KALEB ® {03}

Capítulo 1.

— Para. —Me dice. Lo hago apartándome a un lado de la carretera. — No podemos tardar, tú tienes clase.

— Mamá.

— Ni mamá, ni nada. Tienes que ir a clase y hoy irás con tu propia moto.

Sin rechistar, conduzco de nuevo hasta casa y la dejo allí. Todos están preocupados por mí, por mi edad y por lo que eso representa en estos momentos. Realmente me tiene sin cuidado los ataques de quiénes desean matarme cuando cumpla la mayoría de edad. No les tengo miedo, ni siquiera me causan una pizca de preocupación ¿De verdad merece la pena tener tanto cuidado? Si alguien llega a aparecer y hace algo contra mi, sencillamente lo mataré.

— ¡Kaleb Walker! —Exclama Alanna. — ¿De dónde ha sacado semejante cosa?

— Papá me la ha regalado. —Contesto mirándola— y como lo ha hecho, he decidido venir por ti para ir a clase.

— ¡Un momento! —Exclama la tía Janet. — ¿Pretendes subir a mi hija en la moto?

— Pretendo no, lo haré. —Bajo de ella y me aproximo hacia la tía. — Vamos tía, si quieres también puedo darte una vuelta.

— Pequeño seductor. —Ríe. — Prométeme que tendréis muchísimo cuidado.

— Lo prometo.

Los dos subimos a la moto bajo la mirada amenazadora de Janet, ella siempre tan cuidadosa. Papá dice que cuando eran jóvenes no la soportaba, que era irritante, metomentodo, muy habladora y excesivamente perfeccionista. Supongo que ha cambiado poca cosa, porque desde que la conozco es así.
Alanna se sujeta a mi muy fuerte. Llegamos en pocos minutos al instituto, un instituto posicionado en el medio del pueblo, con el nombre de: Instituto de la Luz. Papá estuvo presente en la inauguración y también lo estuvo mientras lo construían, creo que tuvo mucho que ver con el nombre e incluso con el nombre del pueblo: New light.

— Parece que todos miran tu nueva moto. —Me susurra Alanna.

— No me importa.

— Ahí está Allison ¿Qué le dirás? Lleva desde el Viernes tratando de comunicarse contigo. Creo que esta muy enfadada.

— Sé que tengo que decirle. —Pongo la mano en su cabeza—. Déjamelo a mi.

— Ten mucho cuidado.

— ¿Me estas diciendo qué tenga cuidado? ¿Tú? —Me burló nuevamente de su estatura—. Enana ve a clase, que yo me encargo.

— Imbécil.

— ¡Ve! —Resopla enfadada.

Dejo la moto estacionada, cojo las cosas y me aproximo a la puerta de entrada. Allison se posiciona frente a mí y me propina una fuerte pero merecida bofetada.

— La merezco. —Le agarro la mano antes de que me propine una segunda—. Pero no volverás a golpearme.

— ¡Te esfumaste! Cada vez que he ido a buscarte me has estado ignorando ¡Joder! Dijiste que no estabas y te vi asomado minutos más tarde ¿Crees qué soy tonta? No puedes jugar así con mis sentimientos Kaleb.