Revelación. (Meliodas y Tú) #1[EDITANDO]

Capitulo 23

Unas suaves manos lo sacaron de su trance, frente a el estaba a ella, su semblante estaba lleno de preocupación, sus manos se veían manchadas de pequeñas gotas de sangre.

-Capitan, tranquilo, Elizabeth estará bien, esta muy estresado.

-¿Eh?

El joven paso sus manos por sus mejillas, que había sido aquello, lo había sentido tan vivido y doloroso, fue incluso capaz de hacerlo llorar, sin previo avisó la joven lo abrazo, el rostro del rubio había terminado entre los pechos de la chica, las lagrimas no se detenían, con lentitud la abrazo, sentía su aroma a el oleaje del mar.

-Verlo llorar sangre es preocupante, no es ni siquiera normal, la señorita Merlin ya fue a encargarse de el joven Gowther.

-¿Qué sucedió?

-Al parecer el joven Gowther no tomo los medicamentos que la señorita Merlin le dio y perdió el control de su poder.

-No me sueltes.

-¿Capitan?

-Por favor, un poco mas.

-Meliodas.

La joven suspiro y dejando que el rubio la abrazara acostó a ambos en un sillón de la habitación, el reposaba su rostro en sus pechos, ya no lloraba solo disfrutaba de las caricias que ella le proporcionaba al jugar con el rubio cabello de el.

-No, no lo entiendo.

-¿Qué no entiende Capitan?

-Porque no lo recuerdo del todo.

-¿Hm?

-Siento que te conozco de toda la vida, pero, hay recuerdos en mi memoria faltantes y no recordarlos me lastima.

-Tarde o temprano recordaras niño rubio.

-Te gusta ponerme apodos no es así.

-Tengo una extensa lista Meliodas.

-Si tu me pones apodos, ¿puedo ponerte uno a ti?

-Claro.

-¿Te puedo llamar _____?

Un fuerte dolor surco la cabeza de la joven, un quejido de dolor escapo de sus labios, pequeñas lagrimas escaparon de sus ojos, la joven llevo sus manos a su cabeza intentando calmar el dolor, esto lo noto el joven, preocupado se sentó en su regazo y tomo sus delicadas manos para halarla a el y abrazarla esta vez el, sus manos acariciaban su cabello, el dolor poco a poco se detenían.

-¿Estas bien?

-S-si Capitan, solo necesito un poco de descanso.

-Vamos a la taberna, allá hablare con Merlin.

El joven la cargo al estilo nupcial, la chica intento hacer que la bajara en inútiles intentos, en el camino se encontraron con la hechicera, Slader con un muñeco similar a Gowther, la princesa con el crédito y Diane algo herida.

La mirada de ellos fue de sorpresa al ver al pecado cargarla mientras ella se quejaba y pedía que la soltara, al pasar a un lado de la hechicera, el demonio hablo, su semblante era frío, extraño en el.

-En unos minutos nos vemos en la taberna.

-Muy bien Capitan.

Respondió la hechicera, el joven siguió su camino ahora con una avergonzada joven de ojos grises en sus brazos, una princesa dolida a sus espaldas mirando la escena en silencio, su primera lagrima se derramo, el primer sollozo se oyó, los presentes la vieron confundida, ella rápidamente retiro las lagrimas.