LA CHICA DEL TEATRO [Javon Walton]

CAPITULO 13

            《CAPÍTULO EDITADO》

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A la mañana siguiente

El sol ya se asomaba por las grandes ventanas de la habitación, era un sol hermoso no de esos que con solo sentirlo tienden a ponerte de mal humor.

Me asome detrás de las cortinas, la ciudad ya estaba en movimiento el sonido de los autos, los pájaros cantando me hacían sentir realmente bien.

—Buenos días.—salude feliz saliendo de la habitación.

—¿Que tal dormiste?.—pregunto mi madre preparando el desayuno.

—Bastante bien, necesitaba esas horas extras de sueño.

—Buen día, bonita.—saludó Diane saliendo del baño—El agua está realmente buena, deberías aprovecharla.

Yo asentí, regrese a la habitación para buscar la ropa que me pondría para el resto del día. Como hoy era un día asolado opté por ponerme una camisa color blanca y unos short de mezclilla, junto a mis tenis blancos.

Antes de salir de la habitación mi celular estaba sonando, la verdad no recordaba donde lo había dejado anoche tenia demasiado sueño y no recuerdo donde lo dejé, seguí buscando como loca y como resultado me di un golpe en mi pierna.

—Mierda.—susurré para mi.

Minutos después ya tenía mi celular en mano.

Eran mis amigos.

—Hey chicos, ¿como les vas?.—pregunte al otro lado del celular.

—Nos va bien, ahora que podemos ver tu cara.—dijo Jerry.

—¿Qué es lo que harás hoy?.—pregunto Bex.

—Uhm... creo que mamá quiere salir a dar un paseo para conocer el lugar.—me acerque a la ventana y les mostré a mis amigos—Todo esta maravilloso.

—Ojalá poder ir contigo ahora mismo.—comentó Bex.

—Solo han pasado algunas horas, pero se siente como si fueran meses.—comentó Jerry.

—Estamos tan acostumbrados a estar los tres juntos, que no podemos nisiquiera estar un día separados.—me reí.

—Por cierto aún no has visto a un chico que te parezca lindo. Osea yo se que ahora mismo estás viéndome pero...—No pudo terminar su frase ya que Bex le había dado un pequeño golpe en su cabeza haciendo que él se sobara.

—Ella nisiquiera ha salido de su hotel, Jerry relájate, estoy segura que cuando ella lo encuentre ni caso te hará.

—Es verdad... bueno olvida lo que dije.

No podia evitar reirme ante aquellos comentarios.

—Contestado tu pregunta no, no he visto a nadie lindo pero si lo llego a ver ustedes serán los primeros en saberlo.

—Más te vale, porque si no iré a donde estas a golpearte.—amenazo Bex—Te llamaremos luego, tenemos clase ahora mismo.

—No olvides abrir lo que te dimos, diviértete te queremos.

Una vez que les colgué comencé abrir lo que mis amigos me habían dado, Bex me regalo 2 libros y una sudadera, Jerry me regalo una camiseta color blanca. Miré la nota que venía al léela no pude contener una leve sonrisa

"Úsala cuando tu institución te lo diga"

¿Así que cuando mi intuición me lo diga eh?.

Bueno, eso es ahora.

Me adentré al baño para darme una relajante y merecido baño, no tarde demasiado ya que mamá me apresuraba para poder salir a conocer.

Ya estábamos en la recepción, a nada de salir cuando busque mi celular en mis bolsas, al no verlo supuse que lo había dejado en la habitación.

—Adelantense, olvidé mi celular.—avise regresando al elevador.

—No tardes.—grito mamá.

Espere a que el elevador abriera sus puertas, una vez que las personas salieron yo entre iba sola. Me di un vistazo por el gran espejo que estaba detras de mi me retoque un poco el cabello, el sonido del elevador me aviso que ya estamos a un piso de bajas, volví a colocarme de frente para poder salir.

Estaba un poco a prisa, por lo que una vez que abrió sus puertas salí corriendo hacia la habitación y efectivamente ahí se encontraba mi celular, antes de salir tome una gorra color blanca.

Y salí corriendo, agradecí el que no hubiera gente en el pasillo, o al menos eso creí hasta que un instante más mi piel podía sentir lo frío del líquido que estaba en toda mi camiseta.

—Mierda.—susurré para mi viendo mi estómago.

—¿Estás bien?.—la voz de un chico se hizo presente.

—Un poco mojada, pero bien.—me encogí de hombros.

—Soy un idiota, discúlpame no te vi.—el chico busco algo en su mochila.

—Descuida también fue culpa mía, venía muy apresurada.

No podía mirar al chico estaba un poco avergonzada que quería que la tierra me comiera y me escupiera con mi madre y Diane, lo único que pude percibir era la gran diferencia de estatura.

Mire al chico por primera vez, me quede paralizada al reconocer inmediatamente quien era.

—Eres...—mi frase quedo al aire.

—Soy...—contestó con una sonrisa.

—Javon.—respondí finalmente.

—El mismo.— El sonrió de oreja a oreja.

Estaba viéndolo sin decir nada, mi trance estaba presente era aún más lindo en persona, claramente era aún más alto y su cabello era más largo.

—¿Te encuentras bien?.—pregunto sacándome de mi trance.

—Perfectamente.—respondí.

—¿Segura?.—preguntó—Era tu camiseta.

—Era tú agua.—rei

El río también, encogiendose un poco de hombros. Alzo su mochila color negra y comenzó a buscar algo.

—Ten.—el me acercó una camisa color negra.

Lo mire sorprendida ante esa acción.

—Vamos déjame arreglar mi desastre.—el movió su mano para que yo aceptara la camiseta.

—No es un desatre tan grande, pero gracias.—la recibí con una sonrisa.

—Tenía que hacerlo.

—Tengo que irme, me están esperando.

—Claro tambien a mí.—habló—Hasta pronto.—el me sonrió.

El se alejó mientras se ponia su gorra, y subía al elevador. Podía percibir el aroma de su perfume.

Nota de la autora:

La historia está siendo editada, aclaro que será el mismo contexto que tenía, solo estoy recortando algunos capítulos, arreglando unas cuantas de ortografía, etc.

Si tu lectora estas releyendo esta historia de nuevo, te lo agradezco mucho. Gracias por el apoyo y la espera.

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