Intransigente. © [YOONSEOK.]

Enfrentados

La primera audiencia es pronto, en la que no se pudo llegar a un acuerdo pues Joo y los demás niegan renunciar a sus acciones, y aunque se les está acusando de más delitos como conspiración y intento de homicidio, aún les falta un poco para poder encarcelarlos, logrando que su humor sea frustrante cuando han salido de los juzgados, no obstante la gota que derrama el bazo es que Joo se atreva a alcanzarlos, prosiguiendo a molestar ahora que no está el juez presente.

—Eso le pasa a los soplones que se meten en los pantalones del jefe—se ha ido contra Hoseok, por supuesto soltando mierda desagradable ante su persona, logrando que el señor Min inmediatamente salte en su defensa.

—No te acerques a Hoseok, que nunca has podido estar a su nivel.

—Ni tú—Joo contradice.—Solo eres su marioneta y casi lamento que no hayas muerto.. o él en su lugar para que carguen con remordimientos.

—¡Hijo de..!

Yoongi intenta lanzarse sobre él, sin embargo Hoseok le detiene como puede, sin lastimar su brazo enyesado, pero interponiéndose para evitar problemas.

—Tranquilo Yoon, eso es lo que él quiere, y no estamos a su bajo nivel para rebajarnos.

—Lo que quería es librarme de ti, maldito bocón.

—¡Fuiste tú, maldito hijo de puta! ¡Tu hiciste esto!.—el señor Min estalla, preso de la rabia de escucharlo admitir lo que hizo, totalmente indignado por además verlo sonreír como si casi no lo hubiese matado.

Lo peor es que el maldito continúa.

—Lastima que fallé, pero puedo volver a intentarlo.

—¡No atrevas a tocarlo o voy a..!

—No, Yoon, no —Hoseok le detiene, siendo el único con poder para frenarlo.—No hagas una amenaza frente a todos—insiste, casi arrastrándolo consigo, logrando que Yoongi por fin lo mire, aún dominado por la rabia, más no lo suficiente para cometer una estupidez.

—Tienes razón..—concuerda, después mirando hacia ese idiota que no ha sido más que una sucia piedra en su camino, y dice:— Vete a la mierda, voy a quitarte todo. Ya verás.

Luego, se deja guiar hacia afuera, donde su precioso ángel se encarga de abrazarlo, orgulloso de saber que mantuvo la compostura en un momento en que le sería difícil a cualquier hombre.

—¿Estás bien?.

Asiente, apenas pudiendo respirar con normalidad, no dispuesto a seguir con la misma cosa.

—Vámonos de aquí, no te quiero envuelto en esta mierda.

🍷🍷🍷

Más tarde, ya en la mansión se ha perdido en ese cuerpo al que hace bastantes semanas no ha podido tener, sin embargo Hoseok es quien a insistido pues desea que estén juntos, ya demasiado afectado con todo lo sucedido como para no desahogar energía haciendo el amor.

Así que Yoongi lo toca con aún más delicadeza que nunca, fallándoselo en una posición donde no le lastime, ni les moleste su brazo enyesado. Siempre manteniendo su rendimiento a hacerlo disfrutar, sabiendo que puntos tocar y como empujar hacia su punto dulce para tenerlo sollozando de placer, siendo el sexo una vez más un potente bálsamo a las heridas que ambos tienen encima, y siendo la manera en que sus cuerpos alcanzan a quemarse con fuego para luego alcanzar paz.

Es exaltante y dulce como el infierno, mientras gemidos suaves y agónicos salen de sus labios cada que sienten las electrizantes sensaciones producidas por el placer de sus cuerpos chocando con violencia, cuando también las manos del mayor se tatúan en esa cintura que sostiene con fuerza, mientras golpea dentro del perfecto culo de su asistente con rapidez y violencia, a la vez que el chiquillo se masturba a la misma velocidad que siente las estocadas en su interior, siendo fácil alcanzar el tan ansiado orgasmo que los hace tocar el cielo.

Y lo más increíble es notar el momento exacto en que Yoongi también se libera dentro de su cuerpo, siendo también el momento en que su ángel le ha llevado al cielo.

—¿Todo bien, amor?—pregunta una vez que todo ha acabado, pues aunque supo mantener el equilibrio de follarlo con fuerza y a la vez tratarle con delicadeza, teniendo cuidado con su brazo enyesado, desea escucharlo decir si lo ha lastimado o no.—¿Duele?.

Pero el pequeño Jung es un cínico que disfruta tanto esas escenas aun cuando tiene el cuerpo lastimado, y agradece por fin haber vuelto a sus brazos a pesar de no estar del todo recuperado.

—Estoy bien—le asegura, porque en verdad no le duele más que su bonito culo abusado, y porque joder, se siente satisfecho como cada vez que han tenido sexo en la vida.—Te extrañaba tanto, y además ambos necesitamos un momento juntos. Tenemos mucho estés encima.

Yoongi se pone de pie no sin antes besar sus labios, y los deditos de su brazo enyesado, agradeciendo no haberlo lastimado, prosiguiendo luego a caminar hacia el mini bar para servir para ambos una copa de vino, y así refrescar sus gargantas después del momento.

—Es tanto encima, ángel, que no se cómo sobrevivimos —le entrega su copa y luego se sienta a su lado, ambos aún desnudos y permitiendo que pase la adrenalina de lo vivido.

—Te prometo que acabará pronto—Hoseok le asegura.—Se que ganarás, y podremos volver a trabajar juntos de nuevo, pero no debemos caer ante sus provocaciones, ya nos hicieron demasiado daño como para no permitir que saboreemos la venganza al quitarles todo.

El mayor da un trago a su bebida, confiando en las herramientas para librarse de esto, en su abogado que después de todo ha demostrado ser un magnífico aliado, y sobre todo, confía en el maravilloso hombre que tiene a su lado.

—Se que si, solo debemos acabar con ellos.

El más chico le sonríe, con esa pizca de maldad en sus ojos que demuestra no ser del todo un ángel, pues es capaz de hacer todo para devolver el daño hacia el enemigo, sobre todo ahora que se ha aleado para liderar Min Enterprise, junto al hombre del que se ha enamorado.

—Lo harás, amor. Y vas a demostrar porque no debieron meterse contigo.

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