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No debería ir. Debería quedarme en casa o llamar a Taeil, o ir a verle. Las palabras de Daehyun resuenan una y otra vez en mi cabeza. Quiere formar una familia conmigo, quiere hacer las cosas correctamente... Y quiero creer que eso es verdad pero no puedo. No puedo... No puedo dejar que me hagan daño de nuevo, se que aun estoy demasiado resentida con el. Pero tampoco debería salir con Han Gyul, no puedo enamorarme de el por mucho que mi cabeza suplique lo contrario. Imagino que quizás a su lado las cosas serian mucho mas fáciles, todas las piezas encajarían sin apenas hacer un esfuerzo. Pero ya no puedo elegir eso porque el amor no me ha dado opción a ello. En giro de planes esta noche me reuniré con Han Gyul, mis padres y los suyos como la otra vez aunque espero que sea una cena mucho mas agradable. Mi madre prometió que no habrían sobresaltos y debo suponer eso porque estaremos cenando en un lujoso restaurante en la zona mas elegante de la ciudad y nadie va a querer dar un espectáculo. 

Pero no quiero ir, quiero ir a ver a Taeil. Y a pesar de que podría haberlo echo hace un par de días o quizás visitarle mañana en la tienda en la que trabaja quiero hacerlo ahora a pesar de que ya me he comprometido a asistir a lo anterior mencionado. Acabo de arreglarme aun con miles de dudas en la mente, abro la puerta de mi piso aun esperando de forma algo tonta que Taeil se encuentre ahí aunque para mi mala suerte no esta. Suspiro antes de tomar el ascensor, acaricio mi vientre con cariño.

 - Le quiero, cariño.- Hablo para mi hija.-Le quiero muchísimo pero es difícil para mi, se que me entiendes. Ojala pudieran ser la cosas de otro modo... 

Muerdo el labio inferior para reprimir las ganas de llorar, no puedo estropearme el maquillaje. En cuanto salgo a la calle veo el lujoso coche de Han Gyul y el dentro, no me hace observarle de cerca para saber que va exquisitamente arreglado. Tengo que decirle que esto no va a ningún lado, que no podemos seguir así... Lo hare despues de la cena, no quiero hacerle pasar un mal rato. 

- Hola, estas preciosa.- Me saluda nada mas sentarme. 

A su lado no parezco gran cosa, viste un traje de chaqueta y pantalones negros junto a una camisa blanca sin corbata. Su flequillo cae abierto en dos segmentos por su frente de forma elegante y luce un reloj seguramente bastante costoso. 

- Gracias.- Respondo colocándome el cinturón. 

Sonríe haciéndome sentir culpable.

- ¿Te encuentras bien?- Me pregunta mirándome atentamente. 

- Si, si...- Miento.- Es solo que estoy algo cansada, ya sabes...

- Llegaremos en poco rato.- Me promete.- Allí te sentirás mejor. 

Dudo que eso sea verdad, el solo echo de tener que ver a mi padre de nuevo me pone realmente nerviosa. Antes que el coche arranque miro de nuevo hacia la portería de mi edificio esperando ver a Taeil pero sigue sin estar ahí, bajo la mirada algo triste. Como de costumbre la conversación con Han Gyul es amena, lo que me ayuda a relajarme un poco. Cuando llegamos admiro el lugar, las luces iluminan perfectamente cada rincón del restaurante. Tanto mis padres como los suyos aun tardaran un poco así que decidimos esperarlos en los jardines donde cientos de hiedras cuelgan de las paredes dándole un toque romántico al espacio. 

-Tengo que hablar con ellos antes de la cena.- Informo mirando la pequeña fuente en el centro del jardín.- No será mucho rato, es algo importante.

- Esta bien, les avisare y los traeré aquí. ¿Si?- Se ofrece. 

- Gracias.- Murmuro. 

Nos sentamos en uno de los bancos de piedra, veo como flexiona su pierna izquierda mientras que la derecha la deja extendida. Me concentro en los pequeños detalles de mi alrededor deseando que el tiempo pase rápido aunque parece que lo haga mucho mas lento de lo normal burlándose de mi a propósito. Al fin veo a lo lejos a mis padres entrar bien juntos, Han Gyul se acerca de forma rápida para avisarles. La expresión de mi padre es de confusión cuando avanza hacia mi, sus cejas se juntan mas y mas a medida que se acerca a donde estoy. 

Call Boy (Moon Taeil)Where stories live. Discover now