Capítulo 19

1.4K 101 363
                                    

En el capítulo anterior


Había tanta ropa... tantos zapatos... tantos vestidos... debía aceptar de que eran preciosos a pesar de que no era amante a la ropa tan femenina; veía cada artículo con total interés, mientras su mejor amiga salía buscaba algunos zapatos y joyas que combinaran con aquel vestido. Estaba tan metida en su tarea impuesta por ella misma que una irritable voz le arruinó por completo su mañana, podía irse al carajo.

-Ah, eres tú, la rastrera...

¡Podía irse completamente al carajo!


Presente


-¿Disculpa?- preguntó la castaña con un par de tacones entre sus manos destinados a su mejor amiga, el disgusto fue completamente palpable en su voz. Volteó con total desagrado encontrándose la mirada amielada que tanto aborrecía.

-¿Qué?¿te ofendí por decir la verdad?- una risa burlona salió de los labios de la pelirroja, su postura reflejaba, de cierta manera, la superioridad que ella misma se creía irritando aún más a _____.

-La verdad será que tú eres la rastrera, a mí déjame en paz, Ace- sentenció con rabia _____, ¿quién se creía que era esa bruja para tratarla así? ¿su madre? Y aun así la castaña sabía que ni su madre sería capaz de decirle cosas de ese estilo.

-¿Dejarte? Claro que lo haré, pero solo cuando dejes de acercarte a MI Ryder. Él tiene todo lo que necesita conmigo, no necesita a una perra en su vida- se acercó con pasos peligrosos a la castaña haciéndola retroceder, cuando se encontró entre algún estante y _____ sintió en su pecho un par de toques fuertes y altaneros, la mirada castaña se tornó fuego vivo.

-Primero: vuelve a decirme perra y no te salvas de un puño en esa cara manchada- habló tajante _____ levantando su puño cerca del rostro contrario quien reaccionó alejándose con un paso-. Segundo: Ryder no es de tú propiedad, él puede decidir a quién se acerca o no.

-Claro, y tiene que acercarse a una huérfana con delirios de señorita perfecta ¿no?- aquella mención desconectó el pensar con las acciones de la castaña quien, inmediatamente, agarró la camisa de la oji-miel de forma brusca levantando los talones de la contraria del suelo. Ace soltó una risa superior por aquel cometido: había logrado dar mella en una herida.

-¡¿Y tú cómo sabes eso?!

-Me lo contó Ryder, le diste tanta pena JAJA- la risa de Ace aumentó rápidamente. _____ estaba que no aguantaba más, tenía unas enormes ganas de atezarle un buen golpe en aquella risa tan estresante-. Mira, listilla, deja a Ryder en paz y dejaré de joderte la vida o si no... seguiré arruinando sus "citas/encuentros/salidas", como diablos las llamen ustedes ¿entendiste rastrera?. Seguiré en tu vida, apareciendo en tus pesadillas, hasta que te apartes de mí camino.

-¿fuiste tú?- la fuerza con la que mantenía levantada a la pelirroja fue cediendo hasta que esta llegó al suelo.

-¡Por supuesto! ¿de dónde creíste que salieron las abejas en el parque? ¿o el lodo en el jardín? ¿creíste que esa vez el muelle se cayó por viejo? ¡JA! ¡he estado detrás de ustedes todo este tiempo! Los he estado siguiendo desde las sombras para tener el momento ápice de todo esto y sacarte de mi camino de una vez por todas.

La joven mente de la castaña empezó a maquinar; los recuerdos se arremolinaron dentro de ella tomando sentido en aquello faltante, en los sucesos extraños de sus salidas con aquel chico de cabello castaño. Se alejó de la contraria con la mirada perdida en el suelo mientras daba sentido a lo expresado. Como si un foco se encendiera en su cabeza, recordó cierta conversación con su mejor amiga sacando sus propias conclusiones.

Jamás lo esperé (Ryder x tú)Where stories live. Discover now