¡TE ODIO!

Capítulo 54

Ben me sonrió desde la cama. Eran las once de la mañana y los rayos de Sol se colaban entre las sábanas.
Yo estaba sentada enfrente de él.
- Me encanta cuando sonríes. - Dijo rascándose los ojos. - Y me encanta que me líes. Porque tu boca dice que no es lo mismo, pero tus ojos me dicen que quieres quedarte.
Me quedé mirándole a los ojos con los brazos cruzados y sin decir nada. Simplemente mirándole. Mirando su sonrisa. Mirando la forma en la que mordía su labio intencionadamente. Mirando como parpadeaban sus ojos en un compás.
Y sonreí sin querer hacerlo.
Sonreí.
Ben era perfecto.
Ben era perfecto sin pretenderlo.
Cuando me miraba y yo automáticamente sabía que sus ojos me pedían que me quedara mientras su labio inferior seguía pegado al superior.
Ben era perfecto sin pretenderlo y eso era el único motivo por el cual él era perfecto a pesar de cualquier defecto que tuviera.

Pasé mi mano por su pelo y giró su cabeza besando mi muñeca y con su mano acarició la mía.
- No sabes como te había echado de menos.
- Ben...
- Te juro que me arrepiento tanto.
- Ayudame a perdonarte.
- No sé cómo hacerlo.
Le mandé a callar con un gesto amable y pegué su nariz a la mía.
Le rodeé con mis brazos y ambos cerramos los ojos. Me colocó al lado de él y noté su sonrisa.
Y le besé.
Le había echado tanto de menos que dolía hasta tenerlo cerca.
Porque Ben me dolía.
Pero era un dolor tan satisfactorio que era fácil de llevar.
Ben me dolía.
Y me encantaba que lo hiciera.

Pasó su mano por mi pelo colocándolo detrás de mi oreja derecha y me besó fundiendo mis labios en los suyos.
Éramos dos necesitados que solo nos necesitábamos a nosotros.

No voy a hablar de lo que vino después del beso ya que supongo que os lo imaginaréis.
Ben tenía una facilidad para quitarme la ropa que ni yo misma tenía.
Y Ben me llevaba al cielo. En todos los sentidos.
Cuando me gritaba.
Cuando me dañaba.
Cuando sonreía.
Cuando me besaba.
Cuando me hacía falta.
Y cuando me hacía sentir amada.