Desconocidos [✔]

Especial: Navidad

Elliot

Decidimos pasar Navidad en casa de Drew está noche, estos años siempre fuimos Katie, papá y yo, la verdad me hace muy feliz saber que Nicholas ahora es parte de mi familia, y yo de la suya.

Revisé el chat con él rubio ya que tenía mensajes sin abrir

"Trae algo rojo y verde, esa es la consigna para hoy :D"

Ni siquiera lo sueñes Drew.

Lancé mí celular a la cama y me tumbé en la misma, no sé porqué en estas fechas siempre estoy nostálgico, supongo que se debe a mí mamá, le encantaba la navidad, siempre se esforzaba por tener todo bien decorado y cocinar recetas típicas, extraño eso a veces.

Abrí mis ojos al recordar que debía preparar el regalo de Nicholas, sé que él jamás me aceptaría el regalo si se lo doy sin envoltura en navidad.

Bajé corriendo las escaleras y comencé a buscar un papel de color para envolver el libro.

—Mierda como envuelvo esta maldita cosa— traté de que quedé prolijo pero fue imposible—. ¡Maldición!

—Debes tener paciencia— Katie tomó el libro de mis manos—. Mira y aprende.

Ella comenzó a envolverlo delicadamente que quedó perfecto y a la medida del libro.

—¿Que haría sin ti, enana?— le di un gran beso en la frente.

—Probablemente no le darías el regalo a tu novio— sonrió y al instante volvió a atacar—. ¡De nada!

—Lo siento, gracias— negué con la cabeza.

También tenía un regalo para ella pero ese si que lo envolvieron en la tienda.

Ya eran las 5 de la tarde así que debía bañarme y estar listo para la cena.

Busqué en mi closet algo de ropa negra, claramente y me metí al baño para ducharme.

Me miré desnudo en el espejo, quería hacerme más tatuajes por todo el cuerpo, había visto varios modelos que me gustaron mucho, sé que a Drew le van a gustar.

Flexione mis brazos y giré mi cuerpo para verme mejor.

—No soy musculoso pero a mí novio le gusta éste flacucho— hablé solo.

Decidí de una vez por todas ducharme.

Luego de un rato volví a salir y me miré el rostro en el espejo, no creo que deba rasurarme hoy. Salí con la toalla envuelta en la cintura y entré a mí habitación.

Tomé mí celular para videollamar a Nicholas, quería molestarlo un poco.

—¡Hola! Estoy comprand...— cortó su frase al darse cuenta que estaba desnudo.

—Hey— mordí mí labio—. ¿Quieres ver más abajo?

—¡Elliot estoy en la tienda!— trató de ocultar sus mejillas ruborizadas.

—Que me importa— mencioné.

Solo se dedico a negar con la cabeza.

—Eres un idiota— rió.

—Que lindo eres cuando sonríes, ¿sabías?— relamí mis labios, su sonrisa me vuelve loco.

—Oh... gracias mi amor— volvió a sonreír y dio un beso a la pantalla— debo irme.

—Nos vemos en un rato— colgué.

Comencé a sonreír como un niño cuando le dan lo que quiere, maldición Nicholas Datchs.