¡TE ODIO!

Capítulo 4

Ben entró por la puerta con el uniforme puesto, pero a su estilo. Mangas remangadas, los botones del cuello sin poner, la camisa por fuera del pantalón, el cual llevaba más bajo de lo normal y unos tenis.

Tiró la mochila al suelo, sentándose detrás de mí.

- ¿Usted cree que esos son los modales correspondientes para entrar a una clase de este centro? - Dijo el profesor de matemáticas-.

- Sí quieres me voy. - Dijo levantándose.

- Siéntese y asegúrese de atender a mi clase.

Cuando sonó el timbre, Abi se puso frente a mí.

- Bien, voy a ser clara y directa, o te alejas de Ben o te parto la cara. - Me dijo rodeada de sus estúpidas amigas lameculos-.

- Tú no eres quién para decirme de quién me debo alejar, Abi.

Recordé aquello que me dijo Ben. "No le tengas miedo a Abi".

- Es mi ex, y sigue enamorado de mí, créeme, he oído decir que ha ingresado aquí por mí.

- ¿Cómo? - Ben apareció de la nada con una manzana verde en su mano derecha. - Ni en tus sueños, Abi. Sólo has sido un pasatiempo más.

Abi se marchó sin decir nada.

- ¿Por qué has dicho eso? Eso está mal, Ben. Humillar a una chica está mal y más si has estado con ella. - Le reñí-

- He dicho la verdad, nunca estuve enamorado de ella, ni de nadie. - Seguido de esto dio un mordisco a la manzana y se sentó encima del pupitre.

- ¿Y para qué has estado con ella?

- Está buena.

- ¿Ese tipo de tío eres? Si sigues así ninguna tía va a querer estar contigo, sabes.

- Siempre quieren estar conmigo. Mírame.

- Puedes estar todo lo bueno que quieras pero con lo imbécil que eres jamás me enamoraría de ti.

- Pero si te dejas besar por mí, además, tampoco quiero que te enamores de mí, no me van las tías como tú.

- ¿Las tías como yo?

- Niñas ricas que solo miran por ellas, que se hacen las calladas y las difíciles.

- ¿De dónde sacas que me hago la difícil? - Se puso a centímetros de mí y puso su mano en mi cadera.

- Porque estás deseando que te bese y aún así vas a negarlo. - Me aparté-

- Yo no soy como todas con las que te lías, yo no me muero por besarte, ni quiero hacerlo.

- ¿Ves? A esto me refiero.