Capítulo 17

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A veces es necesario ir muy lejos, fuera del camino, con el fin de volver a la distancia correcta. - Edward Albee.

***

Dorian estaba reunido con una clienta. Al parecer esta había sido estafada por una empresa de construcción. La mujer estaba abatida, no solo había perdido la contundente señal que había entregado, sino que además había sido despedida. Ella comenzó a llorar y Dorian suspiró, aquellas situaciones no le gustaban. ¿Qué podía hacer? No tenía la suficiente confianza como para darle un apretón cariñoso, mucho menos un abrazo, y a decir verdad, no le apetecía pasar esa barrera con ninguno de sus clientes. Por experiencia sabía que eso no traía nada más que problemas y él prefería evitarlo.

-Este tranquila - La intentó alentar -. Estudiaré su caso y le informaré de las posibles opciones. Seguramente se traté de una empresa fantasma y usted no haya sido la única perjudicada... Lamentablemente este tipo de sucesos ocurren cada vez con más frecuencia. Haremos lo posible para que al menos pueda recuperar el dinero invertido.

-¡Gracias! -sollozó sujetando la mano del abogado sobre la superficie - Sé que así será.

Dorian intentó esbozar una sonrisa ante la confianza de la mujer y palmeó el dorso de la mano que aún le sujetaba. Ella abandonó el despacho y él repasó algunas de las notas que había realizado. Se apeó para coger una carpetilla, guardar la documentación del caso y a continuación salió de la oficina. Se encaminó hacia su compañera, Gardenia, especializada en ese tipo de casos y le tendió la documentación.

-Tienes los datos de contacto de la Sra. Dumont en el interior. Al parecer ha sido estafada.

-¿Otra empresa fantasma? -preguntó lanzando un bufido.

-Por lo visto se está poniendo de moda... Analízalo, confío en que podrás hacer que muerdan el polvo.

-Dalo por hecho, jefe.

Gardenia le guiñó el ojo y comenzó a analizar la documentación. Dorian regresó a su oficina satisfecho con la entrega de sus empleados. La verdad era que se sentía afortunado por el personal de su bufete. Cogió su teléfono móvil y sin dudarlo la escribió:

"Hoy terminaré tarde. Tengo mi última reunión a las ocho. Me apetece verte."

A uno de sus clientes le era imposible adelantar la reunión y él se había visto obligado a ceder a ese horario infernal. De pronto, su móvil vibró y sus comisuras se alzaron al ver que se trataba de ella.

"Todo en esta vida tiene solución.

¿Por qué no te pasas por mi casa al terminar?

Tengo un trozo de bizcocho que estoy segura te encantará.

¿Qué dices? ¿Aceptas?"

"Espero llegar antes de las diez.

¿Me darás el bizcocho con tu boca? Es lo que ansío probar."

"Te esperaré para cenar. Prometo complacerte. Xoxo."

Dorian sonrió ante aquella promesa que albergaba demasiadas opciones.

A las seis y media de la tarde...

Dorian esperaba a Enzo en la terraza de un bar. Este último le había llamado y había insistido en verse, por lo que Dorian había aprovechado que tenía una hora libre, antes de la cita con su cliente, para ceder a su petición. El tono de su amigo le había prevenido, tenía un ligero tono hosco que le hacía sospechar que algo sucedía y que era importante. Cuando le vio aparecer, alzó su ceja con sorpresa. Enzo tenía una herida considerable en el labio inferior. Ambos se saludaron con la misma efusividad de siempre y el abogado vio su oportunidad para bromear.

Bailando con la traición | Erótica + 18 | Parte 1/4 Completa ✅Where stories live. Discover now