Capítulo 10

2.9K 321 32
                                    

Su tormentoso y cautivante mirar, había muerto en vida, su dulce sonrisa había perdido todo su esplendor, su corazón latía tan veloz como podía, cualquier persona con razonamiento temería de dar la vida por otros, pero ella era diferente, tanto que esa extrañeza cautivo a un demonio, pero que podía hacer el ante ser tan extraño.

Se reía de el dolor y jugaba con la muerte, quien seria el para detenerla, jamas la había visto llorar, jamas había derramado ni una sola lágrima ante el ni ante nadie, ¿Porqué la veían como  un ser insignificante y débil? No necesitaba que la metieran en una burbuja, desde que tenia memoria su madre le contaba como era el mundo de cruel, sus melancólicas canciones de cuna, era su única compañía en aquellas incesantes noches de tormenta.

Borrosos recuerdos que había olvidado en alguna parte recóndita de su mente surgieron como espuma en el agua, atormentando sus pensamientos.

—Mamá, ¿Porqué no podemos dejar que otras razas nos conozcan?

—Es simple mi pequeña, ellos son como lobos.

—¿Qué es un lobo?

—Una bestia salvaje.

—¿Cómo las bestias que los marineros cuentan que habitan en el mar?

—Si pequeña, solo que ellos no nadan, ellos habitan en la tierra.

—¿Pero porque las otras raza son como ellos?

—Porque ellos son malos, solo buscan lastimar, no se si te conte sobre aquella raza, los demonios, cuando yo caminaba por la tierra todos los odiaban y les temían, buscaban acabarlos.

—¿Porque solo las diosas pueden saber de nosotros?

—Porque no pudimos ocultarnos de ellas.

—¿Cómo es el mundo exterior?

—Es cruel y frío, todo haya arriba es peligroso mi pequeña.

—Peligroso...

—Exacto mi niña, pero ya es hora de dormir.

—Si mamá, aunque tengo una duda mas ¿Que sucedió con papá? Ya no lo e visto

—Esas personas que caminan en la tierra se lo llevaron. Ahora si, es hora de descansar mi niña.

—Me cantarías algo mami, por favor.

La dulce voz de su madre llego a su mente, como aquellos tristes versos que fueron su única compañía durante mucho tiempo, el suave murmullo de las olas acompañaba aquellos recuerdos.

Dejaste tanto en mí.
En llamas me acosté.
Y en un lento degradé.
Supe que te perdí.
¿Qué otra cosa puedo hacer?
Si no olvido, moriré.~

Aquellos tristes versos atormentaban su mente recordándole la melancolía de su raza, todos esos recuerdos eran tan vívidos como si los estuviera reviviendo todos uno por uno, lentamente, sintiendo como si miles de dagas atravesarán su pobre corazón, ni siquiera recordaba cuanto tiempo había pasado de aquello.

—Mi pequeña, por favor, huye de aquí, ellos vienen por nosotros.

—Pero mamá...

—¡Huye! Si no lo haces nuestra raza perecerá.

—¡Reina Atenea, estan aquí!

—Saquen la de aquí, los detendremos.

—Señora, lo mejor seria que usted tambien huyera.

Revelación. (Meliodas y Tú) #1[EDITANDO]Where stories live. Discover now