♡︎:Ⓝ︎Ⓤ︎Ⓔ︎Ⓥ︎Ⓔ︎

249 20 17
                                    

— Lo logré — chilló la pelinegra emocionada mientras presumía su diploma de Neurocirujana — Miren — dijo feliz

— Estoy orgulloso de ti — dijo Alexander

— Lo lograste, hermana — dijo Jasha sonriente

— Sí... Gracias por venir — dijo Kaia con una sonrisa — Papá, Jasha, Alek, Adrien, Nicol — susurré — Estoy feliz de estar con ustedes — abrió los brazos, cuando su padre y sus hermanos la abrazaron

— Kay! — la llamó alguien

La joven  comenzó a buscar el dueño de aquella voz, con una sonrisa en su rostro, pues pensaba saber a quien le pertenecía esa voz, al ver a Jeongin ahí, corrió hacia él, tan feliz y animada. Jeongin también corrió hacia ella, se unieron en un fuerte abrazo. Kaia colocó sus brazos alrededor del cuello del chico, mientras que él la envolvió ej un fuerte abrazo.

— Felicidades, Kay — dijo con una sonrisa

— No esperaba que vinieras... Pero ha sido la sorpresa más bonita de hoy, gracias por... Venir — murmuró la pelinegra

— Mirate, Estás tan linda y seguramente serás la mejor neurocirujana del mundo — dijo feliz y se separaron del abrazo — Son para ti — Jeongin le entregó una caja de chocolates con avellanas — Sé que te gustan mucho — dijo con una pequeña sonrisa

— Gracias... Definitivamente tú recuerdas cada detalle — dijo la ojiazul — Oye, te tengo una sorpresa — añadió entusiasmada — ¿Cuando regresas a Corea del sur? — preguntó

— Apenas llegué y ya estás preguntando cuando me voy — dijo el chico finguendo estar ofendido

— No es por eso, tontito, yo soy feliz de verte. Solo es una pregunta, mi sorpresa te encantará — dijo la chica riendo

— Regreso mañana en la noche — respondió Jeongin

— Está bien — dijo Kaia — Oye... ¿Quieres venir con nosotros? — preguntó Kaia

— Oh, está bien, mi niña — respondió Jeongin

— Vamos — dijo Kaia tomando al chico de las manos.

En ese momento una sonrisa tan amplia y espontanea se dibujó en el rostro del chico, que por alguna razón, algo muy dentro de su corazón sintió un gran cosquilleo, igual que el que sintió cuando Kaia le regaló chocolates en el Withe Day , o cuando lo abrazó para festejar que debutaría, y tal vez era el mismo que sintió cuando se dio cuenta de que ella era su primer amor, era impresionante como recordaba tan bien ese momento aunque fue ya hace unos ocho años. Sí, había pasado un buen tiempo desde que se habían conocido.

La familia Novickov y Jeongin salieron del salón de ceremonias donde se había llevado a cabo la graduación, para dirigirse a un restaurante de comida china, que había sido elegido por Kaia, aunque Alexander no estaba completamente de acuerdo, si era consciente de que debía complacer a su unica princesa en un día tan importante para ella. Así que estuvieron un rato, disfrutando de la comida y charlando un poco.

— Sabemos que Kaia nunca se queda en un mismo lugar, todo el tiempo anda de aquí para allá y explorando nuevas cosas ¿Cuál es tu nuevo destino? — preguntó Jasha mientras con sus palillos intentaba agarrar una porción de fideos

— Es Corea del Sur — dijo como si nada para luego llevar a su boca un bocado de Ramen

Sin embargo, Jeongin no estaba tan tranquilo, comenzó a toser, mientras se atragantaba con su bebida. Kaia le dio algunas palmadas en la espalda mientras reía al verlo.

— No entiendo que te sorprende, yo dije que volvería y cumplí mi promesa — dijo Kaia riendo, al instante fue abordada por un gran abrazo de Jeongin, que aun no podía creerlo

— Volverás, Kaia, eso es fantastico — chilló Jeongin entusiasmado — Le avisaré a los chicos, haremos una pijamada y también saldremos a comer — hablaba emocionado

Todos en la mesa rieron un poco ante la reacción de Jeongin, mientras que Kaia se sintió completamente enternecida, como si su corazón se derritiese ante la calidez de ternura tan caracteristica de Jeongin.

— Nunca debo dudar de las palabras de Kaia Novickov, lección aprendida — dijo Jeongin

Luego de eso, Kaia hizo la sugerencia de ir a jugar bolos, así pasaron un rato super divertido y gracioso, al día siguiente, cuando el reloj marcaba las 11:46pm, Kaia y Jeongin debían ir y tomar su vuelo. La pelinegra y el castaño subieron a aquel avión tomados de las manos, para Kaia sería una nueva experiencia en un lugar que ya conocía, pero que ahora quería vivir de una manera más libre y para Jeongin, iniciaba una nueva étapa, teniendo a su mejor amiga cerca.

Fueron a sus asientos y ahí comenzaron a hablar, Jeongin miró su celular, ahí habían decenas de mensajes deseandole un lindo y tranquilo viaje, eran de su novia, él realmente no entendía bien las cosas, si bien se sentía hermoso saber que era tan especial para alguien, no comprendía como
Shin Hye podía amarlo de manera tan incondicional, sabiendo que él quizá no tenía tanto tiempo para dedicarle y que antes de ella había alguien que marcó tanto su corazón que sería un sentimiento inolvidable, aunque a veces se sentía tan triste y culpable, Shin Hye hacía por Jeongin todo lo que el hacía por Kaia y eso era realmente triste y lamentable, pues se sentía como un jodido traidor que lastimaba un corazón tan puro y hermoso como el de Shin Hye, pero él tal vez se sentía deslumbrado por la retadora y desafiante personalidad de la pelinegra que siempre había sobresalido ante sus ojos.

Jeongin estaba tan pensativo y deseando una respuesta a todas sus preguntas, se sentía tan tranquilo y feliz al lado de Kaia, mientras que cerca de Shin Hye se sentía feliz, pero también tenía miedo de decir o hacer algo incorrecto que la hiciera llorar. Y se odiaba a si mismo por mirar a aquellas dos chicas como una opción, pues ambas serían un privilegio ante cualquier persona que no tuviese un dilema como el que había en su mente, no tenía duda que cualquier persona daría lo que fuese para tener alguien tan brillante y amorosa como Shin Hye en su vida, así como cientos de personas podrían morir por un poco de amor por parte de Kaia o quizá tan solo una mirada. Pero él estaba completamente confundido.

Mientras tanto, la pelinegra solo miraba al chico, deseando descifrar que había en su mirada, se veía confundido, enamorado y perdido, una mezcla completamente indescifrable o al menos, Kaia no podía entenderlo, sin embargo, ella también se quedó perdida entre los hermosos ojos de Jeongin, eran tan penetrantes, oscuros y tiernos, definitivamente Kaia deseaba estar en el lugar de la chica que podía besar a Jeongin y mirarlo a los ojos mientras le decía lo mucho que lo amaba.

Ambos estaban confundidos, Jeongin se sentía perdido y necesitando saber bien que hacer antes de que fuese muy tarde y lastimar un corazón, mientras que Kaia sentía que estaba anclada, sin tener idea de a donde ir.

STAY WITH ME ♡︎ [YANG JEONGIN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora