Conflictos de Edad (Hank X "Lectora")

Capítulo Cuarenta y dos [Pasión]

Narradora: Raven Knight

°FECHA: 09 DE NOVIEMBRE, 2038° °HORA: 22:42:23°

Pude sentir su mirada de reojo, era intensa y me juzgaba como ninguna. El camino de regreso a mi casa fue terrible, aunque no hablamos, no necesite ninguna de sus palabras para sentirme peor que la misma basura; aquella basura que solo podía mirar la hilera de edificios común en Detroit. Sabía qué no había hecho nada malo, pero aun así me sentía como la villana de la historia.

Finalmente, cuando ambos llegamos a casa, Hank me obligó a bajar tal cual como me había traído. Quitándome las llaves de mi abrigo, él me "lanzo" sobre mi sofá nada más cruzar el pasillo principal.

—Hank... —Intente decir para llamar su atención— Y-Yo-

—¿¡En qué diablos estabas pensando!?.

—¿Eh?.

—¿¡Cómo qué "¿Eh?"!?. ¿¡Siquiera estás pensando por lo que acabas de pasar!?.

Siendo objetivos, era cierto que mis acciones no fueron las mejores, y que seguramente de haberlo pensado en frío, hubiera cambiado una que otra cosa, pero siendo un momento de tal desesperación, ¿qué esperaba Hank que hiciera?. Honestamente, ninguna "guerra" fue solucionada porque alguien se asomó frente a dos mandos armados disparando el uno contra el otro.

—H-Hank... mi vida estaba en riesgo...

—¿¡Y por qué te subiste al jodido carguero entonces!?.

—Porque quería ayudar...

—¿¡Ayudar como!?. ¿¡Siendo el escudo de los divergentes!?.

Estaba impresionada, siendo honesta, comprendía que Hank se sintiera enojado conmigo por mis estupideces y hasta que me "rebajara" para hacerme sentir como la villana de la historia (como destaque antes), pero estaba exagerando; estaba exagerando demasiado.

—Bueno, perdóname entonces por intentar hacer el bien.

—¡No te estoy cuestionando el que hagas el bien, Raven!.

—¿¡Entonces qué tanto quieres cuestionar!? —Le pregunté ya cansada— ¡Vamos, dime qué tan-

—¡¡El que no me dijeras nad-

—¿¡¡Y por qué debería decirte algo a t-

—¡¡Porque...!! —Dijo sentándose de golpe a mi lado— Eres... lo último que me queda en este mundo, Raven.

—......

Y así, asimilando lo dicho por Hank, ambos permanecimos sumidos en un completo silencio. Solo en ese momento, comencé a arrepentirme completamente de mis palabras.

—Y-Yo- —Logré decir— No pensé... que pensaras así de mí.

—Yo tampoco, pero últimamente,} no he podido evitar sentir una preocupación por ti —Se explicó suspirando— No me malentiendas, cuando hablo de preocuparme no hablo de envolverte en papel burbuja y no dejarte salir de tu casa; eres fuerte y eso puedo notarlo, más con lo ocurrido hoy, pero luego de lo de... Cole, simplemente me cuesta arriesgarme... a confiar en que nadie más importante para mí morirá.

—......

—Aunque entiendo si no piensas ig-

—Yo... también me he sentido así —Dije acomodándome correctamente sobre el sofá— Ya sabes mi historia y la relación tan cercana que tuve con Blake; no tengo para que explicártelo nuevamente, pero incluso si tú y yo pues... no compartimos la misma cercanía, la verdad es que tú también te volviste muy importante para mí... demasiado.

No creía que fuera el mejor momento para decir todo lo que estaba pensando, después de todo, habíamos levantado la voz como unos locos hace tan solo minutos, sin embargo, justo cuando mirar al suelo de madera parecía ser mi única solución para marearme y desmayarme (o al menos, como última opción en los peores casos), Hank se acercó un poco más a mí.

—Pensé creías que era un calvario para ti...

—¿U-Un calvario? —Le pregunté impresionada. Solo ahí pude mirarlo fijamente a los ojos— Hank... Es cierto que al inicio si era incomodo pensar que un desconocido se estaba preocupando por mí, incluso algo molesto en cierto punto, pero siendo honesta incluso si no ha pasado tanto tiempo... poco a poco se sintió... lindo, pensar que alguien estaba preocupado por lo que pasara conmigo.

—Y pensar que yo también me sentí igual —Respondió soltando una aparente risa nerviosa— Capaz qué tenemos en la cabeza para apreciar a gente igual de dañados que nosotros.

—O... en el corazón...

—......

Ninguno de los dos rompía el contacto visual, casi como si hacerlo hiciera terminar con la vida del otro, y antes de darme cuenta, puse mis labios sobre los suyos. Durando el beso solo unos cuantos segundos, rápidamente me separé de él.

—Ay... no, no, no, no —Le dije levantándome de golpe del sofá— ¡C-C-Como lo siento, por favor... P-Perdóname!.

—Raven... —Intento decirme. Al estar tan nerviosa, solo podía caminar de lado a lado— ¡Raven!, tranquila... está bien...

—¿E-Esta bien?. Hank... ¡T-Te bese!. M-Mira... estaba triste, tu estabas triste... los dos... simplemente fue algo del momento. N-No me odies por fa-

Sin darme tiempo a reaccionar, Hank me sujeto por mis brazos para luego, entregarme un abrazo.

—Raven... tranquila... Todo está bien.

—P-Pero...

—No tienes que dar ningún "Pero" —Dijo apoyando mi rostro sobre aquel hueco en su cuello— Está bien... Raven, realmente está bien.

Con mi corazón colgando de un hilo, ambos nos miramos a los ojos, y aunque ninguno dijo nada en específico para que el otro entendiera, aun así, los dos nos fundimos en un nuevo beso. Al inicio, aun me sentía nerviosa, después de todo, nunca esperé que esto pasara (y tan rápido), sin embargo, cuando los besos comenzaron a aumentar, logré tener el valor suficiente para rodear su cuello con mis brazos.

—Me lancé al agua luego de correr por minutos... —Dije sonriéndole nada más separarnos unos centímetros— ¿No te molesta...?.

—No... para nada...

Confirmando aquello, Hank nuevamente volvió a besarme. Yo estaba feliz con esto, aunque nadie dijo nada de "Novios", yo de verdad estaba feliz con lo que estaba pasando, sin embargo, justo cuando pensaba que los besos eran lo mejor que me podía estar pasando, Hank puso sus manos donde llega la espalda baja. Al inicio, pensé en detenerlo, ya que para mí, esto estaba llegando demasiado lejos y capaz hasta donde podía llegar si seguíamos así, sin embargo, ya soy una adulta responsable.

—(Entonces... ¿Qué importa?).

Sujetándolo por sus muñecas, pude sentir como el cuerpo de Hank se tensaba; puesto seguramente pensaba que iba a quejarme por su acción, pero enseñándole lo contrario, logré poner sus manos sobre mi trasero.

—(Ya era hora de entrar en calor...).

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-Aquí esta mi idea ordinaria. De nada.

-Fin del capítulo cuarenta y dos [Pasión]

-Escrito por: @Lady_moge (🕸️Lady Moge🕸️)

-Fecha de la publicación: 25/09/2021

-Palabras en total: 1061

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