pero sabe que llevará tiempo. Los ojos de Stiles solo muestran el dolor que ha tenido que soportar estos años.

- ¿Quieres decir algo sobre lo que hice? No tienes que guardarte nada Derek. – le dijo Stiles mientras limpiaba uno de sus cuchillos con el que había cortado el cuerpo del hombre.

- No hay anda que decir. Hiciste lo que debiste, ya no son unos niños y este problema es mucho más grande para la filosofía de Scott de no matar nadie. De hecho por eso estamos en este problema, su hubiéramos acabado con Monroe hace años estaríamos en paz. – dijo Derek frunciendo el ceño. Él jamás juzgaría las acciones de Stiles, por una razón lo hace así que confía ciegamente en él.

- Has cambiado pero supongo que la mayoría lo hemos hecho. Scott lo arruino pero no podemos hacer nada solo enfrentarnos al problema. Yo tengo una misión que cumplir, es mi trabajo.

- Eres parte de la oscuridad de la CIA, ¿no es así?

- Básicamente soy un asesino. Me encargo de desaparecer a todas las molestias que tenga el gobierno, es una suerte que la mayoría son narcotraficantes, delincuentes, violadores, corruptos e incluso terroristas. No estoy orgulloso de muchas cosas que he hecho pero sé que gracias a mi trabajo he salvado a personas inocentes. – comentó Stiles sin mirar al lobo.

- Es tu trabajo, hay algunas personas que se manchan las manos por los demás. Siempre has hecho eso así que no tengo nada que decir, solo que has hecho un buen trabajo. – le dijo Derek con una ligera sonrisa mientras colocaba su mano sobre el hombro del castaño logrando que se detenga.

- Es mi trabajo. – susurró para después seguir caminando.

Ambos caminaron en silencio hasta llegar de nuevo a la mansión donde apenas se estaban despertando los demás. El pequeño Alexis salió frotando su ojito y con un pequeño peluche de un lobo entre sus manos, él amaba ese lobo, se lo había reglado su papá Peter diciéndolo que su hermano Mica lo había comprado hace tiempo.

- ¿Qué haces despierto tan temprano, Alex? – le preguntó Stiles tomando al niño entre sus brazos.

- Escuche tu voz, quería desayunar contigo. – le dijo Alexis mientras recargaba su cabeza sobre el hombro del mayor.

- La próxima espérame dentro, no quiero que te enfríes. Debes de dormir más, yo te despertaré cuando regrese de hacer ejercicio.

Derek sonrió. Puede que el castaño haya cambiado pero seguía teniendo su hermoso corazón y debilidad por los que ama. No era tonto y había notado que Stiles les ocultaba mucho más de lo que le había dicho además de que no tenía ni idea de porque su relación con Scott se había deteriorado con los años, Lydia le había dicho algunas cosas pero dijo que los detalles solo podrían dárselos esos dos pero Scott se negaba a contar algo solo le había dicho que había cometido un gran error y por no escuchar a Stiles lo terminó lastimando. Theo tampoco hablaba mucho de eso, se mantenía callado y notó que al ver al castaño se alejó con cierto temor.

Sabía que muchas cosas habían pasado el tiempo que no estuvo, lo notó la primera vez que se enfrentaron a Monroe y se encontró a Stiles cuando aún estaba en el FBI pero decidió no comentar nada por el momento.

Una vez dentro la mayoría ya estaban despierto y algunos había hecho el desayuno. Noah se acercó a sus hijos dejando un beso en la frente del menor, haría lo mismo con Stiles pero el chico realmente se había vuelto alto.

- Desayunes, cachorros. – les dijo Peter mientras el castaño se sentaba con el pequeño sobre su regazo.

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Scott se encontraba sentado sobre uno de los troncos caídos fuera de la mansión, la manada se encontraba entrenando y por el momento él solo los veía. Stiles se acercó al alfa, ya no portaba todas sus armas pero si tenía la misma ropa y una ligera capa de sudor después de todo había regresado de correr por el bosque.

- Hola Stiles, ¿necesitas algo? – le preguntó Scott nervioso. El lobo quería arreglar las cosas con sus mejor amigo, sabía que lo que había pasado había dañado de manera muy grave al castaño y su amistad, prácticamente lo traicionó, no lo escuchó y muchos sufrieron por eso pero quería arreglar las cosas. El problema es que ahora el humano emanaba un aura de respeto y temor, no sabía como tratar con él.

- Me gustaría entrenar a la manada. Monroe atacará y pronto nos dará una advertencia, Chris ya se los advirtió estas personas no son un chiste. – cruzó sus brazos sobre su pecho – Tengo entrenamiento del FBI y la CIA, puede que tengas mas fuerza que un humano pero si no tienen técnica no podrán vencer a estos profesionales. Puedes preguntarle a Derek todo lo que le ha servido lo que aprendió de Breaden, yo mismo aprendí de ella en algún momento. Tenemos que convertirnos en armas que puedas vencer a asesinos y mercenarios, estas personas no se tocan el corazón para matar, ellos lo disfrutan. – suspiró mientras relajaba un poco su mirada – Ya me he enfrentado a personas como esas y créeme Scott ellos solo irán por su objetivo sin importar quien se cruce en su camino. Yo vine a protegerlos porque siguen siendo mi familia, no dejaré que ellos les pongan una mano encima pero también es su problema no puedo encargarme solo de esto. ¿No quieres matar? Bien, no entrenes con nosotros y solo quédate atrás. Los voy a entrenar para que no me estorben.

- Puedes hacer lo que creas correcto Stiles, confío en ti.

Stiles abrió levemente los ojos con sorpresa para después asentir y dirigirse a la manada solo que se movió hacía un lado donde pasó una flecha con una cabeza incrustada en la punta, la cual se clavo en el árbol frente a él.

Derek se encontraba al lado del castaño en segundos, la manada tardó más en responder pero solo gruñeron hacia el bosque.

- No es necesario que vayan, esto solo es un mensaje. – dijo Stiles mientras veía la cabeza del hombre lobo, el cual había muerto con sus rasgos fuera.

- ¿Quién es? – preguntó Isaac con asco.

- Un lobo del territorio. Esta es unadeclaración de guerra, la batalla esta mucho mas cerca de lo que pensamos. –les dijo Stiles de manera seria.